A veces

A veces me paro a analizar cosas que la gente hace y creo que yo no haré nunca.
No hablo de moralidad, sino de costumbres que, por más que las analizo, para mi carecen de sentido.
Una de esas costumbres es "enseñar la casa a las visitas".
Yo no lo hago y creo que nunca lo haré . Tengo bastantes razones para ello:
Si es una visita formal, viene por algo concreto (alegría o duelo), no a ver cómo y dónde vivo: Seguramente anunció su visita antes de venir por lo que es fácil dar una imagen falsa de nuestra forma habitual de vivir.
Si es un amigo del alma, viene a vernos, a charlar y a abrazarnos. A compartir noticias o recuerdos propios o comunes. Maldita la falta que le hace que le enseñes la casa.
Si tenemos una casa preciosa, enseñarla es presunción innecesaria.
Si tenemos una casa normal o humilde, enseñarla es una humillación también innecesaria.
Si quien nos visita es cotilla, mejor no darle motivos de crítica; si no lo es, pensará que lo que mostramos no le importa nada.
Si viene a quedarse, irá haciendo descubrimientos y los disfrutará intensamente.
Si viene para irse pronto, es una pérdida de tiempo .
Mi casa es mi castillo y mi refugio; el lugar en el que YO soy feliz y estoy cómoda. Ella es parte de mi. Yo soy parte de ella.
Ambas somos un todo. Y no nos gusta nada andar por ahí desnudas.

En Paradela ( en mi Paradela) no se enseña la casa.

Heladas y nabizas

Para los que no conocen las nabizas.

Para los que no imaginan una helada

que las suavice y dulcifique, ahí

teneis mi sembrado.

Se siembran en septiembre y pronto empiezan a nacer. A mediados de octubre empiezan a comerse sus hojas, que se llaman nabizas. Siguen vivas todo el invierno. A la vez que en la superficie crecen las hojas, en la tierra engorda un hermoso nabo.

En el mes de febrero empiezan a nacer unos brotes llamados grelos, que son el origen de la flor.

Si los grelos se recolectan (se pueden congelar para comer revueltos de grelos con gambas todo el verano y otras "delicatessen" por el estilo) nacen otros, porque la planta tiene un ansia increíble de perpetuarse. Si no se recolectan, nace la flor (amarilla) y de ella las semillas para una nueva planta.

En marzo se arrancan las plantas y los nabos se le dan al ganado.

Es una verdura gallega y tienen fama los de Lugo y los de Santiago.

Para mi, son deliciosos las nabizas y los grelos de PARADELA.

Nabizas

Es tiempo de nabizas. La helada las suaviza y hace de ellas una verdura deliciosa.

Había un cura bastante bruto en mi pueblo, que a través de esa verdura, explicaba el misterio de la santísima trinidad.
Es verdad que resulta dificultoso comprender que tres personas distintas hacen un solo dios verdadero (que era como lo estudiábamos) Pues él lo hacía sencillo : "¿veis?"- decía- una sola planta y de ahí salen nabo, nabiza y grelo"

Y, visto así...