“Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz, te deseamos todos…” Hay una única vela sobre la tarta y junto a ella, temblando más que la llama, un viejo que comienza su último año de vida.
Desde que la edad es sólo un dato más en un programa y todos llegaremos a alcanzar la misma, la certeza de la muerte acercándose inexorablemente no ha hecho más que acortar la duración real de la vida.
(con este “soplo” contribuí al Vendaval del 19 de junio)
Pues sí, eso de tener fecha de caducidad debe ser horrible. Me ha gustado tu soplo
ResponderEliminarGenial aportación, pone la carne de gallina eso de saber la fecha exacta, y estar celebrando el último año de vida, es una cuenta atrás tétrica, aunque tal vez él supo como hacer que fuera inolvidable, ojalá. Besos y gracias por participar!
ResponderEliminarGracias por los comentarios pero... quería decir: ¿no está precioso mi diploma en mi página?
ResponderEliminarParece talmente hecho a medida.
Gracias por todo todo el tiempo
'Temblando mas que la llama', esa es la desgracia, comenzar a morir antes de tiempo.
ResponderEliminarNadie sabe cuándo habrá festejado su último cumpleaños, por tanto todos tenemos igual derecho a celebrar que aún respiramos.
Felices Vendavales, Luisa!!!