Ya lo decía Aretha Franklin hace mucho tiempo:
What you want (lo que quieres)
Baby, I got (cariño, lo tengo)
What you need (lo que necesitas)
Do you know I got it? (sabes que también lo tengo)
All I'm askin' (sólo te estoy pidiendo)
Is for a little respect when you come home (just a little bit) (un poco de respeto cuando llegas a casa, sólo un poquito)
El respeto es fundamental en la relación entre dos personas o entidades y lamentablemente hay veces en que las relaciones se tuercen. Cuando el cliente ya no te mira con ojitos tiernos o tú estás cansado de él porque ya no te regala flores de vez en cuando, es que la cosa va mal. Si lo aderezamos con algunos desplantes en la cena y un más que notable escarceo con alguna otra pilingui, es que el respeto se ha perdido por completo.
Y realmente no se puede trabajar para alguien a quien no respetas. Yo sólo quiero que reconozcan mi trabajo sin tener que justificar un año entero en un documento que ni siquiera voy a poder defender en la reunión porque no quieren que asista. ¿Renovación? No lo creo...