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29 septiembre 2008

Premis Qwerty 2008









Por orden: la invitación - la banda de música - Joan Barril y Bea Rodríguez, presentadores de los premios - Manuel Baixauli (premio mejor libro de narrativa en catalán) - Luis García Montero (premio mejor libro de poesía) - Eugenio Trías (premio mejor libro de no ficción) - foto de familia - los restos de la fiesta - el regalo final a los asistentes.

[Qwerty es un programa de libros de la televisión local de Barcelona BTV. Los programas pueden verse en línea a través del servicio A la Carta de BTV. Aquí pueden consultar el listado completo de premios y premiados de la presente edición, además de los miembros del jurado.]

Quiero aprovechar esta entrada no solo para mostrarles algunas de las instantáneas que mi acompañante al evento tomó durante la noche, sino también para hacer unos breves comentarios sobre el acto.

Primero: agradecer a Bea Rodríguez la invitación (ya que fue ella la que se puso en contacto conmigo, la que ya antes había recomendado Librosfera en el programa, y la que me hizo llegar la invitación, creo que es quien se merece el agradecimiento).

Segundo: felicitar la iniciativa del programa de televisión al entregar estos premios. Normalmente los premios se entregan a un libro, una editorial, un cómic, un autor... que haya unos premios que reconocen no solo eso, sino también librerías, traductores, e incluso best sellers! es algo que personalmente echo en falta. Unos "Oscars" del año literario, vaya...

Tercero: reñir a la asistencia por el poco respeto mostado durante la entrega de los premios y los parlamentos de los premiados (que fueron, por otra parte, encomiablemente breves). Había momentos en los que casi costaba oír al premiado ante el micrófono, ¡y eso que yo estaba a dos palmos de uno de los altavoces! Tenía el "¡Sshhhhhhht!" en la punta de la lengua (¿deformación profesional?), pero me aguanté.

Cuarto: al ganador del premio al mejor microrelato (Jordi Sánchez i Monsó), que sepa que la que aplaudió cuando anunciaron su premio fui yo. Ni lo conozco ni había leído el microrelato, pero me pareció horrible que el público solo aplaudiera a los de "su gremio" (entendiendo, por gremio, agencia, editorial, género o parcela literaria que corresponda). A Libros del Zorro Rojo (mejor diseño editorial) ya los aplaudieron poco, pero cuando llegamos al de microrelato, la gente por lo visto ya estaba por otra labor. Supongo que las bandejas de croquetas ya estaban circulando, porque cuando nos dispersamos al final de la foto de familia, solo vi los restos.

Y quinto: proponer que, para el año que viene, se instaure también el premio al mejor blog/web sobre literatura. ¿O acaso no tenemos nuestro corazoncito?

26 marzo 2008

Perdida

He de confesar que desde hace unas semanas, si pudiera, en vez de dedicarme todo el día a leer invertiría tan preciado tiempo en ver sin descanso "Perdidos". Sí. He caído en sus redes. Estoy enganchada. Y de qué manera. Más de lo que ningún libro ha conseguido engancharme recientemente.

Así que... quizá Philip Roth tenga razón...

¿Tengo cura?

¿Cuál es el último libro que no pudieron ustedes dejar hasta haber consumido la última página?

28 febrero 2008

Neuronas espejo


¿Y si la literatura no fuera si no una televisión que uno mira para activar sus neuronas espejo y para proporcionarse a bajo coste los escalofríos de la acción? ¿Y si, peor aún, la literatura fuera una televisión que nos muestra todo aquello en lo que fracasamos?

[Fragmento de
La elegancia del erizo, de Muriel Barbery. Imagen de arkine.]

20 febrero 2008

TDT vs. Tele x Internet




Hace poco, en unas jornadas en el Citilab sobre nuevas tecnologías, uno de los asistentes del público sugirió a un alto gerifalte de la Generalitat que en vez de tanta campaña proTDT se difundiera más la televisión por Internet. Y tiene sentido, porque en cuestión de un par de semanas, hemos conocido varias iniciativas en las que televisión, internet y libros se dan la mano como buenas amigas.

- Conocer al autor (versión española de Meet the author, que tiene canales para UK y USA).
- Cervantes TV.
- Titlepage.tv (en inglés, entrará en funcionamiento el 3 de marzo).

No olvidemos que, además, podemos visualizar también en línea programas como Página 2 o Qwerty. Pudiendo seleccionar los contenidos que nos interesan y visualizarlos online, ¿quién quiere otro cacharro en casa?

14 diciembre 2007

Pan y novelas

¿Es imaginable un mundo sin ficción? Definitivamente, no. Somos tan hijos de la carne y de la sangre como de las caperucitas rojas, de las blancanieves, de las madrastras, de los pulgarcitos, de los gatos con botas, pero también de las madames bovarys y de las anas ozores y de los raskolnikofs y de los bartlebys, por no hablar de los soprano y de los fraziers, de los seinfelds, o de los doctores houses. Desde que el mundo es mundo, mientras unos amasan el pan que comemos por la mañana, otros urden las historias que devoramos por la noche. Estamos hechos de pan y de novelas.

[El artículo, de Juan José Millás (al que no hemos felicitado por el ya no tan flamante Planeta, así que aprovecho la ocasión para hacerlo ahora: ¡Felicidades Juanjo!), no se titula “Pan y novelas”, sino “
Pan y cine”, y fue publicado en El País del pasado 9 de noviembre. En el enlace pueden leer el artículo a texto completo. La imagen es de Alexander Kalina.]

09 noviembre 2007

Nueve

Ya que empezamos la semana hablando de televisión, justo es que la terminemos del mismo modo. Para ello, la primera de las “9 maneras de enseñar a los niños a odiar la lectura”, según Gianni Rodari. [Texto incluido en el libro La escuela de la fantasía, pero en mi caso extraído del número 187 de la revista CLIJ, noviembre de 2005]

“Lee, en lugar de mirar la televisión”;
“Si no te veo leer, vendo el televisor”;
“Agarra el libro de la escuela, en lugar de perder el tiempo con esas estupideces”.


No pretendo conocer todas las expresiones particulares que usan quienes sostienen este sistema casi infalible. Los niños saben que la televisión no es una “estupidez”: la encuentran divertida, agradable y útil. Puede ocurrir que le sacrifiquen un poco de tiempo más del necesario, puede suceder que en ocasiones queden reducidos a ese estado de semiinconsciencia en el que cae el telespectador habitual, niño o adulto, después de cierto tiempo, y del que es síntoma la total pasividad con la que acepta cualquier programa de la pantalla, sin elegir y sin reaccionar. Esto no quita que en su conjunto los méritos educativos de la televisión superen sus deméritos.


La televisión enriquece el punto de vista, nutre el vocabulario, pone en circulación una cantidad inverosímil de informaciones, inserta a nuestros pequeños analfabetos en un círculo más amplio que el familiar, que no siempre está animado por las informaciones, por la cultura y por las ideas. Casi se podría decir que la televisión disminuye las dificultades de la lectura. Al mismo tiempo, porque crea (aunque sea a un nivel discretamente bajo) una especie de unidad nacional de la lengua, y ayuda al oído del niño a superar el obstáculo de las profundas diferencias entre el dialecto nativo y materno y la lengua escolar. Después, porque hace familiares, a través del sonido y la imagen, un cierto número de “palabras difíciles”, de esas con las que los pequeños lectores tropiezan inevitablemente; y quizás en la actualidad tropiezan menos que antes.

Psicológicamente, además, no me parece que negar una diversión, una ocupación placentera (o sentida como tal, que es lo mismo) sea el modo ideal de hacer que amen otra: será más bien la manera de lanzar sobre esta otra una sombra de fastidio y de castigo.


[Para los curiosos, las restantes ocho maneras de enseñar a los niños a odiar la lectura son: presentar el libro como una alternativa a la historieta, decir a los niños de hoy que los niños de otra época leían más, considerar que los niños tienen demasiadas distracciones, echar la culpa a los niños si no aman la lectura, transformar el libro en un instrumento de tortura, negarse a leerle al niño, no ofrecer una opción suficiente y ordenar leer. Si nuestros niños leen, no será porque no ponemos el suficiente empeño en lo contrario...]

05 noviembre 2007

Y que dure

[Dedicado a los amigos de Tökland, que sé que les gustará... porque no todo van a ser ilustraciones, ¿verdad?]

Un exceso de academicismo fruto del siglo XIX – cronológicamente paralelo a un gran impulso literario, a la implantación de la educación obligatoria, y a la revolución industrial – puede no sernos demasiado útil en el siglo XXI y el interés en separar el grano de la paja puede no dejarnos entender que “El ninot de neu” en vídeo distribuido por Aura [Barcelona, 1992] contiene un mensaje narrativo muy interesante para un niño, absolutamente paralelo al que obtendría con el libro “El muñeco de nieve”, de Raymond Briggs [Editorial Altea, 1989], porque ambos son la misma historia, fruto de un mismo autor, que se insertarán en la memoria del jovencísimo lector al haberle proporcionado una experiencia cognitiva similar. Solo que una cosa es un vídeo y la otra un libro. Un libro sin ni gota de texto, un vídeo exquisitamente sonorizado. Pero a ambas cosas vale la pena llamarlas literatura, y de la buena, y como tal las inculcaríamos (*). Una cosa tiene un coste – económico y técnico – y la otra tiene otro. Una te la puedes llevar a la cama y la otra no. El gesto, la atención, la recreación y el aprendizaje mecánico – quizá deberíamos llamarlo psicomotriz – entre la una y la otra difieren, y para determinados objetivos una es más válida que la otra, en determinados casos y en determinadas ocasiones, entre las cuales nos es posible optar, elegir, escoger. Ante cualidades paraleas, la libertad de opción es más grande. Y por tanto tenemos que estar preparados para poder hacer una buena elección según la hipótesis previa que nos hayamos planteado.


El placer de leer, del cual se habla tanto, deriva de otro gusto que tiene menos publicidad. Y que es el siguiente: conocer, saber, aprender es, per se, placentero (**). Para provocar este último – y prioritario – placer, todos los medios son buenos. Ya sean vídeos o libros, textos o imágenes, pantallas telemáticas o multimedia.

Y solo porque el libro, más concretamente el libro para niños pequeños, con todo el abanico de posibilidades comunicativas que ostenta actualmente, es una de las puertas más dúctiles, pluriformes y ricas en opciones de acceso a su saber que nuestra sociedad nos pone al alcance, vale la pena, hoy por hoy, mostrar sus infinitas variedades, y erigirlo como una de las herramientas educadoras más válidas, positivas y fáciles de manejar (***) que nunca la humanidad haya tenido. Un libro infantil de calidad es, a finales del siglo XX, una obra de arte de cabo a rabo. Accesible a todas las narrativas, visuales o literarias, medio de muchas vías comunicativas. Y que dure.

[Lo afirma Teresa Duran en Primeres literatures: llegir abans de saber llegir (Pirene, 1995), libro que firma junto a Roser Ros. La traducción es casera. Como el fragmento es bastante largo, les dejo la versión original, en catalán, en los comentarios.]

(*) Quien no pueda imaginarse a tal o cual crítico – de los academicistas mencionados más arriba – echándose las manos a la cabeza, que levante la mano.

(**) Al alcance de cualquiera. Solo basta sentir el cosquilleo que nos recorre el cuerpo cuando resolvemos un sudoku.

(***) Me gustaría saber la opinión de la autora hoy en día, en que a los niños les resulta infinitamente más fácil utilizar la wikipedia (un nuevo medio) que no una enciclopedia en varios volúmenes (libros, al fin y al cabo).

31 octubre 2007

[Inciso: Página 2]

[Hacemos un inciso en el monográfico de ilustraciones de esta semana para informarles de que este próximo domingo, a las 20.15 h., se estrena en La 2 el nuevo programa de libros "Página 2". Por cuestiones personales no podré verlo, aunque recurriré al VHS de mis progenitores. Ya me contarán...]

Noticia en El Mundo.
Noticia en El País.

07 mayo 2007

Seis grados de separación

L'hora del lector, el nuevo programa autonómico sobre las tres L (Libros, Lectura, Literatura), lleva ya tres semanas en pantalla (en el Canal 33, los viernes, de 23 a 24 h. aproximadamante) y yo, que de momento no me he perdido ninguno, todavía no les he hablado de él. Pero de hoy no pasa, porque quiero pedirles que se pasen por el blog del programa y aporten su granito de arena a la petición que uno de los colaboradores del programa, Víctor Amela, hizo el pasado viernes: explicar alguna conexión curiosa (sea directamente, o a través de varios grados de separación) que tengamos con algún/a escritor/a. Si lo hacen, no solo podrán dejar su anécdota personal para la posteridad, sino que podrán saber cómo pasé de tener dos grados de separación (sin saberlo) a tener solo uno, con la dama de la foto.

02 enero 2007

Completa e irrevocablemente


"Era un día cualquiera del verano de 1976. Yo era un chaval de quince años, y mi mejor amigo, Dickie Heath, y yo acabábamos de robar un coche del aparcamiento de una tienda, y como no teníamos naa que hacer entramos en una casa de la calle de la colina del zorro. Mientras Dickie registraba arriba en busca de objetos de valor, yo entré en el salón, y cuando me metí una pluma chapada en oro y una pitillera de plata en el bolsillo, encontré el libro que cambió completa e irrevocablemente mi vida. Así que, esta mañana, Chris de la mañana va a emitir los informes del tráfico y del tiempo, las noticias locales, y va a disfrutar de las obras completas de Walt Whitman."

[Chris Stevens, en el episodio “Conocimiento, experiencia e inteligencia nativa”, de Doctor en Alaska.]
Más sobre libros que cambian completa e irrevocablemente las vidas de las personas aquí, aquí, y seguramente en tantos otros sitios...

28 septiembre 2006

Campañas ambivalentes


¿Cuánto vale una idea que te hace soñar, que te hace reír, que te hace llorar? Tener una idea te hace creer en tu idea, luchar por ella. ¿Cuánto vale vivir por una idea? Las ideas de unos ayudan a otros a tener nuevas ideas. ¿Cuánto vale la libertad de poder elegir? Una sociedad vale lo que valen sus ideas. Si dejamos que nos las roben, ¿qué nos queda? Defiende tu cultura.

Se trata de una campaña... pero ¿sabríais decir a favor o contra de qué?
a) A favor de la cultura libre (como ésta).
b) En contra de la piratería (como ésta).

...

La respuesta correcta es la b.
Yo, sinceramente, no lo veo tan claro...

26 julio 2006

L'illa del tresor

L'illa del tresor es un atípico programa cultural presentado por Joan Barril y Joan Ollé que emiten por el Canal 33. Por lo visto, apareció en las pantallas hace ocho años, desapareció, y esta temporada lo han reinstaurado, para la grata sorpresa de muchos. En la web del programa, lo describen de la siguiente manera:

Un programa que no describe la realidad; la apalabra. No entrevista a los invitados; los desmaquilla. Un oasis semanal que cartografía la infancia, pone voz a la memoria y música al olvido, confiesa buenos propósitos y origina dudas. Un territorio dadá, la sala de juegos de dos niños aburridos que rompen el juguete para ver que hay dentro. [traducción casera del catalán]

Vamos... la miel en los labios, viendo cómo está el panorama televisivo. Lástima que una tenga unos horarios bastante poco flexibles y esté durmiendo cada noche, como muy tarde, a las once; supongo que no hace falta que os diga que "L'illa del tresor" no estaba programada precisamente en horario de prime time, así que no he podido seguirlo.

Anoche, sin embargo, haciendo el último zapping (el que viene immediatamente después del telediario de la 2 e immediatamente antes de irme a dormir), tropecé con la extraña pareja de jotas en la pantalla, en un especial del programa titulado "Biblioteca (llibres i literatura)". Una es débil, y faltaba todavía media hora para mi límite de las once, así que me quedé a verlo.

En realidad, no duró mucho más de media hora. Era una selección de episodios, de entrevistas que han venido realizando estos meses, relacionados con los libros y la literatura. Vargas Llosa, John Irving, Vila-Matas, Carme Riera, Isabel Coixet, y otros muchos, hablando sobre libros y literatura. Pero, lo mejor de todo, para cerrar el programa, Joan Barril y Joan Ollé en un mano a mano, mostrando fotos de la actualidad mundial y asignándoles títulos de libros.

La conjura de los necios

Mucho ruido y pocas nueces

Las uvas de la ira

Y más. El hombre sin atributos (la detención de Hussein), Opiniones de un payaso (las memorias de Aznar), Paraíso perdido (Banda Aceh después del Tsunami), El principito (Don Felipe), Don Juan (una foto del propio Barril)...

Desde aquí, mis más sinceras felicitaciones al equipo del programa. Valiente, divertido y diferente. No me atrevería a pedir más...

PS: El programa puede verse a través del servicio de pago 3alacarta de Televisió de Catalunya. En youtube encontraréis fragmentos del programa en el que estuvo invitado Vila-Matas buscando "Illa del tresor".