Cuestión de entendimiento
Cuando llamé a mi novio , lo noté con muy pocas ganas de salir a dar una vuelta. No podía decirse que fuera un problema en nuestra relación. Sencillamente, se había comprado un órgano electrónico para manejarlo desde el ordenador, no entendía las instrucciones , y le daba mucha rabia tener que dejar de investigar. —¿Pensabas dejarme por un aparato con teclas? Dije, bromeando , comprensivamente. Mario sonrió. —No, Lucía. Es que ya había empezado a aprender un poco; solo un poco, a aprender el manejo del programa. Se llama " Fl Studio ". Le pregunté si había leído las instrucciones, a lo que me dijo, que estaban en inglés . Me preguntó si podía ir al día siguiente a su casa, para ver si yo tenía más suerte que él, pues era muy torpe en cuestión de idiomas . Eso hice. Mario tenía motivos para no entender el manejo del aparato, pero en vez de aplicar una estrategia de entendimiento, se po