La foto es la que se me ha ocurrido después de haberme pasado la mañana escuchando a los Creedence Clearwater Revival.
Ahora me voy a comer. Eso sí, en familia. Como tantos otros domingos del año.
Salud a todos
Pues yo no paro de cantar Marlango y me estoy quedando mustio. Bonita foto. Me voy también a comer. Han salido unos cocos buenísimos en la ribera norte de La Isla Misteriosa. Un beso.
ResponderEliminarFantastici CCR!
ResponderEliminarBuon Natale
Mauro
Creedence without corner...
ResponderEliminarCredence y en un disco de vinilo, no mucha gente se acuerda de eso...
ResponderEliminarQué buena foto, Mayte y qué buena banda.
ResponderEliminarmuy buena idea y muy buena banda...vinilo forever!!!...
ResponderEliminarcomo tantos otros domingos del año...
ResponderEliminarPreciosa foto, casi se escucha la música. Un abrazo y Feliz NAvidad
ResponderEliminarEl misterio de los surcos de un vinilo, y la púa desentrañándolos para nosotros.
ResponderEliminarCasi escucho desde aquí a los Creedence...
Es como volver.
ResponderEliminarMe encanta la foto, el tono, encuadre, dinamismo y la Creedence, también, jeje.
ResponderEliminarEnhorabuena por ese buen rato que has tenido y por la foto.
Saludos.
Por cierto, me ha dicho un pajarito que andas un poco desanimada con el blog. No lo dejes por favor, publica cuando te apetezca, que seguiremos visitándote.
ResponderEliminarUn abrazo.
Feliz 2012, Mayte.
ResponderEliminarEspero que, entre otras cosas, puedas seguir deleitándonos con la sutileza de tu arte.
Besos.
Feliz 2012, querida!
ResponderEliminarPreciosa imagen, para dejarse llevar y hasta parece que llega el sonido...
En el año que entra esperamos seguir pasando por aquí a recrear nuestro ojillos.
Lo bad moon rising le viene que ni pintado a lo que nos espera... Je, je
ResponderEliminarLos Creedence valen para sesion vermout, siesta y noche de marcha, y esta foto para que algunos sepan que el vinilo no es pasado
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