Los gatos

Dentro de los felinos está el gato, es un animal que a mí me gusta mucho y del que quiero hacer este trabajo.

Es mamífero carnívoro y ha estado con el hombre desde hace 9.500 años. Hay muchos tipos de razas, unas con pelo, otras sin pelo, unas sin cola debido a que se ha alterado algún gen, otras con cola larga. El pelaje de algunos gatos es blanco, el de otros, negro, marrón o de rayas. Se comunican por gruñidos, gemidos, silbidos... Todos se comunican por las posturas corporales.

Pueden vivir de forma salvaje alimentándose de ratones y ratas que ellos mismos cazan, o de forma doméstica alimentándose de lo que el dueño les proporciona. Su domesticación se asocia a los egipcios que los tenían para mantener a las ratas y los ratones fuera de los graneros. Los egipcios los consideraban animales sagrados. Uno de sus dioses tenía cabeza de gato. Se han encontrado numerosas momias de gato.

En la Edad Media se les temía porque pensaban que tenían alguna relación con las brujas. También se les acusó de transmitir a los humanos una peste, matando a casi todos los gatos y por lo tanto aumentó el número de ratas que eran las que realmente transmitían la peste.

Pueden sufrir enfermedades como el estrés, la rabia y la tuberculosis. Cuando son mayores pierden el olfato y se deterioran rápidamente, en menos de un año desde que enferman.

Es un animal de compañía, a muchas personas les gusta porque es un animal muy limpio.

Pesan entre dos y siete kg. Suelen vivir entre catorce y veinte años y pueden dar saltos de más de tres metros de altura. En las orejas tienen 32 músculos, permitiéndoles cambiar de dirección y por lo tanto oír mucho más. Si tienen miedo llevan las orejas hacia atrás. Suelen estar dotados de gran equilibrio y flexibilidad. Caminan sobre sus patas que son cortas, con cinco dedos en las extremidades anteriores y cuatro en las posteriores con uñas fuertes, agudas y retráctiles.

La gestación dura 55 días y suelen tener entre una y ocho crías. Suelen estar con la madre unos doce días.

Yo tuve un gato muy majo que se llamaba Rufo, con él jugaba y me divertía mucho.