Cuelgan de las cuerdas de la del
quinto, como cada día entre semana, bonitas historias de amor
envueltas en inmaculadas sábanas perfumadas con jazmín; dos o tres,
quizás cuatro si ha habido suerte. Los sábados toca colada
familiar; tristes ropajes perfumados con lágrimas de una madre que
soñó con ser princesa.
Qué bonito Henry, me ha gustado mucho.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Gracias Nani
EliminarBesos