Cinco años de Preciado en el Sporting

El jueves de la semana equivalente a la presente hace 5 años (22 de junio de 2006), Manolo Preciado era presentado como nuevo entrenador del Sporting. Su primera rueda de prensa tiene más valor ahora que la que tuvo entonces, cuando la falta de fe y el pesisimismo envolvían al sportinguismo. Él lo tuvo claro desde el principio: "Hay que transmitir alegría, que es lo que falta aquí". Sabía que llegaba a un club en horas bajas, tanto en lo económico como en lo deportivo, pero prefirió asumir el riesgo y ganar. De hecho, ya vatició en su presentación algo que ha venido repitiendo año tras año: "En Gijón voy a ser más feliz que en otros sitios". Tal vez por eso su fichaje se cerró rápido, en una reunón muy breve celebrada en Santander.

Tampoco parecía preocuparle que el Sporting no contase con recursos para reforzar la plantilla: "Hay que aplicar ingenio y acierto, porque tenemos menos dinero que el resto. Hay que tener la humildad del más malo y jugar como el más modesto". Se marcó el reto de devolver la ilusión hasta el punto de querer volver a ver El Molinón lleno. Únicamente pidió el apoyo de todo el entorno para levantar al club, ofreciendo "la confianza e ilusión que os trae uno de Santander".

Cinco años después, Preciado puede presumir de ser uno de los técnicos que han permanecido más temporadas consecutivas en un mismo equipo, algo rarísimo en el fútbol, algo extraordinario en Gijón. También puede sacar pecho de devolver esa ilusión perdida, de contribuir a llenar El Molinón y de conseguir un ascenso que parecía imposible y tres permanencias cuyo valor es altísimo, aunque el paso del tiempo las va convirtiendo en una exigencia rutinaria.

Este post únicamente pretende homenajear a un entrenador, y sobre todo una persona, que se merece todo lo bueno que le pueda pasar. Y sería un buen síntoma que siguiera sumando años como sportinguista. Algunos como el que suscribe estas líneas así lo deseamos ahora, al igual que lo defendimos en el pasado mes de diciembre. Entonces, cuando le empezaron a caer palos, yo dije que debía seguir, pero que -como ya había comentado el verano pasado- la plantilla necesitaba un par de refuerzos. Llegaron Cases y André Castro, el equipo entró en una dinámica positiva y el equipo acabó en la mitad de la tabla (ocupando puesto europeo si se contase únicamente la segunda vuelta), siendo el tercer conjunto menos goleado del campeonato. No todo fue mérito de Preciado, como tampoco toda la culpa era suya en diciembre. No soy sospechoso de evitar mencionar sus fallos, de hecho lo seguiré haciendo. Sí lo soy, pese a ellos, de haber sido partidario de su continuidad durante los cinco años. Gracias por todo, Manolo, y felicidades por estos 5 años.

Entrevista: Martí Perarnau - "Senda de Campeones"

Martí Perarnau -ex atleta, periodista y una de las referencias de la blogosfera y del twitter- acaba de publicar el libro 'Senda de Campeones', sobre el que gira esta extensa entrevista.

P- ¿Cómo y cuándo surge ‘Senda de Campeones’?
R- Surge en agosto de 2010. El diario Sport, donde colaboro con análisis futbolísticos, me encargó una serie de reportajes sobre las principales promesas del Barça B, que acababa de subir a Segunda. Me hizo gracia porque yo seguí bastante a estos chicos e hice reportajes sobre Thiago, Sergi Roberto, Bartra, Fontás, etc. Al terminar, quedé muy satisfecho con el producto periodístico. Y me dije que había materia para hacer algo más extenso; me surgió una pregunta: ¿cómo es posible que el Barça cada año saque tantos buenos jugadores de manera tan sostenible durante tantos años? No digo que los aproveche en el primer equipo, que ahora sí y en otras épocas no, sino que más bien cómo es posible que consigan tanto producto. A partir de ahí empecé a tirar del hilo.

P- ¿Cómo fue la experiencia de llevar a cabo tu primer libro?
R- Es una experiencia diferente, me enfrenté a ella sin ningún prejuicio previo. Lo enfocaba como reportaje periodístico largo, que en lugar de ocupar una doble página fueran 368 páginas. Ha sido una aventura muy gratificante. Al tener más tiempo, tienes más posibilidades de informarte, documentarte, confirmar un dato, reconfirmarlo. Si tienes alguna duda, puedes volver a llamar a tu fuente. Es mejor trabajo porque tienes más recursos de tiempo. Termina y se hace un cierto vacío. Tardan meses en editarlo, lo presentas, crea una sensación entre novedosa y extraña. Si tiene que haber un segundo libro, habrá que meditarlo mucho. Pensar sobre si vale la pena y sobre la temática. Es mucho esfuerzo intelectual.

P- ¿Con qué te quedas del libro o del proceso para elaborarlo?
R- Me quedaría con tres cosas. La más emotiva es el relato de Marc Crosas, un centrocampista clásico de la Masía que ve que no tiene sitio en el primer equipo. Se va al Lyon, al Celtic de Glasgow, gana Ligas en Francia y Escocia, y ahora está en Rusia. Lo más emotivo es como cuenta sus ochos años de trabajo en la cantera, sus sacrificios, sus éxitos y fracasos, y como explica la vida fuera del Barça, como la va descubriendo y se va adaptando a ella. Y sus párrafos finales explicando que realmente lo importante no es llegar sino el camino, ser amigo de los que están ahora triunfando y haber podido jugar allí.

P- Quedan las otras dos cosas…
R- Son dos hechos que son los que más me gustan. Descubrir a través de Milla, el primer 4 que implantó Cruyff, que cuando yo hablo de un idioma realmente hay vocablos como el “hop”, que utilizan los jugadores del Barça para avisarse en situaciones del juego. Milla lo descubre en el 84 cuando llega al club y ahora como seleccionador español le llegan los chavales del Barça y siguen hablando del “hop”. Rexach me dijo que en el 60 ya existía cuando él llegó.
Y a Guardiola yo le hablo de una forma de entender el juego relacionada con la Teoría del Caos y el Efecto Mariposa. Me dice que coincide pero que tienen otra explicación, la paradoja de las judías secas. Es de Rexach. Es como si vuelcas sobre un plato judías secas y quedan amontonadas; el entrenador tiene que mover suavemente el plato para que todas se vayan colocando en su sitio.

P- Una vez que lo he acabado, mi conclusión es que es un libro para gente del mundo del fútbol o a la que le guste mucho aspectos ‘internos’ del fútbol (sistemas de juegos, scouting, métodos de entrenamiento,…).
R- Es un libro muy futbolero, entendido por quien le guste el fútbol. Hay muchos lectores que me han dicho algo que me parece importante y satisfactorio: ahora que nos has explicado como funciona lo de abajo (cantera), entendemos mejor por qué ocurren las cosas arriba (el primer equipo). Cuestiones tácticas, cuestión de perfil de jugadores, por qué un jugador y no otro, por qué cuesta adaptarse cuando llega uno de fuera y en cambio sube uno del Barça B y se adapta instantáneamente.

P- El libro permite comprender muy bien el mérito que tiene que el Barcelona haya mantenido tanto tiempo una filosofía, con independencia de los éxitos y fracasos propios y ajenos.
R- He intentado reflejar que esto no es una moda, que tiene partes de moda en estos momentos con unos jugadores fabulosos salidos de la cantera que consiguen grandes éxitos. Pero es algo que viene desde hace 40 años, desde que llegó Laureano Ruiz. No cambian los mecanismos de toda esta industria de construcción de jugadores.
P- Y el libro también ayuda a comprender las declaraciones de Guardiola.
R- Cuando uno vive todo eso y lo ha investigado es cuando comprende las palabras de Guardiola, que desde fuera pueden sonar demagógicas y mediáticas pero que cuando uno lo vive comprende que para ellos el objetivo es el título pero la gran satisfacción es cuando uno de estos chavales que llevan 12 años consigue debutar con el primer equipo. Hay una fiesta interna de maestros, entrenadores, compañeros.

P- ¿Cuántas horas invertidas hay detrás del libro, por ejemplo en entrevistas.
R- No lo he calculado. Hay muchas horas de entrevistas. Solo con el ex presidente Núñez, que no concedía entrevistas, estuvimos tres horas reunidos. Con Xavi, en el vestuario del Camp Nou, se nos fue la hora de comer; miramos el reloj y eran las cuatro de la tarde. Era más una charla futbolística que una entrevista. Xavi es muy futbolero. Y con Guardiola tres cuartos de lo mismo. Supongo que habrá unas 40-50 horas de entrevistas, algunos repetidos volviendo a llamar para confirmar cosas.

P- Y también habrás dedicado muchísimas horas al visionado de partidos, por TV o in situ…
R- Habría que preguntarle a mi mujer. Han sido fines y fines de semanas dedicados casi íntegramente a visionar todo lo que se emitía por BarçaTV, grabando partidos, acudiendo a entrenamientos a Las Rozas de todas las categorías de la Selección española para ver como se comportan los chicos en entrenamientos, torneos de federaciones autonómicas,… muchísimas horas.

P-Internet (blogs y Twitter principalmente) ayuda a promocionar trabajos y a que un profesional pueda darse a conocer, pero también contribuye a la dificultad de ofrecer algo noticioso y novedoso.
R- Efectivamente, es difícil sorprender. Cada vez hay menos noticias y más difíciles de sacar y publicar. Y quien la tiene, salen antes en twitter que en otros medios. Por otro lado, puedes promocionar, hacer llegar determinados conocimientos, productos e ideas mucho más allá.

P- Por último, Martí, imagino que habrá sido especial la coincidencia en fechas de la publicación de ‘Senda de Campeones’ y del primer disco de ‘Mucho’, el nuevo proyecto musical de tu hijo.
R- Ha sido una coincidencia genial en casa, un poco estresante. El día que presentaba el libro en Barcelona mi hijo presentaba su disco en Huelva. Yo he estado explicando el libro desde entonces y él está de gira permanente con ‘Mucho’. Espero que le vaya mejor que a mí. A mí me va bastante bien y a él le irá mejor, tiene mucho más talento.

P- Muchas gracias y un placer, Martí. Enhorabuena por el libro, que desde aquí recomendamos.
R- Gracias igualmente y también un placer.

El dilema de Bojan

Nunca he escondido mis debilidades futbolísticas en este blog. Bojan es una de ellas. Desde que lo vi jugar por primera vez, cuando él tenía 16 años, hasta ahora tras unos meses en los que lo fácil -por lo que se lee o escucha- es cargar contra el chaval. Mis argumentos para tener una debilidad hacia cualquier deportista van más allá de números y rendimientos, aunque incluso estos factores jugarían a mi favor.

Si en los últimos veranos siempre surgían voces pregonando que al delantero le convenía salir cedido, esta vez no iba a ser una excepción, más si cabe cuando se habla de renovar la línea de ataque. Cualquier futbolista no querría salir de un club como el Barcelona, es la cima que uno puede alcanzar (junto a tres o cuatro entidades más, cuyo atractivo varía según el momento). Al margen de esta obviedad, en el caso de Bojan intuyo que nunca ha querido salir del Barça principalmente por dos motivos. El primero, porque es muy culé; quiere triunfar con la camiseta azulgrana y haber vivido grandes momentos (la temporada de su debut y el final de la campaña pasada) le hace ver que tiene potencial para lograrlo. Y el segundo, porque los hechos demuestran que los que emigran, cedidos o traspasados, tienen casi cerrada la puerta de regreso.

Este verano tiene un dilema: aceptar la supuesta voluntad del club de animarle a salir (la incógnita sería si traspasado o cedido) o hacer uso de una de sus virtudes, la cabezonería, y demostrar que tiene sitio en el calificado mejor equipo de la historia. Si se va, tiene que escoger muy bien el destino. No todas las Ligas ni todos los equipos que suspiran por él le van a ofrecer unas condiciones favorables para su crecimiento deportivo. Dejemos a un lado el Villarreal: opción óptima en lo futbolístico y fuera del terreno de juego, aunque parece que sólo iría como moneda de cambio, algo que él no acepta. Así, de la lista de clubes incluidos en los rumores, para mí el Arsenal es el rincón idóneo en lo futbolístico, por filosofía de club, por estilo de juego, compañeros que le acompañarán en el césped y por el entorno (niveles de exigencia-urgencia-presión); la adaptación fuera del césped es impredecible. No le veo encajando en el Liverpool y tengo dudas sobre la Roma. Está claro que el Calcio no juega a favor de Bojan, pero tal vez el hecho de que Luis Enrique sea el entrenador ayude y mucho (por el estilo de juego que exportará a la capital italiana y el posible desembarco de más jugadores con el sello de La Masía).

¿Y qué pasaría si se queda? Pues que tendría, una temporada más, muchos factores en contra. La mayoría ajenos a él y casi me atrevería a calificarlos de irreversibles. Bojan tendría menos minutos de los que necesitaría a su edad (y por la tendencia de la última campaña). Y esos minutos serían, en su mayoría, o fuera de puesto (en la banda y no como 9, que es su sitio), y/o con poco tiempo por encuentro para demostrar el fútbol que le convirtió en el mejor goleador de las categorías inferiores culés, y/o con partidos sentenciados-partidos marcados por la ansiedad de un mal resultado. Esto juega en contra de lo que necesita Bojan: confianza+continuidad. Una cosa va ligada a la otra. Lo dije en sus buenos momentos y lo repito ahora, el de Linyola sólo necesita jugar en su sitio de manera regular y saber que tiene la confianza del entorno (entrenador-compañeros-afición). En esos parámetros, sé que el éxito vendría sólo.

Si algún parámetro se ve bloquedado o rebajado, entonces el resultado será una temporada como la recién finalizada. Y es que Bojan posiblemente sea el mayor perjudicado por el (lógico) cambio de rol de Messi, que ha conducido a que sea el epicentro de cualquier decisión en el Barcelona. Ahora, el joven delantero debe centrarse en la sub'21, intentrando abstraerse de todos los movimientos en torno a su futuro. Este torneo puede ser el primer paso en una nueva era para él. Después iremos conociendo los siguientes pasos, los que desvelarán el dilema de Bojan..

El doble éxito del Swansea, del 'kick&rush' a la Premier

Cuando el Swansea pagó 54.000 euros en 2007 para que Roberto Martínez se convirtiese en su entrenador-jugador (conservó la licencia de futbolista aunque se centró en el banquillo), el de Balaguer se propuso un doble objetivo: cambiar la filosofía de juego del equipo a corto plazo y ascender a la Premier desde la League One (tercera categoría del fútbol inglés) a medio plazo, es decir en 3-4 campañas.

En la primera temporada completa del técnico español, la 2007-08, el Swansea subió a la Championship (segunda categoría) y con Roberto se soñó casi hasta el final de la 2008-09 con enlazar dos ascensos, pero el equipo se quedó a las puertas (8º a 6 puntos de los puestos de playoff). Aunque la marcha del entrenador español –al que la hinchada pasó de héroe a Judas- parecía ser el fin de un proyecto, con Paulo Sousa el club galés finalizó 7º en la 2009-10 a sólo 1 punto del sueño. Y así llegó Brendan Rodgers a apenas tres semanas del inicio de la campaña 2010-11 en la que debutó con derrota; en contra de las apuestas que situaban al Swansea como candidato al descenso, los ‘Cisnes’ finalizaron terceros y superaron los playoff para ser parte de la Premier justo en la cuarta temporada desde que Roberto fijó el utópico sueño de escalar dos categorías en ese período. El objetivo a medio plazo estaba conseguido (y en el tiempo marcado).

Tal vez el otro reto, el del corto plazo, tiene igual mérito. Los primeros pasos del Swansea en el tránsito del tradicional kick&rush británico (patea y corre) al passing game (juego de toque) supusieron críticas y abucheos de la afición del Swansea a Roberto Martínez y sus jugadores. A la gente le costó aceptar el cambio de filosofía de juego. Sin embargo, cuatro años y tres entrenadores después, ahora presumen de ser el equipo de las Islas con más pases completados (526 de media, frente a los 428 del Arsenal, segundo en este ránking y al que iguala en el 61% de media en la posesión). Incluso, son conscientes de que precisamente el ascenso ha llegado por ser diferentes sobre el césped, por apostar por un doble pivote (Britton-Allen) de pequeñitos ‘tikitakeros’ a cuyo alrededor se construye este apodado ‘Swanselona’ debido a la similitud de estilo con el conjunto culé.

Atrás va quedando el apodo anterior, ‘Spanish Swansea’, porque de los cuatro que iniciaron esta temporada, Rangel y Serrán acaban contrato y podrían cambiar de aires, Gorka Pintado volverá de una cesión y Orlandi no disputó muchos minutos; en el recuerdo se quedaron ya Jordi Gómez –que acompañó a Roberto al Wigan- y Bauzá, así como varios miembros del cuerpo técnico del proyecto original de aquel 2007.

Pero volvamos al presente. Toca tomar decisiones para afrontar con garantías el desembarco del primer equipo galés en la Premier desde su creación como tal en 1992. Brendan Rodgers tiene claro que volverán a ser ‘underdog’ (caballo perdedor) en las apuestas por segunda temporada consecutiva, aunque en categorías diferentes, y que nadie dude que se mantendrá el estilo que les ha llevado hasta aquí, incluso en escenarios como Old Trafford o Stamford Bridge. Un estilo con dos influencias claras: Rodgers, castellano parlante porque vivió en nuestro país, es admirador del Barcelona y Guardiola, pero también elogia a Mourinho, con el que coincidió en el organigrama técnico del Chelsea.

El técnico ya ha dicho que sería un error mantener la misma plantilla que logró el ascenso el pasado lunes en Wembley, donde se vengó de su exequipo, el Reading. Habrá que ver qué hace la entidad con los alrededor de 90 millones de libras obtenidas por el éxito (su presupuesto debe rondar los 5, lo cual da una idea de la repercusión económica del ascenso). Lo más necesario para seguir creciendo sería la construcción de una ciudad deportiva, puesto que los jugadores se duchan en un gimnasio junto a ciudadanos de Swansea.

Asimismo, Rodgers debe buscar futbolistas que encajen en el estilo y que incrementen el nivel de la plantilla. Sinclair –el héroe de la final del playoff- seguirá siendo un ‘Cisne’ tras estar cedido por el Chelsea. Una gran noticia, como lo sería para el equipo la renovación de tres piezas clave que finalizan su vinculación: De Vries, Pratley y el lateral derecho Ángel Rangel. Novias no le faltaran al español, un jugador con nivel Premier y destinado a tener esa oportunidad, como piensa el propio Roberto Martínez. Quién sabe si algún día sus caminos vuelven a juntarse.