jueves, 30 de enero de 2014

Gazpacho de Invierno




Gazpacho es una palabra de origen portugués “caspacho” derivado del pre-romano “caspa” o sea,  residuo o fragmento. Esto alude a los trocitos de pan que contenían todos los gazpachos.
El gazpacho era un plato de pobres, de segadores y pastores que con unos ajos, miga de pan y grasa animal elaboraban una sopa fría que a todos sorprendía por la energía que daba para trabajar en los campos.
Con los tiempos la receta ha ido evolucionando y por todos es conocido el gazpacho. Pero en Extremadura se presume de tener más variantes, así podemos encontrar el gazpacho de verano, el gazpacho de poleo, el ajoblanco, el gazpacho de invierno y muchos más que seguro vamos encontrando por los rincones de esa bella tierra. Gazpachos hechos a mano, sin batidora y en boles de madera. Artesanía culinaria de los pastores transhumantes y segadores incansables.

En mi casa desde niña he visto a mi madre elaborar este gazpacho en las noches fresquitas del invierno, es un plato sencillo que aporta temple y vigor a las personas ya que se bebe templadito. He intentado buscar esta variante de gazpacho por la red y no he sido capaz de encontrarlo. Mi madre es natural de Pela, provincia de Badajoz y en los alrededores de allí también se estila este plato singular. Gazpacho que se elaboraba con los pimientos de invierno(choriceros) y los tomates de colgar, una manera de elaborar platos económicos con mucha gracia y esmero.

Deberíais animaros y probarlo, es una versión única y un plato saludable con la importancia del ajo en invierno y toda la vitamina C que aporta el cilantro.


Ingredientes del Gazpacho de Invierno




-1 o 2 ajos crudos, depende de lo fuerte que nos guste.
-1 pimiento choricero.
-1 tomate .
-1 patata.
-1 huevo.
-un ramillete de cilantro fresco.
-1 cebolleta tierna.
-Pan duro.
-Sal marina, aceite de oliva virgen y vinagre de manzana.

Elaboración del Gazpacho de Invierno

Poner a hervir en una cazuela el huevo, el pimiento choricero, la patata limpia y pelada, y el tomate entero.



Una vez escaldado el tomate,  se saca, se pela y se reserva.
Cuando el huevo esté cocido, se saca, se pela y se reserva.
Sacaremos también el pimiento choricero. Rescataremos toda la carne que podamos con una cuchara y reservaremos.



Cuando la patata esté cocida se pela y se chafa con un tenedor.
En un bol, si no tenéis de madera en el que tengáis, machacar el ajo con la mano del mortero. Ayudaros con un buen pellizco de sal para que no salte el ajo. Una vez machacado añadimos el tomate escaldado y pelado y lo machacamos también. Incorporamos la yema del huevo y también la machacamos. Más de lo mismo con la carne del pimiento choricero.



Integramos bien todos estos ingredientes y le picamos el cilantro y la cebolleta a trocitos muy pequeños. También picadita la clara del huevo.




Incorporamos un generoso chorro de aceite de oliva virgen y un chorrito de vinagre.
Lo cubriremos con agua de hervir las verduras, que a estas alturas estará templadita.

Probar y rectificar de sal y vinagre.

Servir con tostas de pan duro.





¡Sensacional!

martes, 28 de enero de 2014

Musaka de Verduras





Este pastel griego de berenjenas es una delicia al paladar, aunque la receta original es con carne también cabe la posibilidad de prepararlo de una forma más saludable, consiguiendo un resultado igual de rico pero un poco más saludable.

La berenjena es la verdura principal de este plato, es un producto muy económico y nos aporta muchos beneficios, es un excelente diurético, antioxidante gracias a la vitamina E y aporta nutrientes y minerales, como el sodio y el potasio, muy necesarios para nuestro organismo.

Podemos jugar con los ingredientes y aportar los vegetales de nuestra inventiva, volvemos a cocinar un plato muy rico y realmente económico, auténtica cocina de crisis.

Paso a enseñaros el plato, en casa me han dado un aprobado alto, a ver qué os parece a vosotros.


Ingredientes de la Musaka de Verduras





-2 berenjenas grandes.
-1 buen trozo de calabaza.
-250 gr. de espinacas (frescas o cocidas, yo las tenia congeladas de las que compro al pagés).
-2 tomates  grandes.
-2 cebollas.
-100 gr de queso rallado.
-2 huevos.
-1/2 l de leche ecológica o vegetal.
-2 cucharadas soperas de harina de trigo integral.
-Sal marina, pimienta negra y nuez moscada.
-2 ajos picados junto a un puñado de perejil.
-Aceite de oliva virgen.


Elaboración de la Musaka de Verduras


Limpiar muy buen todos los ingredientes. Cortar a rodajas las berenjenas, la calabaza, la cebolla y los tomates.




Engrasar una fuente de horno e ir colocando capas de verdura, empezando y acabando por la berenjena. Capa a capa, iremos salpimentando y añadiremos el ajo y el perejil. Apretar las verduras con las manos para que queden firmes.

Meter en el horno a 180ºC.

Mientras empezaremos a preparar una bechamel. Sofreiremos con aceite de oliva media cebolla rallada. Cuando esté transparente añadiremos la harina. La sofreiremos y seguidamente iremos añadiendo la leche poco a poco, en hilo. Removeremos con varillas pues asegura que no queden grumos. Cuando esté ligada la salsa bechamel añadiremos los dos huevos batidos. Remover e integrar con las varillas. Añadir el pellizco de nuez moscada.

Sacaremos la fuente del horno y volcaremos la bechamel ayudando a que se cuele por los huecos entre la verdura y la bandeja. Cubrir con queso rallado.

Introducir en el horno entre 30 y 40 minutos a 180ºC.




Rápido y sencillo de elaborar con un resultado de 5 estrellas. ¡Juzgad vosotros mismos!



lunes, 27 de enero de 2014

Hamburguesas de Avena Veganas





Siempre estoy intentando la manera de conseguir unas hamburguesas de verduras con una textura adecuada que no se deshagan al freír y que además queden crujientes. Realmente es difícil o necesito aún más práctica.

El otro día investigando por la red me topé con esta receta de hamburguesas y como todavía guardo la avena que me sobró de la intentona de crear mi propia leche vegetal, me puse manos a la obra.

El resultado ha sido mejor de lo que me esperaba y he conseguido la textura que buscaba, jugosas y ligadas por dentro y crujientes por fuera. No solo he dado salida a la avena que tenía aburrida en el armario, sino que además he ido a comprar más.

Le he pasado la receta a mi ecoamiga Ana y me llamó muy contenta con el resultado y eso que ha añadido los ingredientes a su manera y de su propia inventiva (que es mucha). Su hijo Víctor le ha dado el visto bueno y eso que es un niño, es decir, un comensal muy exigente que en cuanto oyen la palabra verduras se niegan a probar bocado.

Os paso también la receta para que innovéis en la cocina y para que juguéis con los ingredientes aportando vuestro granito de arena. ¡Disfrutadlas!

Ingredientes de las Hamburguesas de Avena






-1 vaso de copos de Avena (250 ml).
-1/2 vaso de agua filtrada.
-1 diente de ajo.
-1/2 zanahoria rallada.
-1/4 cebolla rallada (o 1/2 calabacín rallado).
-1 chorrito de salsa de soja (opcional).
-1 cucharadita de comino en polvo (opcional).
-Pimienta.
-Pan integral rallado.
-Aceite de oliva virgen.


Elaboración de las hamburguesas de avena


En un bol echaremos la avena y el vaso de agua, mezclaremos.

Echamos el ajo picadito, la zanahoria rallada, la cebolla, el chorrito de soja, el comino y la pimienta. La masa debe quedar un poco pegajosa.





Dejar reposar en la nevera ½ hora. Pasado este tiempo miramos la consistencia, si queda seca (que lo dudo por el calabacín o la cebolla) se le añade agua, y si queda demasiado suelta incorporamos una o dos cucharadas de pan integral rallado.





Ir dando forma con las manos a las hamburguesas y las pasamos por pan rallado.

En una sartén añadimos dos cucharaditas de aceite de oliva, no hace falta freirlas en abundante aceite. Ir dorándolas en la sartén  iremos añadiendo el aceite a medida que se vaya consumiendo.





Una buena ensalada y estas hamburguesas sorprenderán un montón a vuestros invitados.

¡ Probadlas y contadme el resultado!


domingo, 26 de enero de 2014

Patatas Rellenas y Gratinadas







Aprovechando que estaba el horno caliente  se me ha ocurrido poner unas patatas para acompañar, en la cena. En casa somos unos locos de las patatas y nos gustan en todas sus formas, fritas, cocidas, asadas y en puré, hacen las delicias de mi familia. Pero cada día no deberíamos hacer patatas fritas, así que cociéndolas o asándolas quedan más saludables y aún más ricas que fritas.

La patata es ese pobre vegetal maltratado durante años por tener un alto contenido en carbohidratos, se la considera un vegetal de los que engordan. Pero también deberíamos saber que es un excelente alimento que nos aporta muchas cosas buenas y en total solo tiene 88 kcal por 100 gramos.
Como es un tubérculo, el 75% es agua así que tan mala no debe ser, pues de grasa tiene 0. Además destaca su alto contenido en potasio ayudándonos a prevenir calambres. Así que, runners y deportistas en general, tomad nota y consumirla sin prejuicios.
También es muy rica en vitamina C, aunque al cocinarse se pierde gran parte.
Total, que no hay excusa para meterse en la cocina y darse el gustazo de hacer unas ricas patatas saludables.


Ingredientes para las patatas rellenas y gratinadas.




-4 patatas grandes.
-4 champiñones medianos.
-Un trozo de queso azul o una cucharada de queso en crema.
-1/2 vaso de leche (de vaca, cabra, ecológica, vegetal, al gusto).
-Sal marina.
-Aceite de oliva virgen.
-Pimienta negra y nuez moscada.
-Queso emmental rallado para gratinar.


Elaboración de las patatas rellenas y gratinadas

Como os dije antes he aprovechado que encendía el horno para asar las patatas,  pero la receta se puede hacer cociendo las patatas con piel hasta que estén tiernas. Así que lavamos bien para eliminar la tierra que puede quedar en ellas, pues las coceremos o introduciremos en el horno con la piel.

Una vez asadas o cocidas, las partimos por la mitad y las vaciamos con una cucharita. Dejaremos algo de carne pegada a la piel para que no se nos desmonte la estructura.

Lavar los champiñones, cortarlos a daditos muy pequeños y salpimentarlos. Saltearlos en una sartén con aceite. Sacar y reservar.

En un plato chafaremos los trozos de las patatas que hemos vaciado. Salpimentaremos y mezclaremos los champiñones que hemos reservado. Añadiremos la leche para darle más jugosidad al puré e incorporaremos también el queso cortado a cuadraditos muy pequeños. Mezclar todo muy bien y añadir la nuez moscada.




Con la masa iremos rellenando las patatas y las cubriremos con queso emmental rallado.



Meter en el horno a 180ºC  hasta que estén doradas.



En mi casa se han quedado con ganas de más, ¡¡¡están tan melosas y tiernas!!!


¿Y en tu casa que dirían si las preparas? Ya me contarás…

jueves, 23 de enero de 2014

Ensalada de Quinoa





Hoy os voy a preparar una ensalada de esas que primero piensas que no tienes nada para poner y al final acaba siendo completísima, salen ingredientes por los rincones. El resultado ha sido espectacular, he repetido dos veces.

Esta ensalada es diferente gracias a la quinoa o quinoa real, uno de esos cereales que nos ha aportado la globalización y que nos beneficia de todo lo bueno que tiene. Es un “pseudocereal”, es decir, una semilla con unos hidratos complejos que nos permite cocinar como cereal.




Aporta 16 gr de proteína cada 100 gr de quinoa y 6 gr de grasa en igual cantidad. Con lo que nos está aportando más proteína que la mayoría de cerales y también más grasa, pero no os asustéis, es grasa insaturada , la de los omega-6 y omega-3, las buenísimas.
Tiene un alto aporte de fibra y eso es por ser una semilla, siendo también apta para celiacos.

A mí me la aconsejaron Tino y Tania,  mis amigos del Camino cuando cogí una anemia importante y nada me conseguía llenar los depósitos vacíos. Resulta que es muy rica en minerales como el hierro, potasio, magnesio, fósforo y zinc. Ofrece una buena cantidad de vitaminas del complejo B y vitamina E. ¡Estupendo para mi vegetariana!.


Se puede cocinar de muchas maneras, nosotros la gastamos en sopas y salteada con verduras, pero hoy os la presento como ensalada. 

¡A por ello!



Ingredientes para la Ensalada de Quinoa Real




-250 gr de Quinoa integral ecológica.
-1 cebolleta tierna.
-1 trozo de pimiento verde.
-1 zanahoria pequeña.
-4 o 5 rabanitos.
-1 aguacate.
-1 puñado de maíz.
-5 o 6 nueces troceadas.
-1 puñado de cilantro (opcional, yo tengo siempre y lo echo en todas las ensaladas).
-Un puñado de grosellas secas, el otro día compré para probar, pero sirven también unos dátiles o unas uvas pasas.
-100 gr de queso cheddar a daditos o cualquier queso que tengáis.
-Sal marina, pimienta negra, orégano y aceite de oliva virgen.


Elaboración de la Ensalada de Quinoa Real.


Hervir la quinoa con agua filtrada. El tiempo de cocción lo indica en el envoltorio pero es el mismo que en el arroz, unos 15 minutos aproximadamente y la medida es una tacita de café por persona cocida en abundante agua salada.

Enfriar con agua fría, escurrir y reservar el cereal.

En un bol picaremos la zanahoria, la cebolleta tierna, el pimiento verde y el aguacate a cuadraditos pequeños.
Añadiremos las nueces troceadas, el maíz, el queso cheddar también troceado, las grosellas secas y el cilantro picado.

Es el momento de mezclarlo todo con la quinoa reservada.







Aliñar la ensalada con sal marina, aceite de oliva virgen y el orégano.

Opcionálmente, podéis añadirle vinagre de manzana, yo no le he puesto porque la quinoa es un cereal y la digestión empieza en la boca, con la masticación. En la boca ensalivamos y añadimos una enzima, la ptialina, que con el ácido del vinagre queda anulada. Sin esa enzima el proceso de digestión se ve interrumpido y no llega al estómago en condiciones óptimas para las siguientes fases de asimilación y digestión. Por lo tanto, si comemos cereales y/o hidratos de carbono es mejor no acompañarlo con ácidos como el vinagre o el limón. Palabrita de Suzanne Powell (especialista en alimentación ortomolecular, o algo así).


Pues dicho esto pasamos a emplatar y a disfrutar de un primer plato muy rico y saludable. A menjar!!

miércoles, 22 de enero de 2014

Risotto de Manzana, Nueces y Gorgonzola




Hacia muchos días que me apetecía hacer un risotto, son muy económicos y rápidos de hacer, el resultado es un placer al paladar y a mis niñas les encanta.

Hay que escoger una buena materia prima y he escogido un arroz ecológico del Delta del Ebro que allí de arroces entienden muchísimo.
Ya sabéis que me gusta utilizar arroz integral pero para un risotto es más difícil trabajarlo. Lo probaremos otro día, en media hora llegan las niñas a comer y no podemos arriesgar.

Los frutos secos son muy importantes en nuestra dieta cotidiana por eso debemos aprovechar e incluirlos en los platos diarios, nueces en una ensalada, picadas de almendras en un buen guiso, avellanas en alguna salsa de queso…en fin que hay muchas maneras de introducirlos invitándolos a que nos aporten sus grasas buenas, minerales y proteínas sanas.

¡¡Menos rollo y a la cocina!!



Ingredientes para el Risotto de manzana, nueces y gorgonzola





-4 medidas de arroz ecológico, yo utilizo la medida de taza de café, es la justa para una ración completa.
-1 cebolla mediana rallada.
-1 manzana variedad a vuestra elección, yo tenía Fuji.
-6 nueces enteras con cáscara, peladas y picadas.
-100 gramos de queso gorgonzola o si tenéis, otro azul.
-1 vasito de vino blanco.
-1 litro de caldo de verduras.
-Sal marina y pimienta negra al gusto.



Elaboración del Risotto de manzana, nueces y gorgonzola


En una sartén amplia sofreiremos la cebolla rallada muy a fuego lento para que se vaya mermando.

Cuando esté casi transparente añadir la manzana pelada y cortadita a dados. Pochar juntas.

Añadir el arroz y sofreír conjuntamente. Salpimentar. Ojo con la sal pues el queso aporta sal y puede quedar fuerte.



Echar el vaso de vino y evaporar.

Añadir un cazo de caldo de verduras caliente. Dejar vaya haciéndose el arroz e ir añadiendo el caldo, cazo a cazo, a medida que se vaya consumiendo.



A media cocción, se le añade la mitad de las nueces picadas.
Ir removiendo de vez en cuando.

En los últimos minutos añadir el queso troceado y remover con la cuchara de palo para que se vaya integrando.



A los 15 minutos de cocción el arroz tiene que estar tierno. Probar y rectificar de sal.

Servir con el resto de las nueces espolvoreadas por encima.





¡¡¡De restaurante italiano!!!





martes, 21 de enero de 2014

Judías estofadas con Verduras





Ha vuelto el frío y con él las ganas de comer un buen plato de cuchara. Siempre buscando los platos tradicionales y adaptándolos a nuestra pequeña vegetariana. Es difícil comer unas judías estofadas sin chorizo pero viendo el resultado no lo he echado ni de menos.
He de confesar que tenía el chorizo preparado para hacerlo aparte y que luego cada uno escogiera la opción de añadirlo o no. Pero he tenido la brillante idea de leer los ingredientes y no lo voy a poner. He hecho una foto a los ingredientes para que entendáis lo fácil que es informarse. Debería ser nuestra obligación ya que la salud de nuestra familia está en nuestras manos, lo que yo llamo “alimentación consciente”.
He de deciros que el chorizo dice ser un jabuguito de Huelva y en el envoltorio marca 3 bellotitas. Vamos que te lo llevas pensando que te llevas calidad, y nada más lejos.




Analicemos pues los ingredientes:
Magro de cerdo ibérico, pimentón, especia, sal y ajo; hasta aquí maravilloso pero empecemos con las “Es”:
E450i-difosfato de sodio (dice ser emulgente). Sales de sodio, potasio y calcio, con fosfatos. Todas son producidas sintéticamente a partir de los carbonatos respectivos y del ácido fosfórico. Altas concentraciones de fosfatos pueden alterar diversos procesos metabólicos debido a que el fosfato juega un rol importante en el metabolismo general. Catalogado como PELIGROSO.
E451i-trifosfato de pentapotasio (dice ser otro emulgente) Sales de sodio/potasio con fosfatos. Todos son producidos sintéticamente a partir de los carbonatos respectivos y del ácido fosfórico. Altas concentraciones de fosfatos pueden alterar diversos procesos metabólicos debido a que el fosfato juega un rol importante en el metabolismo general. Catalogado como PELIGROSO.
E331-citrato monosódico , corrector de acidez de origen químico catalogado como SOSPECHOSO.
E325- lactato sódico, antioxidante no nocivo de origen natural no determinado...uffff, uno que da el pego.
E301-ascorbato sódico, antioxidante no nocivo de origen químico.
E250-nitrito sódico, conservante químico catalogado como PELIGROSO.
E252-nitrato potásico, conservante químico catalogado como PELIGROSO.
E262ii-diacetato de sodio, conservante químico no nocivo. Otro que se salva.
E120-ácido carmínico o cochinilla, sí, sí, cochinilla...arrrgggg. Colorante catalogado como PELIGROSO  y de origen animal. 

En los dos primeros he explicado un poco más pero en los siguientes, no he querido alargarme más, podéis informaros vosotros mismos y con los que he indicado ya os podéis hacer una idea de cómo nos alimentamos. Alimentos con química que son un peligro para nuestra familia, algunos de ellos cancerígenos, así que vosotros escogéis si con chorizo o sin chorizo.

También cabe la posibilidad de comprar chorizos más naturales, que me imagino los hay, seguro que todavía hay lugares que hacen matanza de forma tradicional y no le meten conservantes y colorantes  nocivos para nuestra salud. ¡Si encontráis chorizo saludable, avisadme! Es que no me veo criando un cerdo en el lavadero.
Ya sé que me he alargado mucho pero me veía en la obligación de informaros y después que cada uno escoja. Pero vamos sin más dilaciones a por los ingredientes.


Ingredientes para las Judias estofadas con Verduras.




-400 gr. de judías blancas, yo he escogido la modalidad del Ganxet ya que son suaves y tiernas con lo que se cuecen en menos tiempo que as demás.
-1 cebolla rallada.
-1 pimiento verde (gracias a su vitamina C ayuda a que el hierro de las judías se asimile mejor en nuestro organismo).
-1 zanahoria troceada.
-1 trozo de calabacín a dados.
-1 pimiento choricero o una ñora.
-1 tomate rallado.
-Acelgas de tallo rojo.
-2 o 3 dientes de ajo.
-1 hoja de laurel.
-1 pellizco de orégano.
-Pimentón de la Vera.
-1 cayena, si el pimentón de la Vera no era picante.
-Aceite de oliva virgen.
-Sal marina.

La noche anterior habremos puesto a remojar con agua filtrada las judías del ganxet. Al día siguiente, después de hidratarse doblan su tamaño.




Pondremos a hervir con agua fría y filtrada, las judías junto a la hoja de laurel, los ajos, la ñora y la cayena. A fuego lento.

En una sartén, sofreiremos la cebolla rallada. Una vez pochada añadiremos el pimiento verde cortado a cuadraditos, la zanahoria, el calabacín y por último el tomate.



Cuando todo esté bien pochadito le añadiremos una buena cucharada de pimentón de la Vera (sustituirá el colorcito que deja el chorizo y el sabor mejora muchísimo). Antes de que se queme el pimentón se añade un vaso de agua, siempre filtrada.




Cuando las judías ya estén a media cocción añadiremos el sofrito. Una cucharadita pequeña de orégano y salaremos.




Mantener el estofado con caldo añadiendo el agua fría siempre que lo necesite, así las judías no se pelaran.

Es el momento de añadir también las acelgas.


Yo las tenía escaldadas y congeladas por mí, ya que la última vez que fuí al Camp de la Sort, Dani me ofreció probar las acelgas de tallo rojo, muy finas y más ricas en hierro que el resto, como le compré tanta (cada vez resulta más difícil encontrar verdura ecológica), decidí lavar y escaldarla toda para después meterla en bolsas de congelación (sin líquido). Así siempre que necesito solo tengo que tirar de congelador. La huerta en mi nevera.




Añado las acelgas directamente congeladas pues ya están limpias y cortadas. Sólo quedaran unos veinte minutos de cocción. Ya os  he dicho que esta variedad de “mongetes” se cuecen muy rápido.





Probar y rectificar de sal y a disfrutar de un plato calentito con proteína vegetal y espectacularmente rica en vitaminas y minerales... ¿se lo vais a negar a vuestra familia?