No lo vamos a negar. Aunque me gusta todo lo que viene del Mar, tengo una inclinación especial por el bacalao. Quizás porque en este pescado, más que en ningún otro, se multiplican sus variantes culinarias.
Además, como en cualquier otro pescado, la dificultad de elaboración es mínima y siempre con buenos resultados. En este caso es una receta sencilla, fácil y rápida de preparar.
Lo único que siempre hay que tener presente con el bacalao u otro pescado ES NO PASARNOS DE COCCIÓN.
Por lo demás…
2 Lomos de bacalao desalado, congelado o fresco (400 gramos)
1 Cebolla.
4 dientes de ajo.
2 Guindillas de Cayena.
Perejil.
Aceite de Oliva Virgen Extra.
Sal.
Cortamos la cebolla en juliana, picamos los ajos y el perejil, y desmenuzamos las guindillas.
En una sartén con un buen chorro de Aceite de Oliva Virgen Extra pocharemos ligeramente la cebolla, ajos y perejil.
Mientras precalentaremos el horno a 180ºC.
En una fuente de barro o de vidrio que habremos untado con aceite, colocaremos los lomos de bacalao, y los napamos con la picada que menos pochado.
Introduciremos en el horno la fuente durante unos 15-20 minutos y… ¡LISTO!
TOMATES RELLENOS. Limpiamos los tomates. Los vaciamos con una cucharilla y reservamos su pulpa.
Picamos carlota, cebolla, ajo y apio. Lo pochamos en la sartén y le añadimos la pulpa del tomate. Le ponemos al preparado queso rallado, mezclamos y rellenamos los tomates. Espolvoreamos pan rallado por encima. Con el horno precalentado a 200ºC los tenemos unos 10-15 minutos.
