01 septiembre, 2018

Dos años

Dos años desde que Isa nos dejó tras un desgraciado encuentro en las calles de Port au Prince. Aquel momento, sentí que el mundo se venía abajo, que se había vuelto loco y que no podía ser que ese país tan necesitado, pudiera prescindir de quién tanto le ofrecía. 
Y son solo dos años. Y me parece mucho más. Porque yo, personalmente, he seguido, viviéndola, sintiéndola y compartiéndola con otros.
Como siempre, a toro pasado es cuando hubiésemos querido hacer tantas cosas. Hablar, compartir, aprender, disfrutar y ser mejor persona por ella. Cuantas oportunidades perdidas.

Y su legado?
Placa en el jardin interior creado por
Cludette Lapointe en Warwick (Rhode Island)
La idea de mantener su recuerdo y la continuidad de sus proyectos y acciones, me abrumó y me absorbió en los siguientes meses. Enseguida me propuse luchar por conseguir que su muerte no fuera en vano (ingenuo de mí). Pronto aprendí que la palabra "legado" no liga bien con la palabra "rápido". Fui aprendiendo que es un concepto lento por naturaleza, pero a la vez, puede ser perfectamente  firme y solido. Y es cuando más valor tiene.
Durante este tiempo, me he rebelado, me he encendido y enfadado por no ver acciones rápidas, concretas que capitalizaran el trabajo y esfuerzo que Isa había dedicado en su vida. Me parecía que todo ello se volatilizaba.

Me ha costado mucho entender que todo aquello no se pierde, si dejamos que fructifique en nosotros.
Y probablemente esa sea la clave. Entender que "fructificar en nosotros" no se mide por lo que hacemos, sino por lo que somos. 
No se trata de reproducir lo que ella hizo, vivió o consiguió sino lo que ella nos enseñó simplemente "siendo". Ese es el verdadero legado. Su entrega a los demás por encima de un taller de prótesis. Su amor por los más desfavorecidos, por encima de una escuela. 

Aquello que Isa nos dejó, fue sobre todo su forma de ser, su fuerza y su fe. Y eso es lo debe crecer en nosotros. En nuestro interior. Como aquel bambú que genera raíces muy lentamente y con muy poca visibilidad, hasta que un día, de repente, empieza a surgir el tallo y comienza a crecer de golpe. 
Y todo ello, no impide que sigamos luchando por mantener también aquellos proyectos que tanto le ilusionaron, pero con una mirada amplia. mejor que inmediata. Sigue quedando mucho por hacer ser.
Son dos años. ¿Ya?
Me pregunto como debo tener mis raíces.

08 abril, 2015

Somos?

Tonto es aquel que hace tonterías, decía la madre de Forrest Gump. Aunque es muy discutible. ¿La acción comporta naturaleza?
Tery es mi teripuerta. Ojo. No soy disxélico; es solo una forma de reducir peso y gravedad a una actividad clínicamente sospechosa.image1
Tery me dice que quizás debiera revisar mi asertividad. Glups! Y no contenta con eso, me hace notar el peso de la vanidad en mí. Más Glups!. Vanidoso y poco asertivo. Ay! Golpe bajo. No puedo negar que me sorprende. Además dicho en pocos minutos. Eso sí. Muy asertiva ella. Ale. Jarro de agua fría y a correr. Uf!
Y voy yo y le pago por decírmelo! Y encima ella, va y lo cobra!
Bromas aparte, la reflexión que me provoca es si realmente soy poco asertivo o acaso es simplemente cierto en algunas ocasiones y en acciones aisladas. Soy vanidoso de fábrica o es un accesorio de quita y pon que me instalo cual plug-in, de vez en cuando?
Estamos de nuevo ante el tan debatido tema de las etiquetas que nos gusta poner a todo para sentirnos cómodos y todos lo hacemos. Nuestro cerebro busca economizar e identificar el entorno que le afecta. Recordemos que siempre buscamos la eficiencia energética y por tanto, intentamos definir patrones y etiquetas para no tener que pensar de forma continua si puede ser evitado. Eso cansa mucho. La solución: Etiquetar.
Evidentemente que Tery no me está acusando de SER esos calificativos. Son nuestras acciones, en momentos determinados las que pueden consideradas de una u otra manera. No nosotros. No las personas. Pero tenemos mucha facilidad para juzgar personas en vez de hacerlo con los hechos o acciones. Claro que si habitualmente echamos mano de las mismas reacciones, nos acabaremos ganando el calificativo con razón. El que reacciona sosamente de forma continua, ES un soso de narices y punto.
Debo revisar mi asertividad en ciertos campos de mi vida. Sobre todo en aquellos en los que no me siento cómodo siéndolo. Deberé aprender porqué y que me impide serlo. Deberé revisar mi vanidad. Como se refleja en mi día a día? Y yo que pensaba que eso no iba conmigo!
Como hacerlo no es tema de este escrito. De hecho no tengo ni idea de cómo. Pero bueno, para eso tengo a Tery. Y según me dice… el como, no debe preocuparme.  Pues vale.

21 abril, 2011

Finalmente lo soy!

Han transcurrido 7 meses desde mi último post. Retomo el hilo de lo escrito puesto que considero interesante para mí seguir con el tema del Déficit de Atención.

A día de hoy, efectivamente he comprobado que lo soy. TDA inatento. Ahora quiero confirmarlo con un adecuado diagnóstico médico. A buenas horas, mangas verdes! (De donde vendrá ese dicho? *).

Bien es cierto que he tardado mucho en la verificación. Yo no sé si sería por un cierto miedo al resultado o por absoluto escepticismo, pero en cualquier caso, me alegra sobremanera el hallazgo. Y esa es la clave de todo. Probablemente esa sea la razón de regresar al blog.

Se me abren ahora nuevos caminos y muchas posibilidades de cambio al disponer de nuevos recursos para mejorar. Me reconozco ilusionado. Y esa ilusión, me lleva a revisar y profundizar mis vivencias pasadas y aplicarles ahora el filtro del TDA para así entender muchas de las cuestiones que marcaron mi vida.


Mi pequeña historia (I): Hasta el día de hoy, he ido trampeando en mi vida diaria y, como el común de los mortales, desarrollando mis propias herramientas para afrontar un día a día que siempre he considerado “normal” y quizás hoy debería llamarlo más adecuadamente “habitual”, puesto que ahora me hago consciente de que en sus inicios no fue tan normal y en cambio si que fue efectivamente difícil. Difícil por las capacidades disponibles frente a las condiciones exigidas en aquellos momentos. Pero para mí, aquello era mi día a día sin más y por tanto mi normalidad.

Mirando atrás, hoy debiera reconocerme ese esfuerzo adicional aplicado durante buena parte de mi vida. Permítaseme la exageración metafórica de equipararlo a hacer un Camino de Santiago transformado en una “pista americana”. Agotador. Pero a pesar de haberlo hecho con cierto dolor y sufrimiento, lo hice sin ninguna consciencia de que haber estado aplicando recursos forzados para rellenar carencias. Desconocedor de ese sobreesfuerzo, para mí, las carencias que yo pudiera tener no eran físicas (mejor debiera decir, químicas), sino simplemente limitaciones de valía personal. Yo no daba para más. Simplemente sabía que no daba la talla y como no sabía las razones, ello me provocaba una constante insatisfacción y realzaba un nivel de auto exigencia desmesurado, con el fin de atender a las expectativas que en aquel momento mis mayores (padres, profesores, etc.), tenían de mi.

Hoy se le llama “Trastorno por déficit de atención” y está adecuadamente documentado, estudiado y demostrado que responde a causas biológicas, frecuentemente de componente genético.

La tontería de saberlo, no cambia nada de mi pasado pero me aporta una radical diferencia en la visión y enfoque del futuro. Porque ahora se que podré encontrar medios y recursos para conseguir nuevas metas. Bienvenido a una nueva época. 
Ilusión y Esperanza.

26 agosto, 2010

Soy TDA?



inatento?
Estos días, he tenido en casa la visita de unas amigas, (dos, para ser exacto), con el defecto de ser neuropsicólogas. Ciertamente reconozco que desconocía el alcance de esta profesión, hasta que entré en la wikipedia y me aclaró que “es una disciplina fundamentalmente clínica, que converge entre la psicología y la neurología“. Bien. Gracias. ¿Que hariamos sin internet? 
Vuelvo al hilo. Estas buenas amigas (y viceversa), nos comentaban algunos aspectos de la problemática de mi hija y su TDA (del cual ya escribí, años atras en un post). En la conversación, se hizo referencia a los aspectos genetico-hereditarios del síndrome y fue entonces cuando tuvieron el “deslíz” de encasillarme como un TDA bastante evidente a mi también. Ah! Sorpresa! ¿Yo un TDA? Y no sólo eso, sino que probablemente era además un “cognitivo lento”.
Ah! No! Eso si que no! Hasta ahí podríamos llegar! Les discutí su banal diagnóstico y me torpedearon con algunos síntomas que habían percibido en mí, que si bien debo aceptar que eran ciertos, me cuesta aceptar que sean causa suficiente y determinante. 
Les espeté que si nos poníamos en este plan, más del 50% de la población padecería el trastorno de Deficit de Atención. Me respondieron que tal proporción no era el caso, pero que si que se podía estimar que muchos adultos lo eran y no habían sido nunca diagnosticados como tales, puesto que en su infancia no era conocido dicho sindrome.
Acepto que frecuentemente desconecto de mi entorno y me quedo en mi mundo interno. Acepto que tengo el problema de dejar frecuentes tareas o proyectos a medias y sin acabar (vease la discontinuidad de este blog-guadiana). Acepto que a veces me cuesta concentrarme en mis tareas cotidianas. Y ciertamente nunca fui un buen estudiante, sino más bien pésimo.
Pero acaso tú, que me estas leyendo, no padeces también de varios de esos síntomas?  Venga... reconócelo! A que si?  Pues que sepas que igual te diagnostican a ti también como te descuides. Vigila a tus amistades, no sea que tengan estudios neuro-psicológicos. A pesar de todo, a mis amigas las sigo apreciando, pero eso si, procuraré no tocar más este tema. Lagarto, lagarto. 
De todas formas y sin que ellas se enteren, voy a hacer la prueba de comprobar la medicación de mi hija a ver si resulta que se me conectan los neurotransmisores y me vuelvo supereficiente y productivo! Que chollo!
Si eso funcionara, debo decir que me quedaría muy sorprendido, descolocado y sin saber a que atenerme. La cuestión clave, será entonces si el hecho de saberlo, me servirá de algo o no.
Maldita la gracia!

15 agosto, 2010

Halfyear iPad

Cuando Apple presentó el iPad en el pasado 27 de Enero, me sorprendió mucho la cantidad de decepciones que produjo en aquel momento mayoritariamente entre los incondicionales.
Quizá no debiera decir decepciones sino dudas respecto a su futuro e incluso ataques encarnizados. Recuerdo leer blogs y escuchar podcasts resaltando las limitaciones del nuevo gadget incluso de reconocidos expertos como Jennifer Franco. Carencia de FlashPlayer, de conexión USB y la consabida multitarea, optar por el iOs en vez de consolidar el OSX, etc.
Yo, por el contrario, y desde mi ignorancia del tema, quedé fascinado con la propuesta. Me pareció genial el mensaje del sofá de Steve Jobs y el cuidado posicionamiento de producto que hizo entre un iPhone y un portatil. Aquello era claramente revolucionario y no por el producto en si mismo, que muchos miopes tildaban de no ser mas que un iPod touch grande, sino por el nuevo horizonte de utilización que comportaba. Desde el primer momento creí entender que aquello era una nueva puerta a nuevos hábitos y marcaria un antes y un después. Fue claro que yo sería un "early-adopter". Pero no me pareció que esa visión la compartieran muchos. La gran mayoría se remitía a posteriores evoluciones o al desarrollo de las aplicaciones, cuando era evidente de que la AppStore iba a dar cauce a toda la usabilidad del nuevo juguete.
Hoy, medio año más tarde, nadie duda del éxito de la propuesta. Muy probablemente venderan casi 10 millones de iPads a final de este año. Incluso Microsoft ha tenido que hacer algún comentario al respecto, aunque éste sea cómico. Esta tableta se ha hecho imprescindible para mi en todos los ámbitos y la disfruto tanto en el sofá como en el trabajo. Es evidente que le falta mejorar algunos aspectos, pero si nos hubieran dicho hace unos años que hoy dispondríamos de esta pequeña maravilla, quizá no le hubiéramos puesto tantas pegas.

11 agosto, 2010

Los hábitos

En algún momento de nuestra vida, todos realizamos (o al menos fuera bueno realizar) una reflexión interna sobre nuestras capacidades y limitaciones personales. Buscamos hacernos conscientes de lo que podemos pretender o de lo que nos impide acceder a nuestros fines últimos o a nuestros objetivos vitales.
En el fondo es la plasmación en el ámbito personal del concepto de mejora continua que persiguen las organizaciónes. Pretendemos mejorar como personas.

En mi caso personal, tengo echado el ojo a varios aspectos (debiera decir, limitaciones) en los que indefectiblemente deberé profundizar si quiero de verdad mejorar. Hoy voy a tratar solo uno de esos aspectos. El de los hábitos.

Este es un reto importante para mi, puesto que siempre he huido de ellos por confundirlos con el concepto peyorativo de rutina.  Si queremos efectivamente apostar por un cambio personal cierto, tendremos que tomar ciertos hábitos y probablemente desprendernos de otros que nos lastran y no nos ayudan.
No pretendo entrar en el detalle del libro de S. Covey respecto a
los siete hábitos de la gente altamente efectiva, pero si quiero mencionar el tercero de ellos, porque es el que probablemente me afecte de una manera más significativa. La priorización o el "first things first". Planificar nuestras prioridades diarias para evitar el caos personal es uno de los puntos que me propongo.
Espontaneidad, improvisación, son las excusas que yo mismo me he puesto muchas veces, para huir de cualquier planificación que me haría afrontar mejor mis tareas diarias. Si yo consiguiera tomar el hábito de estructurarme mis actividades importantes de cada día, con seguridad sería más productivo y me sentiría mejor conmigo mismo. El problema es que ello supone un compromiso (aunque sea conmigo mismo) y es fácil que tengamos una tendencia innata a huir de ellos.
Me propongo avanzar en el establecimiento de ciertas costumbres que me ayuden a luchar contra mi anarquía personal. Debo empezar por pequeños cambios, fáciles pero continuados.
Me emplazo a futuros controles. 

05 agosto, 2010

Una mañana de Agosto


6:20 de la mañana de un relajado día de agosto. Salgo a mi jardín desde donde contemplo una espectacular vista del Maresme. Estoy pletórico. La cabeza me bulle de ideas, proyectos y es como si mi "inbox" mental se colapsara de tareas. Subidon de endorfinas motivadoras que deseo disfrutar al máximo. 
A estas horas reina una paz envolvente. Los sonidos son escasos e indefectiblemente incluyen un gallo cantando tras los continuos trinos de los pájaros. Es lo que tiene vivir fuera de la ciudad.  
Para mi es un momento de maravillosa fusión entre el relajamiento al que este entorno invita y la explosión mental que me invade. Que contraste!  
Son esos momentos que uno desea que se alarguen. Que el tiempo deje de transcurrir y me permita disfrutar de cada segundo. Aún así, se hacen cortos. Quisiera más. ¡Hay tantas cosas que hacer! Y hacerlas saboreando el momento es una delícia.  Debo tomar notas!  
Hacia las 8h. la magia se habrá evaporado.
Buenos dias! 

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Nuevas fuerzas. Nuevos proyectos. 

El tiempo ha ido transcurriendo y nada queda indemne. Nada es igual y todo debe evolucionar. Es por ello que este regreso debe aportar algo diferente. Debiera marcar un cambio. Yo no se si así será finalmente, pero ese sería mi deseo. De momento aquí estoy de nuevo, con nuevas baterías. Son días de vacaciones. Buen momento para proponerse cambiar hábitos. 
Seguiremos informando.

05 enero, 2010

Un año 10

He leido un artículo sobre el optimismo. Al margen de su contenido, me hace pensar que en estos días no se lleva la confianza en el futuro. Salimos de epocas muy duras para algunos. En mi caso, se cumplen ahora dos años de mal sueño, sufrimiento y ansiedad. No han sido nada fáciles.
Sin embargo, el resultado también puede tener su parte positiva. He aprendido mucho. Ya se sabe. A palos se aprende a navegar en turbulentas aguas.
Pero eso es pasado. Lo que importa es que hay mucho por hacer y eso es así a partir de ahora mismito. No hay que esperarse a nada ni a nadie. No tengo duda de que lo haremos y ademas, lo haremos bien.
¿Es eso ser optimista? Bueno... puede. Unos le llamaran ingenuidad y otros remarcaran el positivismo vital, pero que más da la etiqueta que le pongamos?
Lo que importa es la PASION y la FUERZA que pongamos en ello. Esas son las luces que deben iluminarnos en todo momento. Y yo hoy, me ilusiono con este año. No dudo que será un año todavía muy duro a nivel económico. Pero tampoco dudo que esta en nuestras manos hacerlo bueno. Y lo será.
No es optimismo. Gestionemos nuestra vida.
Más que nunca, hagamos que sea un feliz 2010.

He vuelto a escribir, pero me reconozco poco disciplinado en esto del blog. Alguien me lo pidió y de momento... como si fuera un regalo de reyes, lo hago con ilusión. Gracias.

22 enero, 2009

¿Redes Peligrosas?

Hace unos días, en una cena de amigos, una pareja comentaba su preocupación por los peligros que el Facebook estaba aportando en cuanto a pérdida de intimidad. No eran personas ajenas a las evoluciones tecnológicas pero lo que expresaban, aún hoy es un sentimiento muy generalizado en aquellos que -por decirlo de algún modo- no son expertos.
Mito: “Facebook es peligroso porque pierdes toda tu privacidad y cualquiera puede enterarse de lo que haces o dices en cualquier momento”.
Aunque es evidente que no es necesariamente así, si que es cierto que esa es la idea difundida. Casualmente hace unos días, venía en “La Contra”, exitosa sección de "La Vanguardia" una entrevista a un analista de redes sociales que expresaba la bondades de las mismas a la vez que dejaba muy claro que como tal herramienta, su utilidad dependería del uso que se le diera y sobre todo del mismo usuario. Sin embargo, el titular que el entrevistador escogió fue el siguiente. “¡Pues claro que la gente se mete en Facebook para ligar!”. Desde mi punto de vista, este encabezamiento no es el mejor reflejo del contenido de la entrevista y probablemente disgustaría al experto pero estoy convencido que con él, consiguió muchos más lectores.
Las redes sociales son un hecho. Tienen por objetivo fundamental aumentar nuestros contactos, ya sea con una finalidad de ayudarnos a encontrar trabajo (profesionalia, linked in), generalistas (Facebook, MySpace, Twitter) o con vocación específica Meetic.com para contactos o Flickr para fotografías. Sin ir más lejos hace poco descubrí una muy curiosa que intenta aglutinar a fogosas portadoras de cornamentas ( www.descubrealinfiel.com ).
Mis amigos, ponían el ejemplo de que pueden aparecer fotos tuyas que no desees e incluso los servicios de selección de personal de las empresas revisan el facebook de los candidatos que entrevistan, como si ello fuera la avanzadilla del 1984 de Orwell.
Internet en si mismo -no ya las redes sociales- permite obtener una ingente cantidad de información incluso de tipo personal. Internet en si mismo -no ya las redes sociales- puede ser tremendamente adictivo. Sin embargo, no debe olvidarse que todos nosotros tenemos la capacidad y el derecho (o debemos exigirlo), para ocultar la información que no deseamos que sea accedida. Las Redes más implantadas tienen, por supuesto, los métodos precisos para que cada usuario decida sobre su privacidad. Esa es pues, una cuestión clave. Pero es un tema de educación y cultural. No de exceso de libertad. Que sean -también- redes de chafardeo no deja de ser opcional y accesorio.
En cualquier caso, yo siempre aconsejo que si no se sabe conducir, no debes ponerte al volante. No sea que luego te vayas a quejar de que un árbol enloquecido avanzaba rápidamente hacia ti.


Para leer más...
Mapa de las Redes Sociales en España (Alianzo)

17 enero, 2009

Playing For What?

Recibí hace unos días un video de aquellos que impactan por el resultado conseguido.Hace poco más de un año, se empezó a gestar una organizción de músicos callejeros de todo el mundo. Su finalidad era conseguir recaudar fondos para diversos proyectos musicales y a la vez estructurar un cierto “lobby” que diera valor a su actividad, frecuentemente infravalorada.

Con este video que incluyo, demuestran lo que la técnica puede hacer con el talento.
En la web del título se pueden ver los proyectos, como escuelas de música en Sudáfrica, pero también comprobamos como todo es comercializable. El marketing les ha otorgado un logo, un lema (discutible a mi modo de ver), “peace through music”, una imagen y a partir de aquí la comercialización de productos en la tienda on line. Al final no deja de ser un producto más.
Sin embargo, el éxito del vídeo está garantizado. Engancha y convence.


04 enero, 2009

Año Nuevo, Guerra Eterna

Debiera desear a todos un Feliz Año. ¿Pero como hacerlo cuando voy a escribir sobre Israel y Palestina? Se me hace banal y es un tema doloroso. Es inevitable en este comienzo de año, hacer referencia a la crisis de Oriente Medio. Digo inevitable, porque cualquier ser humano debe estremecerse ante las imágenes que nos llegan de Gaza. Y enseguida surge la pregunta. ¿Por qué puede Israel llevar a cabo una acción de este tipo y no provocar una reacción unánime de la comunidad internacional? La respuesta está obviamente en el poder económico. Sin embargo, no sería objetivo quedarse en este análisis. Por lo tanto, la siguiente pregunta es ¿Por que lo ha hecho? Y ahí también debemos reconocer que las informaciones que nos llegan están muy mediatizadas. ¿Acaso en Palestina no se disparan misiles? ¿Acaso son diferentes los muertos israelíes? Es una guerra. Y como tal es injusta, destructiva y absolutamente reprobable en todos sus actos. Pero yo me resisto a ver a unos buenos y a otros malos. No es indefinición. Es condena doble. Estoy seguro que ambos bandos nos ofrecerían razones incluso humanitarias que avalarían la acción militar. Y dejarnos convencer por tales motivos sería un error indigno. La opinión pública internacional es el objetivo de la propaganda de los contendientes. Y naturalmente busca que tome partido por uno u otro bando. Y ese es otro error, porque la comunidad internacional no puede tomar partido en este conflicto sino mediar en él, incluso coercitivamente. Pero claro, como tantas otras veces, acabamos extendiendo la condena a los EEUU que son los que impiden la mediación imparcial y así vuelven a aparecer los intereses económicos. Hoy por hoy, no le vemos el final a tan triste historia.

Foto: El País - AP

Dos años

Dos años desde que Isa nos dejó tras un desgraciado encuentro en las calles de Port au Prince. Aquel momento, sentí que el mundo se venía a...