Vanidad, mi pecado casi favorito
En un trabajo que tuve de camarero, en el que reconozco que gané mas kilos de los que desee, me pasaba el día comiendo todos y cada uno de los pinchos, pulgas, aperitivos y bebidas (no alcoholicas) que rondaban por la barra. Y lo mejor era que gozaba de patente de corso para hacer todo esto y el encargado jamás de los jamases me dijo que no lo hiciera. Es algo innato en mi el robar en el trabajo. Creo que no he estado en ningún lugar en el que no haya birlado algo a la empresa ala que servía. En la actualidad trabajo en un almacén y eso da a lugar a robar una infinidad de cosas, aunque estoy deseando dejar el trabajo no porque sea inhumano el ritmo que llevamos, no porque el jefe sea bastante "gracioso", no porque con mi encargado tenga conversaciones del tipo: ENCARGADO: ¿No podrías trabajar un poco más deprisa? JOAQUÍN: ¿No podrías comerme un poco la polla? Conversación seguida de amenazas y gritos Golpeo con bastante torpeza un pallet contra la pared haciendo peligrar e