Primera novela de un proyecto denominado Episodios de una guerra interminable. Partiendo de un hecho histórico desconocido para muchos españoles, la invasión del valle de Arán en 1944 por el ejército de la Unión Nacional Española, nos cuenta la vida de Inés, que un buen día, pistola en mano, monta a caballo y huye de su prisión familiar con algo de dinero y cinco kilos de rosquillas para unirse a los “rojos”.
La ficción aporta la parte más emocional, y más destacable. La realidad, la trastienda del PCE durante la dictadura y la transición, resulta densa y no del todo necesaria.
Lo he dicho ya muchas veces, se trata de mi escritora favorita. En este libro se reconoce su estilo que tanto me entusiasma; pero he de reconocer que la temática me tiene ya un tanto aburrida. Después de El corazón helado, probablemente una de sus mejores obras, ésta me ha costado un poco digerirla.
Breve lectura
Andanzas del matrimonio protagonista que recorre el norte del país para que ella pueda escribir un libro sobre esa experiencia. Liberada durante un año del estrés que supone dar clases en un instituto, puede dedicarse a las labores literarias que tanto la motivan. Él ejercerá de acompañante y colaborador. Con sentido del humor va redactando una especia de cuaderno de notas paralelo donde desgrana su ruta, sus desavenencias y las diferentes etapas por las que pasa y ha pasado su relación.
Personajes y momentos coloristas: su perro (Goethe), la tía de Clara, las chapuzas de fontanería o el empapelado imperfecto, las jarras de cerveza, las copiosas comidas (escondiendo el ajo), sus minutos de felicidad y su maltrecho pie (Tommy).
Muy divertido y ágil. Cuesta reconocer temáticamente al autor de Los peces de la amargura.
Así empieza