Si os habéis informado de esta novela, habréis visto que, en general, este es el libro que menos gusta del Círculo del Mundo de Abercrombie. Personalmente, a mí me ha gustado; es cierto que las motivaciones que mueven la trama no son las más nobles que se podrían encontrar... Pero esta aventura, aparte de ser una historia emocionante (¡cómo no! ¡La ha escrito Abercrombie!), está cargada de personajes nuevos, lugares de los que solo habíamos oído a hablar y algún que otro secundario que ya conocíamos con un rol de mayor peso que el que tuvo en otras novelas. ¡Y he disfrutado especialmente con la evolución de algunos personajes!
En esta novela
visitamos, por primera vez,
Styria (el cambio de traductor hace que algunos nombres cambien en la versión española en comparación a las tres novelas anteriores, aunque no es algo grave), región vecina al territorio de la Unión de la que solo habíamos oído hablar. La novela se inicia con el giro inesperado que da la vida de
Monza Murcatto, la guerrera favorita del duque Orso,
traicionada por su señor y dada por muerta. Sin embargo, la hasta ahora capitán general de las Mil Espadas (de sanguinaria reputación, por cierto) sobrevive, pero su cuerpo no volverá a ser el mismo. Además, en la traición, pierde a su ser más querido: su hermano. De manera que,
buscando venganza,
reúne a un grupo de personajes más o menos mezquinos, más o menos íntegros,
para dar muerte a todos aquellos que participaron en el acto en el que, sin saberlo, no le llegaron a arrebatar la vida.
El
narrador, en
tercera persona, nos hace ver la historia, según el capítulo,
desde el punto de vista de un personaje principal u otro, como ya ocurrió en novelas anteriores. La lectura, de
ritmo ágil, es
amena y ligera, aunque no por ello carente de interés. Tal vez la trama, situada cronológicamente unos 5 años después de
El último argumento de los reyes, no parezca tan compleja en comparación con todo el entramado argumental que tejió Abercrombie en su anterior trilogía pero, de todas maneras, no deja de ser una buena historia.
Al principio, todo
se centra en la venganza de Monza y dar muerte a sus enemigos, uno a uno, de maneras más o menos usuales, aunque siempre
con consecuencias y
produciendo daños colaterales que no entraban en los planes de Murcatto. La
diversidad de personajes que van formando su equipo (con personalidades e intereses varios) van
provocando resultados inesperados y complicando las cosas; además, las muertes que la protagonista va causando en su venganza particular
acaban afectando al destino de Styria, un territorio con más conflictos de los que creíamos...
Además, Abercrombie no ha perdido su habilidad de
sorprendernos durante su relato: los momentos en los que creas saber cómo va a ir la historia solo son una ilusión. En cualquier momento, este escritor os
trastocará todas las hipótesis que hayáis podido idear sobre cómo creéis que avanzará el argumento. Sin abandonar su humor negro ni las escenas violentas.
En cuanto a los
personajes, ya he comentado su
variedad. La protagonista principal es
Monza Murcatto, también conocida como la Serpiente de Talins o la Carnicera de Caprile.
Ha liderado sangrientas campañas luchando a favor del duque Orso, por lo que el sentimiento de traición es aún mayor. Al
inicio de cada parte del libro hay unas cuantas
páginas que van profundizando sobre su pasado, de manera que cada vez vamos conociendo mejor su situación.
Otro gran personaje que vemos aquí es el norteño
Escalofríos, quien ya fue introducido en
Antes de que los cuelguen y que, cansado de tanta guerra,
viaja a Styria con la intención de ser mejor persona. Acaba manteniendo una
relación complicada con la desconfiada Monza, quien le proporciona un trabajo con el que no se encuentra precisamente a gusto, ya que no es lo que buscaba. Su
evolución es
espectacular, una de las cosas que más me han gustado en el libro, pero dejaré que lo comprobéis por vuestra cuenta.
A
Nicomo Cosca, personaje que
me pareció muy divertido, también lo vimos por primera vez en la mencionada novela, pero aquí tiene un papel más destacado. La
evolución de este mercenario borracho, que aquí lucha por estar sobrio, también
me encantó, y su
peculiar sentido del humor le pone un punto cómico al extraño grupo de protagonistas. Mantiene una simpática amistad con
Amistoso, un
expresidiario obsesionado con los números que acaba formando parte del equipo... y cuyo
mayor deseo es volver a la cárcel. En cambio, establece una rivalidad con el
envenenador Morveer, un hombre
presuntuoso y pedante a quien acompaña su aprendiz Day, que se burla de la magia que dice haber visto Escalofríos, ya que él solo cree en la ciencia (y tiene unos aires de superioridad que... ¡buf!).
Aparecen muchos otros personajes, pero es preferible que no os hable de ellos, pues os contaría demasiado. Eso sí, debo hacer mención también a Benna Murcatto, ya que, pese a su corta aparición, su figura está presente durante todo el relato.
Las
interacciones entre todos aquellos que intervienen en
La mejor venganza producen
estupendos diálogos, como era de esperar, todos ellos acordes con cada personaje. El
sentido del humor de Abercrombie no está ausente, así como su
estilo cinematográfico a la hora de describir escenas, siempre
claro y conciso. Además, en esta novela nos hace ver una guerra desde el punto de vista contrario al que nos tenía acostumbrados Bayaz en la trilogía de
La Primera Ley, y eso acaba repercutiendo tanto en los aliados como la tecnología con la que se cuenta, como se ve conforme la trama va avanzando...
En conclusión,
La mejor venganza cuenta con un argumento
entretenido y adictivo, con objetivos más oscuros que salvar al mundo, y eso se refleja tanto en los
personajes como en sus acciones. Estos últimos son
originales e interesantes, con una
historia compleja a sus espaldas y una
considerable evolución en unos cuantos de ellos.
Cuanto más los conocemos, nuestra percepción de la trama va cambiando, ofreciendo un emocionante final después de todas las vicisitudes que viven. También hay que decir que es posible que sea el libro con la conclusión más pesimista de los arcos argumentales de Abercrombie después de todo lo que pasamos con estos personajes, pero... ¡forma parte del encanto!
