14 de mayo de 2007

OPINAR


Tengo una buena amiga, a la que quiero mucho. Es de esas personas que llegan como adjuntos (es compañera de facultad de mi pareja) y que con el tiempo se quitan (como yo para ella) la etiqueta de "amiga de" para serlo sin más. Este fin de semana ha sido su cumpleaños y he cometido el pecado de no felicitarla. Ha habido un conjunto de casualidades que lo han propiciado, y entre ellas está mi natural despiste para con los teléfonos y las fechas señaladas. Ella me lo ha reprochado con cariño, como mi pareja, si es que lo reproches pueden ser cariñosos.

Y eso me ha hecho reflexionar. Cuando era adolescente tenía una especie de carcasa impermeable que impedía que lo que los demás dijeran sobre mí me afectara lo más mínimo. Eso me permitía llevar el pelo largo cuando a mi padre le llevaban los demonios o de todos era sabido que me quedaba fatal; o usar pantalones viejos, rotos y pintarrajeados. Con la edad, esa pátina de indiferencia (pasotismo lo llamaban otros) ha ido perdiendo grosor (quizá los michelines le ganaron espacio) y parece como si ya no estuviera dispuesto a escucharlo todo con indiferencia. En toda mi vida, no, en los últimos años, para ser más exactos, he tenido que escuchar que soy un gordo dejado (ay que ver, con lo que era este Larrey, como está ahora), que soy un insensible desgraciado y desagradecido, un chuleta de barrio, un egoista, que no doy nada por los demás, un cabezota, que menos mal que su hijo ha salido a la madre, que si no menudo borde. En fin, todo tipo de adjetivos calificativos despectivos. Pensaba que no le daba importancia, pero va a ser que sí. Todo eso ha ido haciendo un surco en mi paciencia y ahora ya no parece tan fácil saltárselo a la torera. En cambio intento no reprocharle a los demás su forma de ver la vida. Soy muy histriónico cuando defiendo mis ideas, pero eso solo una divertida pose. Si cuestiono lo que hacen los demás (al menos de forma consciente) es porque se me pregunta, y aun así muchas veces dudo, porque no estoy seguro de que las personas pregunten realmente para saber tu opinión, sino para que les des la razón, de no ser así jamás entendería algunos reproches y enfados. Y me he dado cuenta, y siento si soy machista en ello, pero hablo de mi vida, y sé de lo que hablo, de que quienes más me reprochan son las mujeres de mi entorno.

¿Por qué la gente se empeña en reprocharme constantemente?, ¿por qué no reflexionan un poco antes de emitir jucios sobre mi forma de ver y de hacer las cosas?, ¿no se dan cuenta de que todos hacemos y vivimos como creemos que debemos hacerlo?. ¿Hay unos parámetros establecidos, inmutables e indudables de lo que es o no importante en una amistad?. Tengo amigos con los que jamás hablo por teléfono, a los que apenas veo, pero que sé que si los necesitara tardarían en ayudarme lo que tardaran en recorrer la distancia que nos separa. No hay reproches, ni un no me llamaste o no preguntaste por mi hijo cuando tuvo tos (y debí hacerlo, de veras que debí hacerlo) porque saben que soy como soy, y si han elegido quererme es porque algo hay en mi que les despierta ese sentimiento. Tengo la sensación de que las personas esperan de mi lo que no soy, algo así como si quisieran moldearme y cuando el moldeo fracasa me lo reprochan como si siempre hubiera sido así, como ellos esperan, y ahora lo estuviera dejando de lado. Tal vez el que viva engañado sea yo y las personas me quieran, precisamente, por la etiqueta, porque en el fondo no dejo de ser el padre de su hijo, su hermano, su hijo, el amigo de la amiga, el amigo del amigo, el amigo de toda la vida...sí, tal vez el que viva engañado soy yo y sea egoista, cabezota, insensible, despistado, desagradecido...

MICROS

Toda la vida igual, siempre hay que decidir, rápido, con urgencia, elegir, tomar decisiones, ya no puedo más, de verdad que ya no puedo más...Disculpe, pero solo le pregunté si quería sacarina en el café.

Papá, ¿dónde van las estrellas cuando se mueren?

NUESTRO CUENTO


Y sigue creciendo...

Y parece como si mi soledad se hiciera más patente y solitaria, como si dentro de una sordera resignada y cometida, se diera paso al hambre de alguna migaja de ruido por compasión. Y entonces decido ¡después de tanto tiempo! salir a la calle, perderme entre la gente empaparme de sus palabras, de sus gritos, de sus risas. Pero al llegar al portal empieza a llover con fuerza y ... no tengo paraguas. Nunca he tenido paraguas...el por qué no he tenido paraguas no lo he sabido nunca y mira que me lo he preguntado veces, quizá sea que la propia coraza que he ido urdiendo con el tiempo, ha cobijado el vulnerable organismo que he sido siempre. Quizá si hubiera tenido un paraguas hubiera salido antes de casa. Aunque ha debido ser otro el motivo que me ha hecho estar tanto tiempo paralizado sin decidirme a salir a chapotear en los charcos. Desde muy niño me gusta dejarme mojar por la lluvia y los aromas de la primavera. es esta maldita cadena de rutina y tristeza. Sí, hoy es un buen día para buscar la llave. Claro, que ya me lo dijo mi madre, un día de estos perderás la cabeza, como para encontrar la llave. Será por eso, por mi mala cabeza aún no perdida del todo, que no sé como he podido llegar aquí. Tengo frío; estoy completamente empapado, y el parque, solitario. A lo lejos se escuchan los murmullos metálicos que nacen en la estación de trenes. Rebusco en mis bolsillos, pero no encuentro el billete. Ese billete de color azul que no recuerdo haber sacado. Si lo recordara, me acordaría de que jamás lo había sacado. En el fondo no quiero ir a ningún sitio, ni quedarme aquí. No sé que quiero ni cual es mi misión, nunca supe qué hacer en esta vida. Los días me agotan y las noches me asustan. Creo que mi vocación siempre ha sido y será la misma, parasito social. Pero enfín, ¡algo tendré que hacer! no me voy a quedar aquí empapado y eso, sin saber cuánto tiempo me van a dejar aquí "ellos", ¡encima sin paraguas!. A mí, por sugerir algo, me gustaría que me invitaran a tomar un té caliente, o no, mejor un brandy doble. Si lo hicieran, podría hablarles de distintas cosas, por ejemplo una de ellas: lo mucho que me desconozco... Lo mucho que me desconozco ... y yo creyendo saberlo todo, entender de todo, tener todas las respuestas. Yo ... que me creía sujeto acabado, completo, perfilado y heme aquí dubitativo ... Creo hizo mella en mi y en el entorno que me rodea. Porque me encomendaron la mision ¿de cuidar al hombre?... Siempre fui un cobarde y Él lo sabe, aun asi... no entiende que yo no soy capaz de cuidarme yo mismo, como voy a cuidar de tan tamaño dislocacion...

12 de mayo de 2007

PREJUICIOS AL VOLANTE


Me jodió más. Lo reconozco. Llevaba detrás de nosotros una veintena de kilómetros. Era un coche negro, enorme, un mercedes todo terreno. Ibamos a una velocidad alta, en torno a los 140, adelantando a una serie de camiones y vehículos lentos. Ibamos una decena mínimo de coches en hilera educada y manteniendo, unos más que otros, la distancia de seguridad. Como siempre algunos listos utilizaban los espacios entre los lentos de la derecha para ganar diez segundos al trazado, forzando hasta obligarnos a los demás a dar frenazos. Al llevar la distancia necesaria yo iba frenando con tranquilidad. Pero el vehículo negro que iba detrás no llevaban la misma distacia y una y otra vez me llevaba la mano al corazón esperando que los frenos le funcionaran al cien por cien, porque su cordura iba en reserva. En cuanto pude me hice a la derecha para que me adelantara, me estresa tener que vigilar lo que tengo delante y lo que tengo detrás. Cuando nos adelantó miré con odio, con todo el desprecio que pude sacarle a mi gesto. Y la vi, una mujer joven, con gafas de sol enormes que me devolvió la mirada como si me perdonara la vida. Reconozco que me jodió mucho más que fuera una mujer. Me esperaba a un macarra o a un yupi cocainómano con prisa. No me encaja que una mujer haga eso, y es que siempre he pensado que ellas tienen más aprecio a la vida, y que por tanto no se la van jugando al volante. Son esas mentiras que me nacen de no se sabe donde y que luego me duele ir abandonando por las esquinas de la vida. En fin, si diera la casualidad de que esa conductora que me tuvo quince minutos con el corazón en un puño estuviera leyendo esto le diría algo referente a su madre, pero no estoy seguro de que su madre tenga la culpa, además, ¿qué culpa tendrán las putas de todo esto?

MICROS

No me hagas caso, perdona, perdóname, es el alcohol el que pega, el que te grita, el que me enfurece...¡ Pues no bebas !

11 de mayo de 2007

CONCURSO DE MICROS

NOTA: los votos del grupo 1 para el C y el D serán los mismos, me equivoqué, pero como ya hay votos lo dejaremos así
Y ha llegado el momento de saber la verdad. Partimos de la base de que todos los cuentos eran muy buenos, pero ahora hemos de hacerlo desde la idea de que todos han gustado. Para aquellos que hayan recibido menos votos, y que no sirva de consuelo simplón, cada voto significa que para un lector el tuyo era el mejor.

Y ahora vamos con las semifinales. Estos son los tres grupos, que aglutinan al cuento más votado de cada grupo (debajo pondré la síntesis de votos general, uno inclsuo he tenido que decidirlo a cara o cruz)

¡¡¡ A VOTAR !!!, HASTA EL PRÓXIMO VIERNES

GRUPO 1:
A) El forense ya se lo esperaba; 20 años, 175 km/h, grado de alcoholemia elevado...Con la sierra había dejado al descubierto el cerebro, tenía la forma de una nuez sin cáscara, incluso el tamaño era el mismo.
B)Llevaba tanto tiempo ansiando este esperado momento...había depositado todas sus esperanzas en el agua de aquel santuario en Lourdes. El día no acompañaba, pero, sin pensarlo, roció sus ojos con el agua, según algunos bendita...y ahora, además de ciego, estaba mojado.
D)Empezaba a abandonarme el sueño cuando entró en mi habitación, despacio, sin hacer apenas ruido, su rostro se acercó al mío, sus ojos azules, inmensos, justificaban toda una vida. Puso su mano en mi hombro y con una voz tenue dijo: "abuelo, despierta".
GRUPO 2:
A)Ve más tranquilo, tenemos tiempo. Dale, dale, que no llegamos- aullaba la sirena.
B)Perdona, cariño mío, se me hizo tarde, el tráfico está imposible...¿qué tal te encuentras hoy?, te veo radiante como abril en Sevilla, nuestra Sevilla...¿recuerdas?...qué hermosos días aquellos, Santa Cruz, esas callejuelas...Perdone, es usted su marido, ¿verdad?, el doctor pasará luego, perdone que le pregunte, si su señora no puede reconocerlo ni recordar nada, ¿cómo sigue tratándola como si no pasara nada?. Quizá ella no me recuerde a mí, pero yo a ella sí.
C)¿Crees que podremos resistir tanto dolor?. El silencio de sus ojos le dijo que no. Después se abrazaron a la fotografía de su hijo y se dejaron caer.
Y aquí os dejo los votos recibidos por cada uno de los cuentos (espero que no haya errores en los cálculos, pero humano soy, así que mil perdones si los hubiera)
GRUPO A) 1: 14; 2: 18 y 3: 15
GRUPO B) 1: 11; 2: 15 y 3: 19
GRUPO C) 1: 16; 2: 16 y 3: 14 (Resultado a sorteo)
GRUPO D) 1: 8; 2: 8 y 3: 31 (el cuento más votado)
GRUPO E) 1: 13; 2: 20 y 3: 14
GRUPO F) 1: 7; 2: 18 y 3: 21
MUCHAS GRACIAS A TODOS LOS PARTICIPANTES

LA POLÍTICA DE LA MENTIRA


He leído una interesante carta de un profesor de filosofía de Sant Andreu de la Barca. En ella comenta que en un ejercicio con sus alumnos relativo a, cito textualmente, falacias argumentativas, los ejemplos puestos por la mayoría de ellos fueron de políticos actuales. Reflexiona, igual que yo, sobre la equiparación entre política y mentira. Lo que ocurre es que él lo hace desde la esperanza de que sus alumnos acaben encontrando otra cosa en la madurez y yo lo hago desde la resignación de lo evidente.

Y no tenemos que irnos muy lejos para encontrar ejemplos. Por ejemplo, ayer, Esperanza Aguirre ianuguró un centro de salud que está en obras y para que la foto quedara un poco más realista en su falacia (argumentativa) mandó traer una incubadora que, evidentemente, no fue más que el atrezzo necesario para la escena. Tardará meses en ser utilizada por un bebé. Pero ya está ahí la foto (aunque esta vez le saliera mal) y la estadística: tropecientos metros cuadrados de salud nuevos.

Esto me invita a pensar que en política, al final, lo único importante es la anécdota, el detalle, el chascarrillo. ¿Qué acude el Presidente a un programa?, pues lo importante es que no sabe el precio de un café, sobre sus ideas de futuro o explicaciones sobre lo no realizado ¿sabe alguien algo?. ¿Que va el de la oposición?, pues que no se atrevió a decir lo que ganaba, ¿sabes tú cuales son sus ideas de futuro para todo aquello que según ellos ha hecho mal Zapatero?, yo, tampoco. Ahora que si el candidato socialista de Madrid mandó hacer un informe sobre un banco para que el presidente dimitido de una comisión que el 99,99 % de los ciudadanos ni sabía que existía, tomara una decisión u otra. Que Espe iaugura hospitales en obras. En fin, que al final, si uno no acude a un folleto escrito, no sabe realmente de qué le están engañando. Quizá ahí esté la sabiduría popular. Y a uno, lo que le dan ganas, es de irse de juerga loca a Chueca, que ya que nos han de dar por culo que por lo menos lo haga un profesional.

EL CULTURETA


Hoy voy a recomendaros un libro. Bastaría esta frase para dar por finalizada la sección, pero no me resisto a la tentanción de seguir tecleando, y voy a recomendar uno en concreto: Laura y Julio, de mi admirado y odiado (ambos por la misma razón, su capacidad para crear) Juan José Millás. Y lo hago porque me lo he leído. Y esa frase que parece una perogrullada no lo es tanto. Desde que naciera mi pequeño la lectura de ficción y yo nos hemos distanciado. Puede que tenga celos de sus ojos verde mar, o de que tenga más tiempo Teo y su granja que para los últimos cuentos de Manuel Rivas. El caso es que, perdida ya la rutina del metro (dichoso atasco, prefería el enlatado cultural matutino) me ha resultado imposible encontrar un espacio, furtivo tal vez, para que la literatura y yo volviéramos a ser la pareja de hecho que fuimos. Por eso celebro cada vez que termino una novela con el júbilo de un hincha que ve a su equipo ganar la copa. Además, en este caso la obra creo que merece la pena. Es buena, porque basta que la escriba su autor para que lo sea, entretenida y diferente. Da la sensación de que Juan José Millás tiene la capacidad de romper el cascarón a la realidad y darle otra forma, pero interior, como si la realidad que nosotros vemos fuera ficticia y la que nos muestra él esté oculta. Eso ocurre con este peculiar trio amoroso. Hay amor, sexo (menos del que la novela pedía, hay le pongo un pero a Juan José), personajes misteriosos y un desenlace especial, diferente. La normalidad hecha pecualiar. ¿Cómo se llamaban aquellas imágenes que solo alejándote podías ver en un segundo plano la figura?. Eso hace él con Laura, Julio y su vecino. Eso serían para todos nosotros, pero para él son otra cosa. Claro, que si quieres saber qué, deberías leer la novela, el cultureta nunca cuenta los finales.

MICROS

Tranquila, cariño, ya es hora de que te marches, estás muy cansada, vete tranquila y gracias, gracias por todo...doctor, ya puede desconectar la máquina...

10 de mayo de 2007

LAS PENAS DEL CÓDIGO


Mi amigo Charlie me ha hecho llegar un curioso artículo. En él se comparan distintos delitos y sus penas. Voy a poner algunos ejemplos que ilustran de forma clara la sinrazón de este, nuestro, código penal. Que pena, madre, que pena:


1º SUPUESTO:
a) Luis se descarga una canción de Internet.
b) Luis decide que prefiere el disco original y va a El Corte Inglés a hurtarlo. Una vez allí, y para no dar dos viajes, opta por llevarse toda una discografía. La suma de lo hurtado no supera los 400 euros.

RESPUESTA: La descarga de la canción sería un delito con pena de 6 meses a dos años. El hurto de la discografía en El Corte Inglés ni siquiera sería un delito, sino una simple falta (art.623.1 del Código Penal).



2º SUPUESTO:
a)Luis se descarga una canción de Internet.
b)Luis va a hurtar a El Corte Inglés y, como se la va la
mano, se lleva cincuenta compactos, por valor global de 1.000
euros.

RESPUESTA: Seguiría siendo más grave la descarga de Internet. El hurto sería un delito, porque supera los 400 euros, pero sería de menor pena que la descarga (artículo 234 del Código Penal).

3º SUPUESTO:
a)Sergio, en el pleno uso de sus facultades mentales, se descarga una canción de Malena Gracia.
b) Sergio, en un descuido de Malena Gracia, se lleva su coche y lo devuelve 40 horas después.

RESPUESTA: Sería más grave la descarga. El hurto de uso de vehículo tiene menos pena, a tenor del artículo 244.1 del Código Penal.

4º SUPUESTO:
a)Ocho personas se intercambian copias de su música favorita.
b) Ocho personas participan en una riña tumultuosa utilizando medios o instrumentos que pueden poner en peligro sus vidas o su integridad física.

RESPUESTA: Es menos grave participar en una pelea que participar en el intercambio de compactos. participar en una riña tumultuosa tiene una pena de tres meses a un año (art. 154 del Código Penal) y el intercambio tendría una pena de 6 meses a 2 años (art. 270 del Código Penal). Si algún día te ves obligado a elegir entre participar en un intercambio de copias de CDs o participar en una pelea masiva, escoge siempre la segunda opción, que es obviamente menos reprobable.

Y estos son solo algunos de los ejemplos que ilustra el artículo que puede que carezca de la rigurosidad en sus reflexiones que uno puede esperar cuando se habla del código penal, pero su ironía ayuda a entender mejor magnitud de este entuerno. Por su puesto ¡¡¡ No al canon !!!

EL EXTRANJERO

COSAS QUE DEJÉ DE USAR (IV); 1960
A.M.C.

Al final de mi calle había un pequeño local con un cartel: “ALQUILER DE TEBEOS Y CAMBIO DE NOVELAS”. Era una habitación cuadrada, enfrente un mostrador, una estantería con las novelas y una puerta de entrada a la vivienda, en la pared de la derecha y en la de atrás dos bancos de madera. Los tebeos colgaban de unos alambres sujetos a las paredes. Leías dos o tres, pagabas los veinte o treinta céntimos y a la calle. El dueño era un señor entrañable, culto y pacifista que había estado huido en Francia por no ir a la guerra, hablaba a su nieta en francés y yo le llamaba en broma Antuan Galicien, Antonio Gallego era su verdadero nombre. Yo empecé leyendo Hazañas bélicas y El guerrero del antifaz, luego novelas del Oeste generalmente de Marcial Lafuente Estefanía y más tarde de intriga de Ágata Cristie. Finalmente dejé de ir porque mi gusto por la lectura se fue haciendo más exigente y la biblioteca de mi tío Miguel, que era Teósofo y bibliotecario de esa bondadosa y clandestina sociedad colmaba todas mis necesidades.

MICROS

Me persiguen. Son profesionales, van a matarme, no tendrán compasión, están por todas partes. Entiendo, pero de esto mejor hablaremos en la sesión de mañana, su tiempo ha terminado.

9 de mayo de 2007

MADRID Y LA CULTURA


Soy un tío de costumbres. Por las mañanas leo el periódico siempre en el mismo orden. Primero los titulares de deportes, esto me lleva hasta el semáforo del Calderón. A partir de ahi ya no puedo hasta llegar al trabajo. Luego echo un vistazo al chiste de Forges y a las cartas al director, después paso a la sección de Madrid. Hoy iba buscando una noticia concreta, la madre y el hijo que se tiraron por la ventana (un quinto piso) para escapar de las llamas. Tiraron un colchón al suelo para amortiguar la caída pero solo él acertó (¿o fue ella quien forzó su acierto) y su madre ha muerto mientras él está muy grave. En esa búsqueda me he topado con una inauguración de nuestra querida (¿tengo que poner comillas para evidencias la ironía) presidenta. Que afán el suyo (el de todos) por aparecer en la foto, si hace falta se abre una terminal tres veces o un intercambiador sin terminar, el caso es que haya todos los días una foto del político de turno zarandeado por las masas agradecidas. Y en esto que me topo con una sección especializada en las elecciones en la que un titular llama poderosamente mi atención: en Ureña hay una librería por cada 21 personas. Debajo hay un gráfico que miestra la inversión en cultura de las mayores ciudades de España. Madrid está la segunda (¡¡¡ yupi !!!), con 146 millones de euros, a 35 de Barcelona. En cambio es la segunda por abajo en porcentaje del presupuesto: 2.9% casi 6 puntos por debajo de su hermana catalana. ¿A alguien más le resulta creible?. Mi barrio carece de biblioteca pública (ayer vi el cartel de una futura, pero creo que Espe no llegará para la foto de estas elecciones, así que cuatro años le doy de duración a las obras). No hay espacios para grandes conciertos y, quizá porque también mis rutinas han cambiado, pero da la sensación, desde hace unos años, de que esta ciudad está dormida. Ya digo, puede que sea un impresión mía, pero hay veces que le debemos hacer caso a los números, que para eso están.

APAGA LA LUZ, ANDA



ADRIANA: ¿Has sido tú?

ADRIAN: ¿El qué?

ADRIANA: Eso

ADRIAN: Pues como no me des más detalles.

ADRIANA: Joder, buf, Adri, te has pasado

ADRIAN: Venga, tía, a estas alturas no nos vamos a andar con remilgos.

ADRIANA: No, si no son remilgos, son precauciones, que en una de estas va a venir Greanpeace a precintarte el culo. Anda, apaga la luz antes de que salgamos volando por los aires.

MICROS


Viéndolo cariñoso con su nieto, recuerda los gritos, los reproches, las malas caras y piensa cuanto ha perdido con la vocación tardía de su padre.

8 de mayo de 2007

CONCURSO DE MICROS.


Estoy realmente impresionado, encantado, extasiado, con la cantidad de votaciones que estamos teniendo. El viernes (no sé si quedó claro) publicaré los 6 cuentos que pasan a semifinales y de esos 6 habrá que elegir a los dos mejores que lucharán por el título de mejor micro del año.

He pensado que como premio estaría bien ponerle el nombre del ganador al concurso que será anual o algo que a él o ella le guste. Buscaremos algún día un patrocinador y tal vez haya entonces algo de dinerillo.

Este concurso tendrá, a la vuelta del verano, su versión mini: concursos de relatos realmente pequeños ¡¡¡ diez palabras !!!. Pero de esto ya hablaremos.

Ahora algunos datos sin nombres: hay un cuento que ha tenido 23 votos (el máximo) y eso supone el 60% de los votos de su grupo. El cuento menos votado tiene 5 votos, lo cual es impresionante, porque hasta el menos comercial ha logrado enganchar a cinco lectores. Ahora mismo hay solo dos grupos (¿queréis saber cuales?) en los que salvo sorpresón todo está decidido, y otros tres en los que está especialmente apretada la cosa, y puede haber un voto entre estar o no en los elegidos (¿queréis saber cuales?).

Esperaremos los últimos votos de la semana y el viernes ya podréis elegir entre los ganadores.
Gracias a todos, escritores y votantes.

FAUNA IBÉRICA


Ya estoy en el tajo. Lo cual no quiere decir que me encuentre bien en el sentido más generoso de la palabra, estado este que con la edad, el de estar bien, empieza a ser como los ovnis, que hay gente que dice que los ha visto pero nadie lo puede demostrar. Después de más de 150 llamadas al centro de salud de mi barrio (no es una hipérbole, que hice 15 tandas de 10 rellamadas) me dieron cita para 35 horas después. ¡ En un centro de salud !. Gracias Espe, no han sido 30 días. Esto para la consulta del doctor por un resfriado o lo que sea. ¿Tengo que ir a urgencias si pienso que es grave o quiero evitar que se agrave?. ¿He de acudir a la cobertura privada que me ofrece mi trabajo?. ¿Eh?, eso te ha gustado más, Esperancita, ¿a qué sí?. En fin, que lo mismo cuando esta tarde acuda al médico le tengo que contar todo en pasado porque lo que tenía ya no tengo y lo que tengo no tenía. Bueno, el cabreo perdurará, así que algo tendré que contarle.

Bueno, pero no es esto de lo que quería hablaros, sino de la fauna ibérica. No con la que Felix Rodríguez endulzó nuestra infancia, sino la humana, esa tópica que nos rodea y que muchas veces supera la ficción. La lista podría ser larga, e igual que hicimos en su día con los conductores, no parece una mala idea un catálogo completo de personajes. Lo dejaremos para otra ocasión. Esta vez me centraré en uno. Suele ir montado en un coche coupé, suele ser rojo, amarillo o negro, suele rugir como si alguien se hubiera liado a pedradas con su escape, suele llevar en invierno un plumas sin mangas y debajo camiseta de manga corta, como si el pecho fuera el de una abuela y los brazos de un marinero ruso. Por último suele llevar la ventanilla bajada, en invierno y en verano, pasando frío y calor. Desde que se generalizaron la calefacción y los aires acondicionados en esta ciudad las ventanillas solo se bajan para saludar o preguntar. Salvo este ejemplar ibérico. Lo más chocante, y aquí es donde propongo un juego, es que su entrada, además de por el rugir de su motor, suele anunciarse por una suerte de zumbido, dum, dum, dum, dum, nnnnnna, dum, dum, dum, nnnnnnnna, are you ready. Con esto de las migraciones de otras especies, también ha irrumpido otro ejemplar, más oscuro, quizá bajito y sin la modalidad No mangas, con la música diferente: a mi morena, a mi mulata, vamos mi negra.

Y lo que propongo es que busquemos, sin descanso, con profesionalidad, a un ejemplar de ventanillas bajadas que lleve, por ejemplo, a toda pastilla a Georg Friedich Händel, Vivaldi, Mocedades, Jose Luis Perales o unas rancheras de la Durcal. Cualquier canción me vale. Hombres G, Cecilia. Al que lo encuentre que lo fotografíe, lo entreviste, lo bese, porque está ante un ejemplar único. De los otros hay demasiados en el zoo de esta ciudad.

EL CANCIONERO



Lo prometido es deuda. La semana pasada la nostalgia nos ganó la partida y en esta sección quedó pendiente colgar una letra de Luis Eduardo Aute.
Resistiré la tentación de comentarla, creo que basta con las letras y que cada uno las sienta por donde le pida el cuerpo.
La semana que viene ¿qué os parece Serrat?.


Por más que me encuentre un tesoro en las Fuentes del Nilo
quiero bailar un slow with you tonight, tonight.
Y aunque seas la Mona Lisa o la Venus de Milo,
quiero bailar un slow with you tonight, tonight.
Por más que yo sea una bestia y tu seas tan bella
quiero bailar un slow with you tonight, my life
Ya puede caernos encima un diluvio de estrellas
quiero bailar un slow with you como aquel
Times goes by, so slowly.
I hunger for your... sha la la la la
slowly, slowly...
Por más que nos pille el estúpido de tu marido,
quiero bailar un slow with you tonight, tonight
Y aunque enamorarme de ti me lo tengas prohibido
quiero bailar un slow with you tonight, my love.
Por más que no pueda comprarte un collar de diamantes
quiero bailar un slow with you tonight, sweet heart
Y aunque nunca llegue a ser Harrison Ford como
amante
quiero bailar un slow with you como aquel...
At the end of'the rainbow
You'll find a pot of gold... sha la la la la
slowly, slowly
Por más que aparezca la grúa y se lleve mi coche
quiero bailar un slow with you tonight, tonight.
Por mí que reviente el planeta en confetti esta noche
quiero bailar un slow with you tonight, honey.
Y como parece que el corto verano se acaba
quiero bailar un slow with you tonight, tonight.
Seamos, al fin, Salomón y la Reina de Saba
I wanna dance a slow with you como aquel
Dream, dream, dream, dream sha la la la la
I love you when you do it
So slowly, so slowly
Oh baby, baby, be mine tonight...
I love you when you do it
so slowly, so slowly
Oh baby, baby, please hold me tight...
so slowly

MICROS


¿Me llamas puta y vas a dejarme por algo tan imbécil como que una vidente te ha dicho que tu mujer te es infiel?, pues hazlo rápido o seré yo quien lo haga antes.