El Café Tomaselli presume de más de 300 años de tradición. Es de suponer que el famoso compositor, Mozart, visitara este café de la pequeña ciudad de Salzburgo. Sus espacios son cálidos, con mesas de mármol, paredes de madera con pinturas antiguas, camareras con cofias y camareros con traje... También se enorgullece de ser el más antiguo café vienés que conserva Austria.
Los turistas, abundamos, para qué mentir, y si bien sus dulces son muy buenos, tampoco son demasiado notables, el café, tampoco es nada especial. Aunque las comparaciones son odiosas, creo que sigue siendo Demel la reina imbatible de la repostería y el café en Salzburgo.
Por otro lado, no es muy económico... pero debo decir que me encantó el servicio que prestan, de los camareros pasar con una bandejita con dulces variados y uno puede escogerlos allí mismo. Para un goloso, eso es un sueño.
Alter Markt, 9
5020 Salzburgo
Teléf.: +43/ 662 844 4880
Web: Café Tomaselli
Lo conocí y no me gustó demasiado, lo que menos el ambiente, y realmente los pasteles no eran cosa del otro mundo.
ResponderEliminarYo jamás tomo café, de eso no puedo opinar.
Bonitas fotos.
Besín
Qué bien, Isabel, tal como dices, no es gran cosa, pero no está mal-.
ResponderEliminar¡Qué envidia de lugar! Seguro que tiene un encano especial.
ResponderEliminarY ese dulce........ mmmmmmmmmmmm
Besos.
Pues yo aunque sea en este café "pasable" me iría a pasar la tarde tan ricamente entre amigos.
ResponderEliminarEs bonito, tiene historia y es una pena que crean que ese es crédito suficiente para mantener su categoría. Espero que reaccionen y los pasteles y todo en general mejoren mucho, así cuando yo vaya, ya estén mejor jejeje.
Un beso y gracias por los apuntes.
He pinchado en el enlace del otro café de la ciudad y sin duda, tiene una pinta increíble, más seductora que este café. Sin embargo, he de reconocer que el hecho de saber la historia que tiene detrás, imaginarse la de personajes que pasaron por aquí, como tú cuentas... todo eso le da un sabor que aunque no sea visible, seduce para traspasar sus puertas y sentarse a tomarse algo aunque sea sólo una vez.
ResponderEliminarUn saludo Claudia.
Silvia, encanto, lo tiene, claro, tiene muchos más salones de madera, con espejos, muy bonito sin duda.
ResponderEliminarViena, Delikat, tenéis razón, vale la pena ir y probarlo... ya pasar la tarde con los amigos, pues lo máximo.
El otro café, también es antiguo, lo que pasa es que tiene varias salas, una antigua y otras modernas.
Saludos y gracias por dejar vuestras opiniones.
Hola Claudia, también a mí me gustaría pasar un rato en este lugar aunque sea de pasada y hacer volar la imaginación con todos los personajes que han pasado por ahí, también pienso que es una pena que los dueños no tengan mucho interés en ofrecer calidad en un lugar tan emblemático, cosa que después vienen las consecuencías del abandono total.
ResponderEliminarBesotes.
Que bueno Claudia que vayas de avanzadilla, para otear el horizonte y prevenirnos de falsos espejismos. Salzburgo es una de mis (muchas) asignaturas pendientes, que tendré que aprobar en la repesca.
ResponderEliminarHola Claudia.
ResponderEliminarHace más de diez años que no voy por Salzburgo y no me acuerdo para nada del café Tomaselli. Sólo me acuerdo de que pasé un frío negro y que los pájaros cantaban haciendo unos lindos trinos, sin duda para demostrar que eran paisanos de Mozart.
Lo que me ha chocado en la web del café es la selección que hacen de huéspedes ilustres. Nada menos que mezclar Mozart con Niki Lauda. Eso es ser ecléctico.
Oteador, sí, Salzburgo es una ciudad muy bonita, la verdad, aunque bastante pequeña, con un día da para visitarla.
ResponderEliminarSorokin, jajaja, tienes razón, también me decepcionó la lista.
Uno de mis sueños es visitar Salzburgo, y sentir un poco más de cerca la presencia de mi compositor favorito. W.A. Mozart cumplirá años conmigo el próximo 27 de este mes.
ResponderEliminar¡Viva Mozart siempre!:
http://www.youtube.com/watch?v=gbhvSp8HB34&feature=player_embedded
Un abrazo y gracias por compartir tus comentarios y bonitas fotografías con nosotros.
Pues vale pena. es pequeñita pero coqueta como pocas. Para los melómanos es una ciudad ideal, en la que siempre hay conciertos de música académia y festivales importantes. Seguro que este 27 también tendrán una buena celebración.
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