Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como emociones

Pintando atardeceres.

Imagen
V iajamos hasta el capítulo VI, que coincide esta vez con un número que ha venido llamando nuestra atención y que como os habéis percatado va de la mano del Principito desde el comienzo de nuestra aventura. ¿Seremos capaces de seguir rastreándolo hasta el final y hacer una reflexión? Un reto difícil pero que intentaremos.  Prestemos atención, esta parte de su historia puede resultarnos reveladora. Nuestro amigo nos habla apasionadamente de la suavidad de las puestas de sol y nos cuenta que durante mucho tiempo el disfrutarlas a solas fue su única distracción. Cuando está muy triste, le consuela contemplarlas una y otra vez. Tiene una vida melancólica. Hasta ahora nos habíamos hecho una idea sobre su pequeño planeta, sus rutinas, necesidades , miedos , preocupaciones,¿pero qué sabemos en verdad sobre él? Compartiendo nuestra lectura, nos surgen estos interrogantes: - ¿Qué le ocurre a nuestro pequeño príncipe? ¿ Por qué estará tan triste? ¿Será por sus proble...

Carta a Verne (2)

Imagen
Cartagena, 16 de mayo, 2017        Querido Verne: ¡Es tan difícil decir con palabras lo que me has hecho sentir! Nunca te había leído, pero ahora sé que quiero seguir soñando contigo. De mayor me gustaría vivir como aventurero, pero prudente. Hay personas que confunden prudencia  con cobardía, pero yo no, ¡he visto a Axel! Me pregunto cómo aparecen todos esos personajes en tu cabeza... Lo que más me ha impresionado han sido esas preciosas setas gigantes y casi oír las pisadas de animales prehistóricos. Los personajes que más me han gustado son Otto y Hans. El profesor es un hombre inteligente y gracioso, capaz de resolver los problemas que van apareciendo en la expedición. Hans nos ha enseñado que todo el mundo es importante en un equipo, sin su experiencia por esos lugares no habrían encontrado el volcán. Sin embargo, querido Julio, hemos echado en falta un personaje femenino que los acompañase sabiamente, ya que te anticipabas tanto...

Escribimos a Verne

Imagen
A l finalizar el proyecto, nos queda una sensación de agradecimiento por los buenos momentos que nos ha hecho pasar nuestro libro. El vuelo ha sido nuestra recompensa final. Nos ha hecho compartir emociones, incertidumbres, curiosidades, puntos de vista diferentes, nos ha creado nuevos pensamientos, nos ha contagiado su vena científica y hasta nos ha motivado a construir parte del escenario principal de su obra: el volcán Snaefellsjökull. En nuestro último debate surge la idea de escribir a Verne una carta emotiva, contándole todo lo que nos ha hecho sentir, así como lo que hemos echado en falta. Se trata de fomentar una valoración crítica hacia esta obra, que es uno de los objetivos de nuestro proyecto. Así que, sin más dilación, entremos en este tesoro lleno de sentimiento y mucho corazón. Carta a Verne... Queremos seguir soñando contigo... Querido Julio: Es tan difícil decir con palabras lo que nos ha hecho sentir...

Pensamientos que inundan a Graüben...

Imagen
Tras la lectura, se abre un debate sobre los posibles pensamientos que podrían inundar la mente de Graüben, algunos de ellos enganchados y esquinados en el corazón. Perciben, a través de su descripción, que más allá de un dulcificado físico, es una chica inteligente, entendida en minerales, con un carácter serio y muy capaz de seguirles en ese maravilloso viaje, pero por alguna razón se siente un "estorbo". ¿Esa sensación viene de serie o la proporciona un entorno donde la mujer tiene poco que decidir? ¿Son limitaciones personales o más bien contagiadas hasta el punto de hacerlas propias por una sociedad bastante desequilibrada en cuanto a derechos de género? El caso es que Graüben asume el papel de catalizador con Axel, animándolo a iniciar ese intrépido y peligroso viaje. Pero ella se queda esperando a que regrese ... y puedan casarse. Casarse como la única posibilidad que se les ofrecía a las mujeres para ser respetadas socialmente. ¿Qué puede pensar Graü...

Damos alma al personaje con la ayuda del genial Verne.

Imagen
Estar inmersos en historias donde se cruzan vidas imaginarias nos proporciona una ayuda inestimable a la hora de ir encajando y recolocando las emociones que nos provocan. Se le presupone al escritor la inteligencia emocional adecuada para llevarnos por laberintos que despiertan sentimientos no sentidos, revivir en otra piel emociones que añoramos o seguimos disfrutando y el  rechazo ante comportamientos nada proporcionados ni ajustados a la ética. Estamos rodeados de un mundo de valores que viven en esos refugios imaginarios y los ensalzamos, premiamos o castigamos con toda severidad. Desde niños es importante leer emocionalmente. Tocar el fondo de los personajes, empatizar con ellos, lo que, sin darnos cuenta, va forjando nuestro criterio como personas. Personas en evolución, que, por cierto, lo somos todos. Verne, en este caso, nos da argumentos para admirar o rechazar ciertos rasgos de carácter que dibuja en sus personajes. Así lo hacemos con el profesor Otto...