Mostrando entradas con la etiqueta pasillo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta pasillo. Mostrar todas las entradas

15 de septiembre de 2015

Mimetizando desayunos en alta mar (REC)



El bate, «¡Eso, bate!», se le resbalaba de las manos pringosas de mermelada, “Sí, mermelada, de fresa”  Sin pedir perdón por el retraso me preguntó si podía pasar al camarote. Miré de reojo el reguero de mermelada, mezclada con pelo de la peluca rubia, que parecía salir del fondo del pasillo, allá por el 3046; el cuerpo de ella yacía casi al final, mutilado, “¿Mutilado?”, quizás magullado, “¡Perfecto, magullado!” No le dejé pasar.  ”¿Bate, pasillo, mermelada, peluca rubia...?” Entonces pensé, “¡No!”, que prefería cruasanes, “Sí, cruasanes”, rellenos de nata, mucha nata. “Cruasanes, pistola, ascensor, bufanda roja...”

17 de enero de 2013

Berrinches (REC)


A ver si consigue así que papá no haga más el indio cuando salimos de compras. ¡Qué le esconda los cigarros ya! ¡Qué bien nos quitaba él las golosinas antes!, cuando nos portábamos mal, cuando le llamábamos padre. Sus pataletas y berrinches, cuando se tira de la silla de ruedas en mitad del pasillo, son insoportables.