Hola amigos del blog...!!! Seguro que recordáis una entrada de hace unos meses atrás, en la que os relataba una buena captura de mi compañero Marcos coincidiendo con su cumpleaños, como si Neptuno se la hubiera regalado, jijijijijiji.... os dejo el enlace por si queréis recordarlo o por si no lo visteis en su momento...
El caso es que esta semana me toca a mi cumplir años, el viernes llegaré a los "treinta y diez", y en esta ocasión, para no ser menos, nuestro amigo Neptuno se ha acordado de mi y me ha obsequiado con un precioso pez en la mañana del domingo, os dejo una foto para ir abriendo boca y os cuento algo más de la captura, que ya que voy a ser un poco más "abuelo", tengo derecho a aburriros con mis batallitas, juas juas juas.....
Una lubina de "dos botas y pico", jajajajajajaja..... como os decía, la pesqué la mañana del domingo, sobre las nueve y poco de la mañana, había bajado al pedrero sin madrugar mucho para echar unos lances con los artificiales ya que la bajamar coincidía a una hora bastante aceptable y la previsión de mar no era del todo mala.... la verdad que luego la predicción no se correspondía mucho con la realidad, ya que había una mar de fondo bastante mas importante de lo que me esperaba y de vez en cuando entraban series de olas bien gordas, que daban bastante miedo ya que me encontraba en una zona muy brava y había que andarse con ojo para no llevarse un susto. De hecho, de las cuatro echadas buenas que tiene el pedrero, sólo dejaba pescar en una de ellas, y en las quedadas, cuando entraban las olas, había que esperar para no correr riesgos. De todas maneras, la mar tenía buen color y había que intentarlo, ya era tarde para subir el acantilado y buscar más resguardo, así que más preocupado de no mojarme que de buscar buenos lances, me dispuse a mojar los peces un rato. Al segundo lance ya sentí un pequeño tirón que no se enganchó, buena señal, parecía que había algún pez por la zona, aunque la pesca no era nada sencilla, esta era la echada que tenía para intentar sacar algún pez decente del agua.....
Había que acercarse a la punta que se ve a la izquierda, pero cuando entraba la serie de olas, se la llevaba por delante, no era un lugar sencillo para pescar. Hacia atrás ya protegía un poco más, pero claro, cuanto más atrás lanzaba, menos metros ganaba a las olas.... el caso es que iba haciendo algún lance según me dejaba la mar, y se ve que a Neptuno le gustó mi persistencia y se acordó de mi cumpleaños, y envió una lubina que se tragó mi señuelo. Nada más clavar ya vi que era buena, pegó un buen arreón hacia mar adentro buscando calado, y la deje correr un poco mientras daba unos pasos hacia atrás para combatirla desde un lugar seguro, que no era plan de que viniera una ola y acabase yo en el agua con ella.... en cuanto que alcancé la "zona de seguridad", comencé a apretarla muy suavemente, por si acaso fuese muy grande, por suerte ya notaba que era buena, pero sin ser un pepino, ya que la podía acercar si le apretaba la caña y no se quedaba clavada como si fuese un arronche, mejor así, pensaba, ya que cuanto mayor fuese su tamaño, más fácil sería perderla debido a la complicación de la puesta y de los golpes de mar.... poco a poco la fui acercando, pasé un poco de miedo cuando se acercó demasiado a la punta por si acaso el hilo se pudiera rozar con la piedra, estaba con mi vieja caña de 4,20 metros que ayuda mucho en lugares así, pero Neptuno volvió en mi rescate y envió una ola que la empujó hacia el interior de la canal que se ve en la foto, ahí ya pude ver que venía muy bien clavada, con el anzuelo de la cola del pez pinchado en el lateral de la boca, ahí no hay lubina que se suelte porque es una zona de carne muy dura, así que solo me quedaba ir arrimándola poco a poco y meterla con una ola en un pozo que había por la parte de atrás, ahí ya podría bajar a cogerla sin riesgos.....
Ya con la lubina en tierra pude hacerle las fotos de rigor, aún viva y con las aletas erizadas, era un ejemplar precioso, muy oscura por arriba, señal de que llevaba ya tiempo por el pedrero, y con una forma perfecta, ni gorda ni delgada, una lubina muy bien hecha y en forma, la preparamos para la misma comida del domingo en el restaurante de mi cuñada y aprovechamos para reunirnos la familia y compartirla, regada con un buen albariño y una sopa de marisco como primer plato, no os doy más detalles que seguro que si no alguno empezará a chuparse los dedos, jajajajajajaja..... no estaba rica, no, estaba a un nivel superior aún, juas juas juas....
Ya para terminar, la foto con la lubina en la cesta, que no queda tan guapa como en el pedrero, pero también luce bastante, sobre todo brillando al sol de media mañana.... para los amantes de los datos, midió 68 cm y le faltaron 30 gramos para los tres kilazos, lo dicho, no fue un tablón pero es un buen pez, y quedará en el recuerdo como un regalo más de Neptuno en unos días forzosamente especiales, juas juas juas....... un saludo y buena pesca...!!!!!!