Este blister de comidas me lo traje también de la Feria de las Cotxeres de Sants, cada vez que veía uno me atacaba la nostalgia y este año, finalmente, sucumbí y lo compré.
Recuerdo perfectamente haber jugado con la barra de pan, el pollo, la leche y las botellas de cola.
¡Que recuerdos...!
Nancy que es muy lista, se lo ha apropiado. Dice que en la tienda de ultramarinos de la esquina no encuentra tanta variedad de productos y que lo necesita para llenar la depensa de su nidito de amor.
Parece que el queso de bola estaba de oferta y los quesitos de la vaca que ríe son deliciosos.
Hay muchas botellas: leche, vino espumoso, zumo de cerezas, yogures, latas de conservas y esas famosas marcas de cola.
¡Lástima que la leche no sea desnatada!
Lucas vuelve del gimnasio con el pan y pregunta que hay para cenar. Nancy que está cansada, pensaba hacer algo rápido como un bocadillo de atún...
pero tanta bicicleta estática ha dejado a Lucas hambriento y le pide que cocine uno de esos deliciosos pollos a l'ast que sólo ella sabe hacer.
A cambio el prepara la mesa con esa preciosa mantelería personalizada y la vajilla que les regalaron para la boda.
¡Que aroma!
¡Que sabor!
Y para beber la competencia de la chispa de la vida.
De postre Nancy que es una chica sana, decide abrir una lata de piña. Lucas prefiere un yogur natural de los de toda la vida (igualito a los que comíamos en casa) y unos sabrosos bizcochos.
Les dejaremos que se expliquen como les ha ido el día mientras toman café y leen los últimos watsaps.