La cotorra argentina es originaria de América del Sur, de la zona centro y sur, desde Bolivia y Brasil hasta Argentina, Paraguay y Uruguay, pero ha colonizado recientemente diferentes lugares de Europa y Norte america. Es común como mascota, hecho que ha sido el origen de estas colonias en el hemisferio norte.
Tiene la parte alta del pecho y el frente de color gris. La barriga puede ser algo más amarillenta que el pecho y el resto del cuerpo es verde. Las alas son puntiagudas, como la cola, y pueden presentar tonos azules o verde oscuro. Son aves gregarias y muy ruidosas, con un vuelo rápido, normalmente no muy alto batiendo mucho las alas.
La primera detección en la ciudad de Barcelona se remonta a dos ejemplares en el Parque de la Ciutadella el 1975, debido a una fuga accidental, y desde entonces su población se ha ido incrementando paulatinamente.
Especie muy generalista capaz de utilizar un amplio espectro de hábitats y recursos. Es por esta razón que en sus nuevos hábitats no presenta ningún problema para encontrar alimento. Se pueden observar fácilmente en cualquier zona verde o jardín, a menudo colgadas en palmeras mientras se alimentan de datiles asi como de una gran variedad de frutos, flores, larvas e insectos.
Como especie introducida, puede suponer un riesgo para el ecosistema invadido e incluso podría provocar importantes pérdidas económicas debidas a daños a la agricultura, que ya han sido descritos.
En Cataluña se reproduce entre los meses de agosto y diciembre, e incluso pueden hacer dos puestas anuales. Normalmente lo hacen en nidos construidos con ramas por ellas mismas alrededor de la base de las hojas de palmeras del género Phoenix, preferentemente Phoenix canariensis, que presenta hojas más densas que otras palmeras aunque también se han visto nidos de cotorras en eucaliptos, olmos, pinos o cedros, e incluso en antenas y también en edificios.
Debido a su potencial colonizador y por constituir una amenaza grave para las especies autóctonas, los hábitats o los ecosistemas, esta especie ha sido catalogada en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, aprobado por Real Decreto 1628/2011, de 14 de noviembre, estando prohibida en España su introducción en el medio natural, posesión, transporte, tráfico y comercio.