Los mas leídos...cada uno sus motivos

Mostrando entradas con la etiqueta trabajo en equipo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta trabajo en equipo. Mostrar todas las entradas

lunes, 15 de julio de 2013

Si te confundes...sonríe y sigue

Han pasado dos años y medio desde que, muy por casualidad y sobre todo como fruto de la necesidad dedico tres días en semana a algo que si me hubiesen dicho hace cinco años me hubiese provocado un tremendo ataque de risa.
Por casualidad, porque el de fotografía estaba completo y no quedaba otra cosa, y por necesidad porque buscaba sin tregua ocupar el tiempo en cualquier cosa que me evitase pensar en las magulladuras que los golpes que una época cruel se encargó sin piedad de propinarme.
Ahora, consciente de mi suerte, solo quiero hacer un pequeño tributo a estas personas, compañeras de friquismo como yo las llamo, que han contribuido tanto recuperarme la sonrisa entre camellos y africanas. Especialmente a F y M.J. de las que ya no puedo prescindir. Pero también a C. y S. nuestras niñas, a M. y S. tan geniales, a todas aquellas con las que hemos compartido nervios, monedas, abalorios e imperdibles por kilos y por supuesto M. la "culpable" de que todas estemos aquí, creadora incansable, fuente inagotable de coreografías que aguanta con estoicismo nuestras quejas, carencias e inseguridades con una sonrisa y un muybienchicas continuo en la boca.
Nunca pensé que una afición espontánea me daría tanto, ni que compañeras tan auténticas y diferentes tanto a mi como entre ellas, conseguirían implicarme de semejante modo en este bonito proyecto sin principio ni fin. De este modo, doy las gracias a estas mujeres maravillosas que no solo contribuyeron a levantarme el ánimo, sino que están acabando a tortas con mi miedo escénico, confirmando mi teoría de que las terapias de choque es lo que mejor funciona.
Así, sin mas, dejo no sin cierta vergüenza mi pequeño tributo a ellas. Con ustedes, sin mas pretensiones que pasar un buen rato y notar ese extra de adrenalina que te hace flotar, les dejo con su Badik, nuestro Badik.
Solo les pido comprensión, no somos profesionales y cuando nos confundimos sonreímos y desde luego, seguimos.
Lo siento chicas si no es nuestra mejor actuación, como diría la Lupe, pero estamos casi todas y eso es lo importante.




Coreografía de mi profesora M.S.

domingo, 7 de abril de 2013

Mamá me pongo a trabajar porque si me apetece un cuerno de chocolate, me lo compro

Así de básica y contundente, tras años de esperar ocasiones especiales y visitas para abrir el surtido de galletas de chocolate, cuya visión ejercía de campanilla pavloviana para los cuatro niños y no tan niños que esperaban ansiosos, salivando, el momento de ver desprecintar aquel tesoro.
Eran tiempos difíciles y aquellos muchachos y no tan muchachos, aunque no podían evitar el ramalazo infantil de querer lo que se desea al margen de toda razón,eran conscientes de que había que callar y arrimar el hombro.
Aprendieron pronto, demasiado pronto, que el serrín es terrible cuando entra por la nariz, pero que rellena muñecas de trapo que sonríen aun cuando se les está clavando una aguja.
Después fueron las pinzas, esas endemoniadas que despellejaban los dedos y los llenaban de padrastros, contar, unir, colocar para introducir los muelles en aquellas bases de metal macizo con piezas soldadas, que nada tenían que ver la una con la otra, y que seguramente habían sido ideadas y construidas por algún pseudo-ingeniero frustrado y sin recursos cuya genialidad era despreciada por una sociedad incapaz de dar cabida a su 'arte'... Eran miles, y no se podía bajar a jugar hasta que se acabaran, eran tiempos difíciles y todos lo sabían, así que no dudaban en decir a sus amigos que bajarían mas tarde mientras miraban mordiéndose el labio inferior, como sus amigos se iban con el balón bajo el brazo.
Así de básica y contundente fue esa muchacha que tuvo muy claro lo que había y lo que debía hacer. Tan morena que podría pasar por india, lista y con notas estupendas en los primeros años de instituto que mantuvo hasta el final de la carrera. Sabía que tenía que salir de la cadena de montaje casera y buscar fuera la mejor manera de hacer aquellas cosas que deseaba. Eran tiempos difíciles y esta niña no tan niña abría las puertas de lo posible, que todos, poco a poco fueron atravesando con mejor que peor suerte.
Años después, no hay reproches, resquemores, ni traumas solo recuerdos cargados de ternura, comprensión y nostalgia, eran tiempos difíciles y todos sabían lo que tocaba; años después distando mucho de ser niños aun recuerdan cuando se juntan y ríen levantando las cejas al comparar con sus hijos y sobrinos que, afortunadamente, nunca sabrán lo mucho que pica el serrín en los ojos