Iniciamos aquí una sección de tertulia (aunque hoy será a modo de entrevista) con entrenadores y expertos. Nuestro primer invitado es Adrián Cervera García (análisis de calidad en futbolitis), entrenador juvenil del UD Marbella y uno de los pocos entrenadores que hace de la Periodización táctica su metodología diaria. La primera entrevista se centra en la táctica y la semana que viene hablaremos sobre metodologías, el empleo del entrenamiento, etc.
D.Beltrán -Lo primero, distingamos sistema o táctica de trabajo táctico y modelo de juego.
A. Cervera- Bueno en el fútbol tenemos un problema con las definiciones, se utilizan mal y un mismo término se usa con diferentes definiciones, yo creo que tampoco es realmente importante, lo fundamental es tener claro el concepto en sí.
Normalmente definimos sistema, algunos lo llaman formación, al número de jugadores que disponemos por líneas, 442, 433, etc.
El modelo de juego es el conjunto de Principios de Juego que lleva a cabo ese equipo, su identidad, como ataca principalmente, como defiende, los movimientos específicos, etc.
Pero ya te digo el nombre que se le de tampoco es fundamental.
¿Se adaptan los jugadores al sistema o el sistema a los jugadores?
En mi caso particular me gusta adaptar el sistema dependiendo de los jugadores que dispongo, para poderles así sacar el máximo rendimiento. Pero no sólo para elegir el sistema (433, 442, etc.) sino para la elección del modelo de juego. Por ejemplo si tus delanteros son Munitis y Peragón no pretenderás hacer un juego directo buscando segunda jugada. Y si tienes a Zigic y Crouch no pretenderás hacer repliegue intensivo y salir a la contra, no sería muy inteligente. Un entrenador debe ser un gestor de recursos humanos analizar las virtudes y defectos de la plantilla y a partir de ahí sacar el máximo provecho.
Lo que si está claro es que cada entrenador tenemos nuestras ideas y nuestra filosofía y acabamos dejando nuestro sello identificativo en los equipos que dirigimos.
Inventado el 442, el 433, el 4231, etc. ¿Cómo se marca la diferencia con sistemas tácticos?
La diferencia no la marcan los sistemas o formaciones en sí, las diferencias las marcan los jugadores y los entrenadores sabiendo sacar el mayor rendimiento a sus jugadores creando un modelo de juego donde sus jugadores puedan exponer sus cualidades de la mejor manera posible y sepan esconder sus defectos. Donde realmente un entrenador marca la diferencia es en el modelo de juego, saber como atacar, como defender realizar buenas transiciones (que en el fútbol actual son determinantes) y tratar el juego como una globalidad, cuando tengo el balón también estoy defendiendo, tengo que prepararme para la pérdida, tener un buen equilibrio ofensivo, etc. y cuando defiendo igual estoy preparando el ataque, el juego no es indivisible. Después una buena utilización de los perfiles (en tu artículo sobre los mediocentros pones algunos ejemplos, como que no es lo mismo Essien de Mc posicional que de Recuperador) y la creación de sociedades es importantísimo.
¿Quien crees que es el mejor entrenador táctico en la actualidad?
Hay varios y muy buenos, preparando partidos específicos o puntuales Benitez y Juande (españoles por cierto), tienen la capacidad de encontrar esos detalles que son determinantes, por eso en competiciones por eliminatorias son tan buenos sus equipo. En preparación táctica a largo plazo me gustan los equipos de Mourinho, sabe adaptarse a la liga que disputa y sus equipos son dificilísimos de ganar, tiene la capacidad de tener controlados gran cantidad de variables tácticas. Sus equipos están trabajados hasta la extenuación, saben defender, atacar, transitan a velocidad de vértigo, ataque directo, posicional, etc. Después gente como Marcelino o Spalleti están empezando a exponer cosas interesantes.
¿Por qué Rafa Benítez no acaba de ser constante en torneos de regularidad? ¿Crees que es viable cambiar de sistema dependiendo del rival?
Para mí, el problema de Rafa Benitez, es que utiliza la preparación física como centro de su preparación, utiliza el Modelo de Periodización ATR, o sea da más importancia a unas épocas competitivas que a otras, normalmente a principios de temporada mete mucha carga física de trabajo para que el equipo en Febrero y Marzo esté a tope para la Champions y para la fase importante de la Premier, pero esa primera época de gran carga le hace perder muchos puntos que después es imposible recuperar debido a la gran calidad de sus otros tres rivales (ManU, Chelsea y Arsenal). Y aquí se produce para mí un error importante, si metes mucha carga física durante la semana tienes muchas papeletas de no rendir al máximo en la competición, pero por otra estar en un gran nivel físico no te asegura ganar el partido, porque el resultado y el rendimiento del equipo depende de muchos factores. Además los tres puntos valen igual en la jornada 1 que en la 27. En España le funcionó porque sus rivales esas dos temporadas perdieron muchísimos partidos, pero en Inglaterra eso no ocurre.
Cambiar de sistema cada partido dependiendo del rival es inviable, no habría automatismos, las enseñanzas tácticas de la semana anterior habría que resetearlas, es un sin sentido. Tu equipo tiene que personalidad propia, un modelo de juego, una identidad en cada una de las fases del juego, y después dependiendo del rival cuidar algunos detalles para contrarrestar sus puntos fuertes y atacar sus puntos débiles. De todas formas en mi opinión Rafa Benítez no cambia de sistema en cada partido. Su modelo de juego es el mismo, su sistema o formación también, salvo alguna variante. Lo que pasa es que al rotar tanto, las propias características de los jugadores puede hacer que el equipo pueda tener ciertas modificaciones, no es lo mismo que juegue Crouch a que juegue Kuyt. Pero de todas formas Rafa tiene muy bien automatizadas todas las variantes, es un número uno.
Hablemos de Juande Ramos, ¿Qué te parece su trabajo al frente del Tottenham?
Juande Ramos para mí está en esa terna de entrenadores de primer nivel mundial. Tiene una gran capacidad como líder/motivador de grupos, sabe sacar el máximo rendimiento a sus jugadores. Su trabajo al frente del Tottenham está siendo fabuloso. Tácticamente el equipo ha ganado varios enteros desde su llegada. Antes te hablaba de la utilización de los perfiles y ahí Juande es un maestro. Te pongo un ejemplo con el Sevilla que es un equipo que todos conocemos mejor: El perfil de Poulsen, a simple vista vemos un buen mediocentro defensivo, pero que no es determinante, no es un crack, pues él a partir de ese perfil y el de otros compañeros como Alves y Navas formó una sociedad que dio al equipo aparte de un gran potencial ofensivo, un gran equilibrio para la transición. Me explico Poulsen la temporada pasada jugaba de Mc posicional por el costado derecho con Maresca o Renato por el izquierdo, apenas participaba en la elaboración, su función era compensar posicionalmente las subidas constantes de Dani Alves, incluso cuando el equipo atacaba por banda izquierda veíamos a Alves proyectándose en ataque, gracias a Poulsen y la diagonal compensatoria de Drago. El equipo estaba equilibrado, porque Poulsen posicionalmente es un 10 y se sacaba un 120% de rendimiento a Dani Alves y Navas ya que la superioridad numérica en banda era constante, se producían muchos centros por partido y Kanouté vivía como un rey. Eso este año no lo vemos porque ha cambiado el perfil de Poulsen, que en vez de Mc posicional tiene un perfil más recuperador, juega unos metros más adelante y arrastra a todos los demás, ni Alves, ni Navas están rindiendo igual.
Ahora en Londres está aprovechando a la perfección en perfil llegador de Jenas, Zokora es su escudero, y Malbranque compensa con una diagonal interior para ayudar a Zokora cuando Jenas llega en ataque, ya que Lennon está pegado a la línea de cal.
Otro ejemplo de sacar máximo rendimiento a un perfil lo tenemos con Berbatov y Keane. Cualquier entrenador medio quizás pondría a Berbatov (corpulento y bueno en juego aéreo) como delantero centro y Keane (rápido y con movilidad) de 2º punta. Pero el ve un poco más allá, Berbatov hace de variante defensiva en la presión (formando un 14411), cuando el equipo roba, él que es más corpulento y juega bien de espaldas viene a recibir en apoyo y Keane que es rápido, es primera opción en profundidad con desmarque de ruptura teniendo así una opción tanto en largo como en corto. Si cambiáramos los perfiles sería muy difícil realizar contraataques rápidos a la espalda de la defensa y perderíamos velocidad en la transición defensa ataque.
Y de Mourinho, ambos somos buenos admiradores de su trabajo, ¿Qué destacarías del portugués ?
Mourinho es una de mis mayores referencias. Es para mí el entrenador más completo actualmente. Su metodología de entrenamiento es fascinante, sus entrenamientos tienen una especificidad brutal, la ya famosa Periodización Táctica. El hecho táctico es el elemento principal en sus sesiones, apareciendo el resto de capacidades (física, técnica y psicológica) por “arrastramiento” de ese hecho táctico. Como lider motivacional es el número 1, tiene una ascendencia casi paternal sobre sus jugadores, que en su mayoría lo adoran, y es capaz de conseguir un sentimiento de equipo fantástico, en un mundo donde el individualismo y el divismo es tónica habitual en futbolistas de primer nivel. Tácticamente sus equipos están muy bien trabajados, dejando muy pocos detalles al azar y prepara muy bien los partidos. Cuenta además con un equipo de trabajo magnífico, Rui Farias, André Vilas, etc. No me extiendo mucho más para que tu puedas complementar y no reincidamos en lo mismo.
¿Qué es defender bien?
No me gusta diferir entre defender o atacar bien, para mí un equipo no defiende o ataca bien, simplemente juega bien o juega mal. No se puede disociar los momentos del juego, como te comentaba antes mientras atacas debes estar preparando la fase defensiva, ciertos jugadores deben de estar ya preparados para actuar cuando se pierda la pelota, ya sea para presionar, ya sea para ocupar posiciones determinantes, o para temporizar y replegar. Lo ideal es defender (entendiendo como defender el momento en que no tienes la pelota) el mínimo tiempo posible y si puede ser, lejos de tu portería.
Lo que si tengo claro que defender bien no está relacionado con el número de goles que encaja un equipo. Hay equipos que encajan pocos goles, pero no defienden bien, sino que acumulan muchos jugadores detrás del balón cerca de su portería y así complican a cualquier rival, pero, y cuando roban que pasa, están a 70m. de la portería, y ahora a ver como atacas. El equipo debe ser una globalidad y la forma de defender debe estar en consonancia a tu forma de atacar o de contraatacar, al menos.
Se empiezan a ver entrenadores que saben trabajar a los equipos a nivel táctico-defensivo sin embargo, pocos trabajan el juego elaborado, el ataque estático. ¿Es un mundo aun por descubrir?
Destruir ha sido siempre más fácil que crear, pero no sólo en el fútbol, sino en todos los ámbitos de la vida. Defender se puede conseguir con buenas referencias zonales, equilibrando bien las líneas con un buen sentimiento colectivo, pero crear juego, ya es otra cosa, hay jugadores que para dar un pase a un compañero a 5m. la tienen que mandar por Seur.
Bromas, a parte. Siempre ha existido la creencia de que en ataque el jugador es el que tiene que tomar responsabilidades el que decide mientras que el jugador en defensa obedece y destruye.
Yo ahí no estoy de acuerdo, el jugador tiene que tomar decisiones tanto en fase defensiva como ofensiva, la inteligencia táctica es vital en ambas fases. El ataque elaborado tiene que estar bien estructurado, hay que marcar unos patrones a seguir, unas pautas de actuación para favorecer en el jugador la toma de decisiones.
Yo creo que muchos entrenadores enmascaran sus deficiencias, y ponen como escusa que no tienen jugadores para hacer un buen ataque elaborado, cuando en realidad son ellos los que no son capaces de preparan bien a sus equipos para que lo hagan.
Destaca alguna de las lagunas de Rikjaard y Schuster a nivel táctico en Barça y Madrid respectivamente.
Yo encuentro a ambos el mismo defecto, son exfutbolistas, saben lo que quiere el jugador profesional, y saben como quiere que actúen sus equipos, pero no dominan los detalles, no son estudiosos del juego, para que se me entienda mejor, no ganan partidos a través de sus decisiones tácticas y al trabajo durante la semana. Además metodológicamente en mi opinión dejan mucho que desear.
Te pongo un ejemplo de los detalles con los partidos de esta semana.
El Madrid no le saca rendimiento a Diarra, es uno de los mejores en su función, pero no se le aprovecha. El es Mc posicional en centro del campo de 3 hombres (con Guti y Sneijder de interiores), pues en fase defensiva en los últimos 25/30m. debería tener dos funciones principales, que por sus características haría a la perfección. 1: Bascular a banda para hacer 2x1 con el lateral, para que el central se pueda mantener en el área para marcar, o 2: Si por circunstancias no llega a la cobertura del lateral, el central es el que sale y Diarra se debe meter en línea defensiva haciendo función de central. Pues no hace ni una ni otra, simplemente se queda al borde del área en zona de rechace.
Que pasaba en Riazor que cuando Filipe desbordaba a Torres, una y otra vez, existía una autopista hasta el área, ya que Pepe estaba marcando en el centro y Diarra en el borde del área. Y en una de esas vino el gol.
En Almería al Barcelona le faltaron esos detalles para llevarse el partido. Todos sabemos, que es público y notorio que el potencial del Almería a balón parado es infinito. Si se estudian un poco los córners a favor, en muchos de ellos existen bloqueos para que hombres importantes lleguen al remate. Eso Rikjaard lo debería de haber previsto, y haber colocado a más hombres en zona en el área, en lugares determinantes. Y alguna marca fija para hombres más peligrosos. Además los bloqueos están prohibidos tenía que haber dado orden a sus defensas al ser bloqueados de ir al suelo o levantar los brazos en el momento de recibir la obstrucción.
¿Por qué la Liga carece de intensidad en comparación con la Premier?
El tipo de juego es diferente, allí las transiciones se hacen más rápido, se elabora menos el juego (quitando algunas excepciones), y los equipos son más directos. A parte los árbitros paran mucho menos el juego y no se utiliza apenas la falta táctica. Aquí los equipos son más lentos en las transiciones, y algunos equipos como los de Caparrós tienen como principal arma defensiva la falta y no dejar jugar al contrario.
Técnicos revelaciones; Emery, Marcelino...
Bueno la ascensión de Emery ha sido espectacular.
A partir de un 1433 (tanto en el Lorca como en el Almería), con extremos muy rápidos (Crusat, Maldonado, De Carlos, Ortíz, Alexandre, etc.) y un delantero referencia (Sava, Míchel y ahora Negredo) y muchos jugadores llegando de segunda línea (Ramos, Jorge Sánchez, en el Lorca, Soriano, Corona y Melo en el Almería), ha creado un modelo de juego muy bien definido. Con transiciones muy rápidas, sobre todo defensa ataque, una buena presión creando superioridad numérica por el centro con un pivote defensivo que hacía de corrector cuando un interior iba a la presión (Xavi Moro en el Lorca y Cabrera y ahora Juanito en el Almería). Intentando hacer un buen juego elaborado pero alternando bien con juego directo al punta referencia para salir de la presión. Todo esto acompañado por una magistral preparación de las jugadas de estrategia, han hecho que con 36 años, haya pasado en 4 temporadas de Segunda B a puestos altos de Primera División.
Marcelino, siempre ha utilizado el 1-442 desde sus comienzos en el Sporting, dos líneas de 4 muy juntas, (no tan presionantes como los equipos de Emery) utilizando la basculación zonal creando superioridades numéricas en zona activa del balón. Los puntas por delante son los que orientan el ataque del rival a zonas donde el entrenador quiere robar para aprovechar a la contra.
Ese es el punto fuerte de los equipos de Marcelino, vemos partido a partido contraataques de libro, como aquella exhibición en el Bernabeu. Encima este año en el Racing ha mejorado defensivamente respectivo al Recre donde encajaba demasiados goles. Sus equipos le dan muy buen trato al balón y es un entrenador que prepara muy bien los partidos. En su haber, los pocos goles a balón parado de Garay o Cesar Navas, creo que necesita un buen lanzador, quizás con un Corona como tiene el Almería sacaría más partido.
¿Crees en la figura del Manager deportivo? No es un estorbo para un entrenador? Al fin y al cabo a nosotros, los entrenadores, nos gusta diseñar nuestras plantillas a imagen y semejanza propia...
Todo depende del modelo de dirección que tenga cada club, para mí como entrenador, lo ideal es tener poder decisión en las altas y bajas. Tu marcas el perfil del jugador que quieres, e incluso das algunos nombres por que al fin y al cabo tu eres el que marcas el modelo de juego y vas a ser el que quitas y pongas los jugadores.
Un club debe tener su Secretaría Técnica que tengan controlado el mercado, pero el que marca las pautas es el Entrenador/Director Técnico. Lo que pasa es que como hay poca confianza en los entrenadores y si pierdes los partidos vas a la calle los clubes no quieren hipotecarse, porque si lo echan y viene otro que va en un camino diferente, tienen que hacer un equipo nuevo.
Si los clubes tuvieran más paciencia, y cuando fueran a fichar a un entrenador, supieran su metodología de trabajo, sus conocimientos, su forma de preparar la competición y de motivar al grupo y no sólo ver los resultados que han obtenido no pasaría esto.
El problema es que el que toma las decisiones normalmente en los clubes no tienen ni idea de fútbol.
Hasta aquí la primera parte de la entrevista con el entrenador del UD Marbella juvenil. Un placer y hasta otra.
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sábado, 22 de marzo de 2008
miércoles, 6 de febrero de 2008
Sevilla - Barça por el Doctor Beltrán
El Doctor Beltrán es entrenador del Sevilla por un día para analizar el partido de los andaluces (nota de los autores). Espero que disfruteis de un análisis profesional de forma sintetizada y con los menores tecnicismos posibles.
-Este análisis no tiene que ver con lo que creo que hará M. Jiménez el sabado sino con lo que yo haría en su lugar. Todo análisis hecho de esta forma tiene puntos muy subjetivos y difíciles de medir ya que al fin y al cabo el que está en el día a día del Sevilla es el entrenador y no yo. Sin entrar en técnicismos que aburran al espectador de a pie, abría que hacer un análisis del rival en el que, como hace Mou, se viesen los últimos diez partidos del Barcelona para ver cuales de sus acciones nacen de la inspiración de los jugadores y cuales son el resultado del trabajo diario.
A los jugadores se les enseñaría los vídeos, primero del peor Barça de esos últimos partidos y sus acciones en algunos casos de jugadores infantiles, fallos estúpidos, etc. para que el equipo viese que son humanos de carne y hueso a los que se les puede batir y acabaría la semana con visualización de la segunda parte del Villareal - Barça por ejemplo, para poner sobre alerta a los jugadores.
Como factores motivantes es una buena jornada para 'publicar' en el vestuario todo lo que se ha dicho de la crisis de resultados y juego del Sevilla para encender a sus jugadores y buscar una reacción en el orgullo y el amor propio. Y por supuesto, imprescindible el 3-0 en la final de la supercopa de europa hace ya dos años.
Centrándonos primero en el análisis del rival concluiremos con que el Barça juega con un 4-3-3 con Valdés en la portería, Zambrotta y Abidal de laterales y Thuram y Milito en el centro de la defensa. Por delante, Márquez y de interiores Deco (o Xavi) e Iniesta. En punta de ataque y rotando bastante las posiciones; Messi - Bojan - Henry.
La defensa del Barça
A pesar de ser la menos goleada de la Liga, tiene serias lagunas defensivas. La transición ataque-defensa es muy lenta, casi inexistente, los laterales suelen estar por delante de la línea de balón cuando el conductor de la jugada del equipo rival lleva el balón. El escalonamiento es exageradamente excesivo con una gran distancia entre líneas y el espacio ocupado de manera nada racional. Las jugadas se salvan por las coberturas de Puyol, que no estará por lesión o la anticipación al corte de Milito. Eso y la fuerza de la naturaleza venida a menos de Abidal. Un equipo con presupuesto se puede permitir no tener sistema defensivo y no encajar goles por las individualidades.
Pero sería incalculable el valor del Barça con un equipo con funciones determinadas mucho más concretas.
La clave está en la conexión Zambrotta-Thuram por la baja de Puyol. La solución para Rikjaard es o alinear a Oleguer en la derecha o apostar por Márquez en el centro de la defensa y Edmilson de pivote. Si no, el Barça cuenta con un lateral desconcentrado en defensa, que juega en la línea del balón (y ésta la suele marcar los interiores), que le cuesta replegar y cuyas condiciones físicas no suplen sus carencias (caso de Alves o R. Carlos). Y junto a él, un jugador en sus últimos días cuyo fútbol viene del Calcio y de la selección africana de Francia. Línea atrasada y cerca de Valdés. Por lo tanto, Zambrotta no tiene coberturas en su lado. Si es rebasado, el jugador que tenga la posesión tendrá tiempo para conducir, mirar y volver a encarar. El Barça no tendrá situaciones de 2x1 en banda en defensa porque los extremos no ayudan y Thuram no achica.
Si el Sevilla tuviese un jugador de las características de Guti o Iniesta, sería indispensable en el once para dar balones a la espalda del lateral derecho a un jugador rápido. Yo, para la posición de jugador rápido, versátil y de banda apuesto por Capel y Jesús Navas. Al estilo Ferguson. Intercambiando la posición para liar del todo a Thuram al que cuando repasen a Zambrotta dudará entre hacer la cobertura o aguantar la diagonal. Además, ambos extremos ayudan en defensa y tienen recorrido.
La jugada natural de ataque del Sevilla debe ser; robo de balón, pase al espacio a Navas o Capel. Si es al zurdo, necesitas delanteros y un llegador al remate (Renato) y si es Navas el jugador en cuestión, una vez supere a Zambrotta, los dos centrales tienen un 2x2 contra los delanteros. Movimiento de L. Fabiano a banda. Si Thuram le sigue, Navas tiene todo el carril del centro, si Thuram opta por quedarse en su posición, balón al espacio al delantero más en forma del momento.
Sin ser partidario de los extremos a banda cambiada, hoy no carece de lógica ya que enfrentar a Navas con un portento como Abidal no es recomendable, mientras Capel tan explosivo como Jesús marcará la diagonal hacia dentro, atacando la pierna derecha de Abidal, la floja.
En un equipo como el Barça hacer diagonales es complicadísimo por la gran acumulación de jugadores del equipo contrario que juega con más de cinco jugadores en la zona de balón. El lateral tapa la salida a banda, el extremo ayuda, el central cierra la diagonal y el mediocentro de ese lado intercede en la salida central. Contra el Barça ocurre todo lo contrario. Sobre todo si se rebasa la línea de interiores o si el interior es Xavi. Mucho espacio, central frágil (caso de Thuram) y un solo mediocentro a las ayudas, más bien estático. El Barça necesita de urgencia un Makelelé (John Obi Mikel), un mediocentro posicional pero que no sea estático, que vaya a ambos lados y cree superioridad en defensa y ese no es Toure, un jugador para reforzar la zona de interiores que suele perderse jugando de mediocentro defensivo a pesar de estar cumpliendo, aunque se le ve algo cohibido.
Sin duda, entre las vertientes independientes del juego del Barça en defensa está el no renunciar a la posesión de balón, los desplazamientos en largo de Márquez (el 80% de las veces al carril izquierdo) y el escalonamiento de los laterales en la línea de balón o de interiores (sea cual sea el lateral, incluido Puyol). Por lo tanto, descartamos la presión arriba 2x2 de los delanteros ya que los jugadores del Barça cuentan con los apoyos de Márquez, Iniesta, Deco y los laterales. Y en caso de presión, Victor Valdes, un portero técnicamente decente.
La salida de balón suele darse por el lado derecho, carril de Zambrotta donde se encuentra Iniesta y Messi, los jugadores más buscados. Por lo tanto, el mediocentro izquierdo elegido por nuestra parte será Keita que goza de más potencia que Renato.
Su ataque
El Barça tiene dos formas de salir. Raso hasta que llega a Iniesta o Deco y estos dan el pase vertical o desplazamiento en largo de Márquez al extremo izquierdo, en este caso Henry. Por lo tanto, el Barça es ofensivamente un 4+1. Dos mediocentros, dos extremos y un punta. Los extremos siempre reciben pasado tres cuartos de campo con excepciones en el caso de Messi que salvo días históricos (día de Getafe) carecen de importancia o peligro. Así pues, nos plantaremos con una línea de 4+4+1, juntos y ocupando el espacio racionalmente.
Cuando el balón se saca jugado por el conjunto culé, L.Fabiano tapa la salida con el central del lado correspondiente y es el mediapunta el que cierra la línea de pase con el interior. Si el balón lo lleva Zambrotta, L. Fabiano cierra la salida con Thuram marcando al hombre y Kanoute cierra línea de pase con Iniesta marcando por delante del mismo (y no por detrás ya que renuncias a toda opción de contragolpe y lo desgastas demasiado). El equipo bascula y es el extremo el que cierra a Messi con Keita a la ayuda y Renato cerrando por detrás. Cerca de él, el otro extremo. Y la defensa a menos de 5 o 6 metros de la línea de medios para hacer coberturas rápidas y sin riesgo a ser superados a base de pelotazos porque a) el Barça no plantea su juego de tal manera y b) porque juega Bojan y Messi arriba. Eso hace que podamos adelantar algo la línea.
Con esa presión, lo fácil para Zambrotta será o seguir, que será su perdición ya que es meterse en el embudo y hacer del partido algo físico (Drago, Keita, Renato contra Iniesta, Messi, Zambrotta) o darle el balón a Márquez. Una vez los jugadores leen el pase, L. Fabiano (que está en la marca con Thuram) y Kanoute (que tapa línea de pase a Iniesta) presionan al mediocentro defensivo del Barça; el mejicano.
Si el balón llega a Iniesta o Deco, la defensa adelanta líneas para reducir las dimensiones de la zona de posesión ya que es más facil perder un balón en un espacio de 10 m. que en uno de 50. Uno de los mediocentros (Keita, normalmente) presiona fuerte la marca haciendo el pressing zonal y el otro se olvida del otro interior y ayuda cerrando por detrás obligando a Capel y Navas a cerrarse con ellos y crear una situación de superioridad en mediocampo. Kanoute marca por detrás del jugador a Márquez. Escondiendose para que si los interiores se sienten presionados le den el balón al mejicano y en caso de robar, con el equipo muy junto, los extremos (Navas, Capel) vuelan hacia banda e incluso el lateral (Alves, si le quitan la sanción) en caso de estar jugando en una zona muy cerrada. Esa es la segunda forma de ataque para el Sevilla en este partido. Líneas muy juntas, Kanoute haciendo de delantero pivot y las bandas haciendo diagonales (en transición defensa ataque, hacia fuera, en transición ataque defensa, hacia dentro).
Por lo tanto, estamos defendiendo para atacar y además no basculamos sino presionamos (pressing zonal).
Si la salida es con los extremos (Messi o Henry) el equipo está obligado a marcar en zona
debido a los intercambios de posición en ataque del Barça e incluso en el once. Los jugadores, como resultado del análisis técnico tienen que tener cosas claras sobre los jugadores con posibilidades de estar en el once. Si juega Giovanni en la derecha, diagonal siempre hacia dentro, si juega Messi, prácticamente lo mismo, pero con más variedad. Si juega Ronaldinho en la izquierda, vigilar las marcas y las diagonales del extremo contrario y del punta (sobre todo si son Bojan o Henry que la piden al espacio). Saber la pierna buena de cada una, donde reciben, como suelen actuar, que desmarques hacen, si al espacio o al pie y con quien conectan más veces (caso de Messi Ronaldinho).
Pero eso es información que deben procesar nuestros jugadores de forma individual. Como equipo, somos uno. En zona y con ayudas y evitando el 1x1.
Si recibe el extremo el equipo se coloca yendo el lateral a la marca, seguido por el central a la cobertura por si se va en diagonal salir al corte o por si va hacia banda presionar al jugador y que el lateral mediante el sistema rotativo coja su sitio. El mediocentro de ese lado bascula y cierra la salida por dentro e incluso el extremo ayuda en la presión. El otro central y el lateral de banda contrario y el interior cierran zona de remate con el mediocentro restante tapando zona de rechace. Kanoute entre líneas y L. Fabiano entre un lateral y un central. Al despejar, como el equipo está muy replegado, primera opción balón a Kanoute y este abre al punta brasileño a banda dando tiempo al equipo a ocupar zona de remate y como segunda opción en caso de ser muy clara o no tener otra salida, desplazamiento largo a L.Fabiano para jugada individual siendo ésta una jugada muy aislada. En ese caso, el punta tiene que pegarse a Thuram. Si Rikjaard da orden a Milito de marcarlo se crea un espacio que aprovecha el jugador entre líneas (Kanoute) o incluso el lateral (Alves) abre banda y el extremo hace una diagonal hacia dentro.
En todos los casos, el equipo sigue defendiendo para atacar.
Como defensas, Drago y Alves jugarían de laterales con Poulsen de central a las coberturas. Poulsen, habitualmente mediocentro es rápido, va bien a las coberturas, lo cual es idóneo para el 2x1 contra sus extremos, tiene buen desplazamiento y salida de balón. El otro central es la gran duda. Al jugar con las líneas adelantadas, Bou o Escudé serías más idóneos que Mosquera, pero éste puede intimidar a Bojan, hacer de central marcador, con el danés a las coberturas y se gana en estrategia tanto defensiva como ofensiva. Sobre todo en esta última. Porque, con ese once del Barça, ¿quien marca a Mosquera, Kanoute, Fabiano, Keita, Renato o Poulsen?
La estrategia, nuestra victoria
Siguiendo el análisis visual de los movimientos mecanizados del Barça es fácil deducir sus jugadas en los corners a favor. O saque en corto al jugador que ni siquiera esconde que viene a recibir o balón al primer palo donde va Márquez que intenta prolongar para Milito o Henry en la zona de área chica para crear confusión. Por lo tanto, es evidente que debemos marcar en zona para no caer en los arrastres de Márquez y prestar real atención a Milito y Henry.
La otra opción es un marcaje mixto en el que tus jugadores de mayor envergadura marcan la zona haciendo eso territorio propio y se marca al hombre a los tres jugadores selectos en la estrategia rival: Márquez-Milito-Henry dejando a tres hombres en zona de ataque para o crear dudas o iniciar contragolpe ya que es poco problable que el Barça marque gol a balón parado. Navas, Fabiano y Capel arriba contra Thuram, Iniesta y Abidal. Letal.
Si Ronaldinho está en el campo es orden clara no hacer faltas en la frontal. No se puede perder un partido contra un equipo grande por cometer estupideces o fallos de concentración. El Barça tiene el mejor jugador del mundo... a balón parado. En las laterales, el encargado es Xavi y es más importante vigilar la zona de rechace que los jugadores hacia los que va el balón. Dado que el Barça no tiene estudiada esas jugadas y no utiliza la peinada como recurso se podría usar la jugada del fuera de juego a la señal de 'va'. Cuando Xavi se dispone a sacar la falta y los jugadores del Barça buscan posición de remate, los jugadores sevillanos salen como una bala a la señal de un jugador de jerarquía como Poulsen o del propio entrenador en una jugada puntual. Fuera de juego y balón para nosotros.
En ataque, corners sacados por Capel (lado derecho) y Navas o Alves (lado izquierdo), un jugador que gane el balón por alto peina a la zona de influencia en el corner donde mezclamos a todos nuestros jugadores altos contra su equipo de bajitos.
En faltas laterales lejanas, el Barça no tiene un jugador a la estrategia y pone una barrera de dos. Caida a banda de un jugador habilidoso (Capel por la izquierda, Navas por la derecha), pase al espacio del que saca la falta y centro de uno de estos jugadores a los Mosquera, Keita, Kanoute.
¿Y Qué hacer con balón?
Visto el análisis del partido hay que intentar concretar donde pensamos robar más balones y entonces, durante la semana trabajar esas acciones con libertad de decisión por parte del jugador que lleva el balón, aunque no tanto en los jugadores que se desmarcan. Como hacemos un pressing zonal, tratamos de robar balones a Márquez en zona de mediocampo, así como ahogar a los interiores. Cuando reciben sus extremos, robaremos más balones cerca del centro que de la banda. Y en estático, los desplazamientos en largo tenemos que emparejar a Kanoute con Milito dejando a L.Fabiano por detrás con Thuram. Balón a Kanoute, peinada, movimiento de arrastre de Fabiano, carrera en velocidad contra el defensa francés y mano a mano contra Valdés. Cech entrenaba los pelotazos a Drogba, lo mismo tiene que hacer Palop con Kanoute.
Incluso, en balón parado desde atrás se puede incluir una variante. Poulsen hace el desplazamiento en largo, Keita se empareja con Milito ocupando Kanoute su posición momentaneamente, peinada y Luis Fabiano contra Thuram.
Si está Alves, dado que la posesión la tienen ellos, su figura en ataque es clave. El Barça será el que lleva la iniciativa, permitiéndonos hacer un embudo en defensa con los extremos jugando de interiores. Robo de balón, salida a cien por hora de Alves y Navas queda estático en su sitio recuperando el esfuerzo defensivo y manteniendo el esquema defensivo del equipo.
Con balón en zona de defensas, tranquilidad, posesión larga, recuperación activa de los esfuerzos e incitación al Barça, que duda entre la presión arriba y la defensa estática de basculación, a adelantar líneas. Si eso ocurre, o Thuram alarga mucho el campo y tenemos espacio para jugar la pelota o nuestros dos puntas se emparejan con los dos defensas. En ese caso o peinada y arrastre o Alves abre campo y diagonal de los bandas.
En el centro del campo, circulación rápida de balón para mover al mediocentro estático-posicional y una vez se llega a banda que éste no siga a nuestro mediocentro llegador (Renato)
Como plantear el ciclo semanal
El equipo libra después del último partido, se reincorpora el Martes con un entrenamiento de variables independientes (cuestiones del modelo de juego que se mantienen sea el rival que sea) y ejercicios genéricos no específicos de máxima intensidad. Ese mismo día se expone en el cuerpo técnico el análisis del partido y se plantean las situaciones que se van a trabajar durante la semana (Miércoles-Jueves-Viernes-Sábado por la mañana). Una vez planteadas (8x4+1 en defensa, ataque estático, pressing zonal con 2+2, colocación en estrategia, coberturas en defensa, transiciones) llamamos a esas situaciones principios generales del juego para ese partido. Y entonces, buscamos sub-principios. Ejercicios en los cuales trabajemos de forma distinta lo mismo. Ejercicios cuyo fin sea trabajar los llamados principios generales del juego pero que requieran de mayor intensidad y de distintas condiciones para ejercitar también el trabajo mental de los jugadores. Y entonces durante la semana empezamos trabajando de los sub-sub-sub principios hasta el principio general del juego determinado. Éste, en situación real se trabaja una vez has hecho todos los subprincipios, siendo un día cercano al partido y sabiendo que es un ejercicio primero estático ya que requiere de explicación.
Las sesiones de vídeo van de menos a más en cuanto a cantidad y eso es inversamente proporcional a la calidad del rival que quieras enseñar. De manera genérica se empieza visualizando los partidos malos del Barça para luego acabar con los mejores reactivando al equipo. A partir del Miercoles o si los subprincipios primeros son muy genéricos, en Jueves se hace una presentación corta analizando las variables independientes del equipo rival; salida de balón, transiciones, estrategia, etc.
El Sábado, en el entrenamiento de la mañana se trabajan las variables independientes del modelo de juego a un 10% añadiéndole sesiones muy cortas pero intensas de ejercicios que requieran concentración y realización de una acción mediante nuestra manera de bascular o presionar. Durando estos ejercicios entre 6 y 10 minutos.
-Este análisis no tiene que ver con lo que creo que hará M. Jiménez el sabado sino con lo que yo haría en su lugar. Todo análisis hecho de esta forma tiene puntos muy subjetivos y difíciles de medir ya que al fin y al cabo el que está en el día a día del Sevilla es el entrenador y no yo. Sin entrar en técnicismos que aburran al espectador de a pie, abría que hacer un análisis del rival en el que, como hace Mou, se viesen los últimos diez partidos del Barcelona para ver cuales de sus acciones nacen de la inspiración de los jugadores y cuales son el resultado del trabajo diario.
A los jugadores se les enseñaría los vídeos, primero del peor Barça de esos últimos partidos y sus acciones en algunos casos de jugadores infantiles, fallos estúpidos, etc. para que el equipo viese que son humanos de carne y hueso a los que se les puede batir y acabaría la semana con visualización de la segunda parte del Villareal - Barça por ejemplo, para poner sobre alerta a los jugadores.
Como factores motivantes es una buena jornada para 'publicar' en el vestuario todo lo que se ha dicho de la crisis de resultados y juego del Sevilla para encender a sus jugadores y buscar una reacción en el orgullo y el amor propio. Y por supuesto, imprescindible el 3-0 en la final de la supercopa de europa hace ya dos años.
Centrándonos primero en el análisis del rival concluiremos con que el Barça juega con un 4-3-3 con Valdés en la portería, Zambrotta y Abidal de laterales y Thuram y Milito en el centro de la defensa. Por delante, Márquez y de interiores Deco (o Xavi) e Iniesta. En punta de ataque y rotando bastante las posiciones; Messi - Bojan - Henry.
La defensa del Barça
A pesar de ser la menos goleada de la Liga, tiene serias lagunas defensivas. La transición ataque-defensa es muy lenta, casi inexistente, los laterales suelen estar por delante de la línea de balón cuando el conductor de la jugada del equipo rival lleva el balón. El escalonamiento es exageradamente excesivo con una gran distancia entre líneas y el espacio ocupado de manera nada racional. Las jugadas se salvan por las coberturas de Puyol, que no estará por lesión o la anticipación al corte de Milito. Eso y la fuerza de la naturaleza venida a menos de Abidal. Un equipo con presupuesto se puede permitir no tener sistema defensivo y no encajar goles por las individualidades.
Pero sería incalculable el valor del Barça con un equipo con funciones determinadas mucho más concretas.
La clave está en la conexión Zambrotta-Thuram por la baja de Puyol. La solución para Rikjaard es o alinear a Oleguer en la derecha o apostar por Márquez en el centro de la defensa y Edmilson de pivote. Si no, el Barça cuenta con un lateral desconcentrado en defensa, que juega en la línea del balón (y ésta la suele marcar los interiores), que le cuesta replegar y cuyas condiciones físicas no suplen sus carencias (caso de Alves o R. Carlos). Y junto a él, un jugador en sus últimos días cuyo fútbol viene del Calcio y de la selección africana de Francia. Línea atrasada y cerca de Valdés. Por lo tanto, Zambrotta no tiene coberturas en su lado. Si es rebasado, el jugador que tenga la posesión tendrá tiempo para conducir, mirar y volver a encarar. El Barça no tendrá situaciones de 2x1 en banda en defensa porque los extremos no ayudan y Thuram no achica.
Si el Sevilla tuviese un jugador de las características de Guti o Iniesta, sería indispensable en el once para dar balones a la espalda del lateral derecho a un jugador rápido. Yo, para la posición de jugador rápido, versátil y de banda apuesto por Capel y Jesús Navas. Al estilo Ferguson. Intercambiando la posición para liar del todo a Thuram al que cuando repasen a Zambrotta dudará entre hacer la cobertura o aguantar la diagonal. Además, ambos extremos ayudan en defensa y tienen recorrido.
La jugada natural de ataque del Sevilla debe ser; robo de balón, pase al espacio a Navas o Capel. Si es al zurdo, necesitas delanteros y un llegador al remate (Renato) y si es Navas el jugador en cuestión, una vez supere a Zambrotta, los dos centrales tienen un 2x2 contra los delanteros. Movimiento de L. Fabiano a banda. Si Thuram le sigue, Navas tiene todo el carril del centro, si Thuram opta por quedarse en su posición, balón al espacio al delantero más en forma del momento.
Sin ser partidario de los extremos a banda cambiada, hoy no carece de lógica ya que enfrentar a Navas con un portento como Abidal no es recomendable, mientras Capel tan explosivo como Jesús marcará la diagonal hacia dentro, atacando la pierna derecha de Abidal, la floja.
En un equipo como el Barça hacer diagonales es complicadísimo por la gran acumulación de jugadores del equipo contrario que juega con más de cinco jugadores en la zona de balón. El lateral tapa la salida a banda, el extremo ayuda, el central cierra la diagonal y el mediocentro de ese lado intercede en la salida central. Contra el Barça ocurre todo lo contrario. Sobre todo si se rebasa la línea de interiores o si el interior es Xavi. Mucho espacio, central frágil (caso de Thuram) y un solo mediocentro a las ayudas, más bien estático. El Barça necesita de urgencia un Makelelé (John Obi Mikel), un mediocentro posicional pero que no sea estático, que vaya a ambos lados y cree superioridad en defensa y ese no es Toure, un jugador para reforzar la zona de interiores que suele perderse jugando de mediocentro defensivo a pesar de estar cumpliendo, aunque se le ve algo cohibido.
Sin duda, entre las vertientes independientes del juego del Barça en defensa está el no renunciar a la posesión de balón, los desplazamientos en largo de Márquez (el 80% de las veces al carril izquierdo) y el escalonamiento de los laterales en la línea de balón o de interiores (sea cual sea el lateral, incluido Puyol). Por lo tanto, descartamos la presión arriba 2x2 de los delanteros ya que los jugadores del Barça cuentan con los apoyos de Márquez, Iniesta, Deco y los laterales. Y en caso de presión, Victor Valdes, un portero técnicamente decente.
La salida de balón suele darse por el lado derecho, carril de Zambrotta donde se encuentra Iniesta y Messi, los jugadores más buscados. Por lo tanto, el mediocentro izquierdo elegido por nuestra parte será Keita que goza de más potencia que Renato.
Su ataque
El Barça tiene dos formas de salir. Raso hasta que llega a Iniesta o Deco y estos dan el pase vertical o desplazamiento en largo de Márquez al extremo izquierdo, en este caso Henry. Por lo tanto, el Barça es ofensivamente un 4+1. Dos mediocentros, dos extremos y un punta. Los extremos siempre reciben pasado tres cuartos de campo con excepciones en el caso de Messi que salvo días históricos (día de Getafe) carecen de importancia o peligro. Así pues, nos plantaremos con una línea de 4+4+1, juntos y ocupando el espacio racionalmente.
Cuando el balón se saca jugado por el conjunto culé, L.Fabiano tapa la salida con el central del lado correspondiente y es el mediapunta el que cierra la línea de pase con el interior. Si el balón lo lleva Zambrotta, L. Fabiano cierra la salida con Thuram marcando al hombre y Kanoute cierra línea de pase con Iniesta marcando por delante del mismo (y no por detrás ya que renuncias a toda opción de contragolpe y lo desgastas demasiado). El equipo bascula y es el extremo el que cierra a Messi con Keita a la ayuda y Renato cerrando por detrás. Cerca de él, el otro extremo. Y la defensa a menos de 5 o 6 metros de la línea de medios para hacer coberturas rápidas y sin riesgo a ser superados a base de pelotazos porque a) el Barça no plantea su juego de tal manera y b) porque juega Bojan y Messi arriba. Eso hace que podamos adelantar algo la línea.
Con esa presión, lo fácil para Zambrotta será o seguir, que será su perdición ya que es meterse en el embudo y hacer del partido algo físico (Drago, Keita, Renato contra Iniesta, Messi, Zambrotta) o darle el balón a Márquez. Una vez los jugadores leen el pase, L. Fabiano (que está en la marca con Thuram) y Kanoute (que tapa línea de pase a Iniesta) presionan al mediocentro defensivo del Barça; el mejicano.
Si el balón llega a Iniesta o Deco, la defensa adelanta líneas para reducir las dimensiones de la zona de posesión ya que es más facil perder un balón en un espacio de 10 m. que en uno de 50. Uno de los mediocentros (Keita, normalmente) presiona fuerte la marca haciendo el pressing zonal y el otro se olvida del otro interior y ayuda cerrando por detrás obligando a Capel y Navas a cerrarse con ellos y crear una situación de superioridad en mediocampo. Kanoute marca por detrás del jugador a Márquez. Escondiendose para que si los interiores se sienten presionados le den el balón al mejicano y en caso de robar, con el equipo muy junto, los extremos (Navas, Capel) vuelan hacia banda e incluso el lateral (Alves, si le quitan la sanción) en caso de estar jugando en una zona muy cerrada. Esa es la segunda forma de ataque para el Sevilla en este partido. Líneas muy juntas, Kanoute haciendo de delantero pivot y las bandas haciendo diagonales (en transición defensa ataque, hacia fuera, en transición ataque defensa, hacia dentro).
Por lo tanto, estamos defendiendo para atacar y además no basculamos sino presionamos (pressing zonal).
Si la salida es con los extremos (Messi o Henry) el equipo está obligado a marcar en zona
debido a los intercambios de posición en ataque del Barça e incluso en el once. Los jugadores, como resultado del análisis técnico tienen que tener cosas claras sobre los jugadores con posibilidades de estar en el once. Si juega Giovanni en la derecha, diagonal siempre hacia dentro, si juega Messi, prácticamente lo mismo, pero con más variedad. Si juega Ronaldinho en la izquierda, vigilar las marcas y las diagonales del extremo contrario y del punta (sobre todo si son Bojan o Henry que la piden al espacio). Saber la pierna buena de cada una, donde reciben, como suelen actuar, que desmarques hacen, si al espacio o al pie y con quien conectan más veces (caso de Messi Ronaldinho).
Pero eso es información que deben procesar nuestros jugadores de forma individual. Como equipo, somos uno. En zona y con ayudas y evitando el 1x1.
Si recibe el extremo el equipo se coloca yendo el lateral a la marca, seguido por el central a la cobertura por si se va en diagonal salir al corte o por si va hacia banda presionar al jugador y que el lateral mediante el sistema rotativo coja su sitio. El mediocentro de ese lado bascula y cierra la salida por dentro e incluso el extremo ayuda en la presión. El otro central y el lateral de banda contrario y el interior cierran zona de remate con el mediocentro restante tapando zona de rechace. Kanoute entre líneas y L. Fabiano entre un lateral y un central. Al despejar, como el equipo está muy replegado, primera opción balón a Kanoute y este abre al punta brasileño a banda dando tiempo al equipo a ocupar zona de remate y como segunda opción en caso de ser muy clara o no tener otra salida, desplazamiento largo a L.Fabiano para jugada individual siendo ésta una jugada muy aislada. En ese caso, el punta tiene que pegarse a Thuram. Si Rikjaard da orden a Milito de marcarlo se crea un espacio que aprovecha el jugador entre líneas (Kanoute) o incluso el lateral (Alves) abre banda y el extremo hace una diagonal hacia dentro.
En todos los casos, el equipo sigue defendiendo para atacar.
Como defensas, Drago y Alves jugarían de laterales con Poulsen de central a las coberturas. Poulsen, habitualmente mediocentro es rápido, va bien a las coberturas, lo cual es idóneo para el 2x1 contra sus extremos, tiene buen desplazamiento y salida de balón. El otro central es la gran duda. Al jugar con las líneas adelantadas, Bou o Escudé serías más idóneos que Mosquera, pero éste puede intimidar a Bojan, hacer de central marcador, con el danés a las coberturas y se gana en estrategia tanto defensiva como ofensiva. Sobre todo en esta última. Porque, con ese once del Barça, ¿quien marca a Mosquera, Kanoute, Fabiano, Keita, Renato o Poulsen?
La estrategia, nuestra victoria
Siguiendo el análisis visual de los movimientos mecanizados del Barça es fácil deducir sus jugadas en los corners a favor. O saque en corto al jugador que ni siquiera esconde que viene a recibir o balón al primer palo donde va Márquez que intenta prolongar para Milito o Henry en la zona de área chica para crear confusión. Por lo tanto, es evidente que debemos marcar en zona para no caer en los arrastres de Márquez y prestar real atención a Milito y Henry.
La otra opción es un marcaje mixto en el que tus jugadores de mayor envergadura marcan la zona haciendo eso territorio propio y se marca al hombre a los tres jugadores selectos en la estrategia rival: Márquez-Milito-Henry dejando a tres hombres en zona de ataque para o crear dudas o iniciar contragolpe ya que es poco problable que el Barça marque gol a balón parado. Navas, Fabiano y Capel arriba contra Thuram, Iniesta y Abidal. Letal.
Si Ronaldinho está en el campo es orden clara no hacer faltas en la frontal. No se puede perder un partido contra un equipo grande por cometer estupideces o fallos de concentración. El Barça tiene el mejor jugador del mundo... a balón parado. En las laterales, el encargado es Xavi y es más importante vigilar la zona de rechace que los jugadores hacia los que va el balón. Dado que el Barça no tiene estudiada esas jugadas y no utiliza la peinada como recurso se podría usar la jugada del fuera de juego a la señal de 'va'. Cuando Xavi se dispone a sacar la falta y los jugadores del Barça buscan posición de remate, los jugadores sevillanos salen como una bala a la señal de un jugador de jerarquía como Poulsen o del propio entrenador en una jugada puntual. Fuera de juego y balón para nosotros.
En ataque, corners sacados por Capel (lado derecho) y Navas o Alves (lado izquierdo), un jugador que gane el balón por alto peina a la zona de influencia en el corner donde mezclamos a todos nuestros jugadores altos contra su equipo de bajitos.
En faltas laterales lejanas, el Barça no tiene un jugador a la estrategia y pone una barrera de dos. Caida a banda de un jugador habilidoso (Capel por la izquierda, Navas por la derecha), pase al espacio del que saca la falta y centro de uno de estos jugadores a los Mosquera, Keita, Kanoute.
¿Y Qué hacer con balón?
Visto el análisis del partido hay que intentar concretar donde pensamos robar más balones y entonces, durante la semana trabajar esas acciones con libertad de decisión por parte del jugador que lleva el balón, aunque no tanto en los jugadores que se desmarcan. Como hacemos un pressing zonal, tratamos de robar balones a Márquez en zona de mediocampo, así como ahogar a los interiores. Cuando reciben sus extremos, robaremos más balones cerca del centro que de la banda. Y en estático, los desplazamientos en largo tenemos que emparejar a Kanoute con Milito dejando a L.Fabiano por detrás con Thuram. Balón a Kanoute, peinada, movimiento de arrastre de Fabiano, carrera en velocidad contra el defensa francés y mano a mano contra Valdés. Cech entrenaba los pelotazos a Drogba, lo mismo tiene que hacer Palop con Kanoute.
Incluso, en balón parado desde atrás se puede incluir una variante. Poulsen hace el desplazamiento en largo, Keita se empareja con Milito ocupando Kanoute su posición momentaneamente, peinada y Luis Fabiano contra Thuram.
Si está Alves, dado que la posesión la tienen ellos, su figura en ataque es clave. El Barça será el que lleva la iniciativa, permitiéndonos hacer un embudo en defensa con los extremos jugando de interiores. Robo de balón, salida a cien por hora de Alves y Navas queda estático en su sitio recuperando el esfuerzo defensivo y manteniendo el esquema defensivo del equipo.
Con balón en zona de defensas, tranquilidad, posesión larga, recuperación activa de los esfuerzos e incitación al Barça, que duda entre la presión arriba y la defensa estática de basculación, a adelantar líneas. Si eso ocurre, o Thuram alarga mucho el campo y tenemos espacio para jugar la pelota o nuestros dos puntas se emparejan con los dos defensas. En ese caso o peinada y arrastre o Alves abre campo y diagonal de los bandas.
En el centro del campo, circulación rápida de balón para mover al mediocentro estático-posicional y una vez se llega a banda que éste no siga a nuestro mediocentro llegador (Renato)
Como plantear el ciclo semanal
El equipo libra después del último partido, se reincorpora el Martes con un entrenamiento de variables independientes (cuestiones del modelo de juego que se mantienen sea el rival que sea) y ejercicios genéricos no específicos de máxima intensidad. Ese mismo día se expone en el cuerpo técnico el análisis del partido y se plantean las situaciones que se van a trabajar durante la semana (Miércoles-Jueves-Viernes-Sábado por la mañana). Una vez planteadas (8x4+1 en defensa, ataque estático, pressing zonal con 2+2, colocación en estrategia, coberturas en defensa, transiciones) llamamos a esas situaciones principios generales del juego para ese partido. Y entonces, buscamos sub-principios. Ejercicios en los cuales trabajemos de forma distinta lo mismo. Ejercicios cuyo fin sea trabajar los llamados principios generales del juego pero que requieran de mayor intensidad y de distintas condiciones para ejercitar también el trabajo mental de los jugadores. Y entonces durante la semana empezamos trabajando de los sub-sub-sub principios hasta el principio general del juego determinado. Éste, en situación real se trabaja una vez has hecho todos los subprincipios, siendo un día cercano al partido y sabiendo que es un ejercicio primero estático ya que requiere de explicación.
Las sesiones de vídeo van de menos a más en cuanto a cantidad y eso es inversamente proporcional a la calidad del rival que quieras enseñar. De manera genérica se empieza visualizando los partidos malos del Barça para luego acabar con los mejores reactivando al equipo. A partir del Miercoles o si los subprincipios primeros son muy genéricos, en Jueves se hace una presentación corta analizando las variables independientes del equipo rival; salida de balón, transiciones, estrategia, etc.
El Sábado, en el entrenamiento de la mañana se trabajan las variables independientes del modelo de juego a un 10% añadiéndole sesiones muy cortas pero intensas de ejercicios que requieran concentración y realización de una acción mediante nuestra manera de bascular o presionar. Durando estos ejercicios entre 6 y 10 minutos.
lunes, 4 de febrero de 2008
Conociendo a Mourinho
Mourinho, salvo veto de Cruyff, será el entrenador del Barça la temporada que viene. Sin duda, una gran noticia para los culés que lo ven como un salvador, algunos como algo divertido, incluso. Un bocazas, prepotente, un genio. Y lo es. Todo eso... y mucho más, así que voy a tratar de analizar al Mourinho entrenador. Un entrenador revolucionario y genial que empezó como asistente de su padre con solo 16 años. Por entonces, Mourinho hacía análisis de los rivales y como él los contrarrestaría. Cuando con 19 años deja el fútbol avergonzado por un conflicto con el presidente de su equipo que no dejó a su padre alinearle en un partido se empieza a forjar el carácter competitivo y odioso del mejor entrenador del siglo XXI. Irónicamente Mourinho ama el fútbol por todo lo que odia del fútbol, incluso, un 25 de Diciembre ve como echan a su padre del equipo al que entrenaba. Sabe que no va a ser futbolista y piensa que es ya el mejor entrenador del mundo y que consiguiendo llegar a la élite y ganar títulos podrá callar la boca de todos los incrédulos.
Años después y mientras entrenaba a los sub-18 del Vit. Guimaraes le llega una llamada a su padre del presidente del Sporting de Lisboa. Decía algo así: Hemos fichado al mejor entrenador del mundo... pero no podemos comunicarnos con él. Necesitamos alguien que nos eche una mano. Y esa mano es la de Mourinho que se convierte sin llegar a la treintena en parte del cuerpo técnico de Sir Bobby Robson.
Sporting de Lisboa, Oporto y Barça. En el Barça ya llega como miembro del cuerpo técnico y nunca como traductor como así se ha dicho. Robson se va y Van Gaal lo reclama. Curiosamente y esto demuestra la estrella que posee Mourinho, el portugues no se queda por sus grandes conocimientos como algunos han dicho a veces (no dejes que la verdad te estrope una bonita historia) sino por la humanidad de Van Gaal que ve en él una promesa que se marchará a Portugal con el Game Over en la frente. Pero se queda y es una vez allí donde el holandes si que queda prendado de la inteligencia de Mourinho dándole partidos y entrenamientos.
Muy joven, Mourinho dirige al Benfica, ya como primer entrenador y tras solo nueve partidos consigue un histórico 3-0 contra el Sporting de Lisboa, pero se mete en medio (sin quererlo ni beberlo) de un proceso electoral con nuevo presidente incluido. Mourinho, tirando de dignidad y sin querer agarrarse al cargo llama al presidente para decirle que tome una decisión. O me renuevas o me voy. Y se fue. Más sed de venganza acumulada.
Eso le sirve para demostrar lo gran entrenador que es yendo a un equipo muy humilde de Portugal que se convierte en la gran sensación del momento y al que deja tercero cuando ficha por un Oporto en una situación parecida al Barça de Gaspart. El resto, ya lo conocen.
Ese gran Mourinho, entrando en cosas más técnicas, necesita plantillas cortas con buenos jugadores, pero solo en los que él confíe. Es imprescindible para su metodología de entrenamientos. No puede sobrar nadie. Mou trabaja el aspecto psicológico más que nadie y tiene que tener a todos enchufados, no le vale que haya gente fuera del proyecto. Además, rotaciones no está en su diccionario. Es hiper competitivo y rota por obligación, por aspectos tácticos o por merecimientos de un jugador suplente o demérito del titular (recuerdo un Chelsea - N. Forest, primera ronda de la FA con Sheva-Drogba-Lampard-Ballack). Para José la alineación no es una lotería que vaya por turnos. Es la recompensa al trabajo semanal/mensual/anual. La motivación para realizar grandes entrenamientos. Le gusta tener indiscutibles y que estos se sientan participe del proyecto y tiene más de dos capitanes. Tiene capitanes para todo. En el Chelsea, por ejemplo, además de Terry y Lampard, también Drogba, Cech, Makelelé o Essien tenían su función de capitán en entrenamientos, partidos o convivencia.
Si tener seis capitanes en un equipo puede ser revolucionario, lo qué si hace revolucionario a Mourinho es su metodología de entrenamientos. Para Mourinho no existe el físico, la forma física, el gimnasio, la preparación anual por adelantado, los picos de forma, etc. Para Mourinho, lo único importante es tener un modelo de juego perfectamente definido. Un jugar al que todos se adapten. Y mientras en pretemporada los equipos van a la playa, al gimnasio o a la montaña, él está en el campo de entrenamiento haciendo ejercicios basado en situaciones reales de partido. Para Mourinho el entrenamiento es el tiempo para perfeccionar lo que luego se va a hacer en el partido. El portugues no recurre a libros típicos de 1001 ejercicios o dedica el tiempo a hacer carrera continua. Eso no va con él, porque al ser un hombre curioso se pregunta el porqué de las cosas, ¿y por qué es importante la carrera continua?
Mou tampoco pierde el tiempo en ejercicios de mucho volumen y poca intensidad, en calentamientos largos y aburridos o en pachangas. Sus entrenamientos carecen de volumen, son cortos, pero intenso. Menos tiempo de entrenamiento que los demás, pero más tiempo útil de entrenamiento que los demás.
Mourinho trata de diseñar jugadas tanto ofensivas como defensivas que luego se den en el partido. Para eso es fundamental un gran análisis del rival y sobre todo un estudio aburrido sobre sus partidos. Porque Mourinho, en primera persona, visiona los últimos diez partidos del próximo equipo con el que tiene que enfrentarse para ver si sus movimientos son fruto del partido o algo estudiado, mecanizado. De ser así, trabaja durante la semana para hacer daño por donde encuentre el fallo a lo estudiado por el otro entrenador y también para parar la forma de atacar del contrincante. Los jugadores del portugués tienen hojas en las que reciben información sobre su marca; si es zurdo, diestro, si se va para dentro, para fuera, si sube la banda, etc.
Así pues, Mourinho entrena todos los días del año en el terreno de juego y siempre con un mismo fin; perfeccionar el modelo de juego del equipo.
Además, a ello le añade sesiones de entrenamiento mentales. Mou no ve a los jugadores como maquinas sino como seres humanos que tienen días buenos y días malos y que los entiende y apoya. No es de extrañar entonces que jugadores buenísimos como Joe Cole, Robben o Duff que han sido suplentes durante mucho tiempo con el portugués, hablen tan bien de él.
En ese apartado entra también lo que menos (según quien) gusta del portugues; sus provocaciones. Mou intenta crear un campo de batalla a su alrededor haciendo a todos enemigos y siendo el orgullo y el amor propio las armas para ganar a quien se ponga en medio. Para apelar a dichas armas se necesita un enemigo. Y eso es lo que busca el portugues. ¿Cómo motivas a grandes estrellas que ganen o pierdan cobrarán 6 mill €? A base de amor propio, de ver que todos están en contra de ellos, que piensan que son malos y que solo hay una manera de callarlos. Su enemigo puede ser el rival, la prensa, el arbitro... o su propio presidente.
Tácticamente, Mourinho necesita saber cual es su plantilla para poder decidir y es en la pretemporada donde decide finalmente cual será su modelo de juego. Y entonces irá con él a muerte. Eso sí, con precauciones. Mourinho siempre trabaja dos esquemas; el principal y el plan b.
Lo primero que tiene en cuenta Mourinho para decidir que equipo quiere ver sobre el campo es la Liga en la que juega. Por eso el Oporto difería del Chelsea y por eso si ficha por el Barça Bojan e Iniesta serán titulares en su equipo; porque en España la clave es la calidad diferencial de los jugadores y eso Mourinho lo sabe.
Una vez tiene claro el modelo de juego, debe decidir el donde y cómo. Y eso depende, defensivamente, de los delanteros y los defensas que tenga. Si posee delanteros rápidos y defensas altos, Mourinho marcará la línea defensiva cerca de su área, creando espacios en ataque para que los habilidosos puntas puedan matar al contragolpe.
Si por el contrario, posee delanteros estáticos y defensas rápidos, adelanta la línea, presiona mucho y roba en tres cuartos de campo para armarla rápido.
Qué hacer con balón depende de su centro del campo.
Además, aunque algunos lo tachen de defensivo, Mourinho es de los que defiende para atacar. Para robar el balón y tener él la posesión. Y entonces, hacer daño con la misma. Su fin no es no encajar goles sino colocarse de una manera en la cual, cuando se robe el balón se sepa que hacer con él. Por eso su equipo a veces peca de vertical. Porque antes de tener el balón ya sabe lo que va a hacer con él.
Años después y mientras entrenaba a los sub-18 del Vit. Guimaraes le llega una llamada a su padre del presidente del Sporting de Lisboa. Decía algo así: Hemos fichado al mejor entrenador del mundo... pero no podemos comunicarnos con él. Necesitamos alguien que nos eche una mano. Y esa mano es la de Mourinho que se convierte sin llegar a la treintena en parte del cuerpo técnico de Sir Bobby Robson.
Sporting de Lisboa, Oporto y Barça. En el Barça ya llega como miembro del cuerpo técnico y nunca como traductor como así se ha dicho. Robson se va y Van Gaal lo reclama. Curiosamente y esto demuestra la estrella que posee Mourinho, el portugues no se queda por sus grandes conocimientos como algunos han dicho a veces (no dejes que la verdad te estrope una bonita historia) sino por la humanidad de Van Gaal que ve en él una promesa que se marchará a Portugal con el Game Over en la frente. Pero se queda y es una vez allí donde el holandes si que queda prendado de la inteligencia de Mourinho dándole partidos y entrenamientos.
Muy joven, Mourinho dirige al Benfica, ya como primer entrenador y tras solo nueve partidos consigue un histórico 3-0 contra el Sporting de Lisboa, pero se mete en medio (sin quererlo ni beberlo) de un proceso electoral con nuevo presidente incluido. Mourinho, tirando de dignidad y sin querer agarrarse al cargo llama al presidente para decirle que tome una decisión. O me renuevas o me voy. Y se fue. Más sed de venganza acumulada.
Eso le sirve para demostrar lo gran entrenador que es yendo a un equipo muy humilde de Portugal que se convierte en la gran sensación del momento y al que deja tercero cuando ficha por un Oporto en una situación parecida al Barça de Gaspart. El resto, ya lo conocen.
Ese gran Mourinho, entrando en cosas más técnicas, necesita plantillas cortas con buenos jugadores, pero solo en los que él confíe. Es imprescindible para su metodología de entrenamientos. No puede sobrar nadie. Mou trabaja el aspecto psicológico más que nadie y tiene que tener a todos enchufados, no le vale que haya gente fuera del proyecto. Además, rotaciones no está en su diccionario. Es hiper competitivo y rota por obligación, por aspectos tácticos o por merecimientos de un jugador suplente o demérito del titular (recuerdo un Chelsea - N. Forest, primera ronda de la FA con Sheva-Drogba-Lampard-Ballack). Para José la alineación no es una lotería que vaya por turnos. Es la recompensa al trabajo semanal/mensual/anual. La motivación para realizar grandes entrenamientos. Le gusta tener indiscutibles y que estos se sientan participe del proyecto y tiene más de dos capitanes. Tiene capitanes para todo. En el Chelsea, por ejemplo, además de Terry y Lampard, también Drogba, Cech, Makelelé o Essien tenían su función de capitán en entrenamientos, partidos o convivencia.
Si tener seis capitanes en un equipo puede ser revolucionario, lo qué si hace revolucionario a Mourinho es su metodología de entrenamientos. Para Mourinho no existe el físico, la forma física, el gimnasio, la preparación anual por adelantado, los picos de forma, etc. Para Mourinho, lo único importante es tener un modelo de juego perfectamente definido. Un jugar al que todos se adapten. Y mientras en pretemporada los equipos van a la playa, al gimnasio o a la montaña, él está en el campo de entrenamiento haciendo ejercicios basado en situaciones reales de partido. Para Mourinho el entrenamiento es el tiempo para perfeccionar lo que luego se va a hacer en el partido. El portugues no recurre a libros típicos de 1001 ejercicios o dedica el tiempo a hacer carrera continua. Eso no va con él, porque al ser un hombre curioso se pregunta el porqué de las cosas, ¿y por qué es importante la carrera continua?
Mou tampoco pierde el tiempo en ejercicios de mucho volumen y poca intensidad, en calentamientos largos y aburridos o en pachangas. Sus entrenamientos carecen de volumen, son cortos, pero intenso. Menos tiempo de entrenamiento que los demás, pero más tiempo útil de entrenamiento que los demás.
Mourinho trata de diseñar jugadas tanto ofensivas como defensivas que luego se den en el partido. Para eso es fundamental un gran análisis del rival y sobre todo un estudio aburrido sobre sus partidos. Porque Mourinho, en primera persona, visiona los últimos diez partidos del próximo equipo con el que tiene que enfrentarse para ver si sus movimientos son fruto del partido o algo estudiado, mecanizado. De ser así, trabaja durante la semana para hacer daño por donde encuentre el fallo a lo estudiado por el otro entrenador y también para parar la forma de atacar del contrincante. Los jugadores del portugués tienen hojas en las que reciben información sobre su marca; si es zurdo, diestro, si se va para dentro, para fuera, si sube la banda, etc.
Así pues, Mourinho entrena todos los días del año en el terreno de juego y siempre con un mismo fin; perfeccionar el modelo de juego del equipo.
Además, a ello le añade sesiones de entrenamiento mentales. Mou no ve a los jugadores como maquinas sino como seres humanos que tienen días buenos y días malos y que los entiende y apoya. No es de extrañar entonces que jugadores buenísimos como Joe Cole, Robben o Duff que han sido suplentes durante mucho tiempo con el portugués, hablen tan bien de él.
En ese apartado entra también lo que menos (según quien) gusta del portugues; sus provocaciones. Mou intenta crear un campo de batalla a su alrededor haciendo a todos enemigos y siendo el orgullo y el amor propio las armas para ganar a quien se ponga en medio. Para apelar a dichas armas se necesita un enemigo. Y eso es lo que busca el portugues. ¿Cómo motivas a grandes estrellas que ganen o pierdan cobrarán 6 mill €? A base de amor propio, de ver que todos están en contra de ellos, que piensan que son malos y que solo hay una manera de callarlos. Su enemigo puede ser el rival, la prensa, el arbitro... o su propio presidente.
Tácticamente, Mourinho necesita saber cual es su plantilla para poder decidir y es en la pretemporada donde decide finalmente cual será su modelo de juego. Y entonces irá con él a muerte. Eso sí, con precauciones. Mourinho siempre trabaja dos esquemas; el principal y el plan b.
Lo primero que tiene en cuenta Mourinho para decidir que equipo quiere ver sobre el campo es la Liga en la que juega. Por eso el Oporto difería del Chelsea y por eso si ficha por el Barça Bojan e Iniesta serán titulares en su equipo; porque en España la clave es la calidad diferencial de los jugadores y eso Mourinho lo sabe.
Una vez tiene claro el modelo de juego, debe decidir el donde y cómo. Y eso depende, defensivamente, de los delanteros y los defensas que tenga. Si posee delanteros rápidos y defensas altos, Mourinho marcará la línea defensiva cerca de su área, creando espacios en ataque para que los habilidosos puntas puedan matar al contragolpe.
Si por el contrario, posee delanteros estáticos y defensas rápidos, adelanta la línea, presiona mucho y roba en tres cuartos de campo para armarla rápido.
Qué hacer con balón depende de su centro del campo.
Además, aunque algunos lo tachen de defensivo, Mourinho es de los que defiende para atacar. Para robar el balón y tener él la posesión. Y entonces, hacer daño con la misma. Su fin no es no encajar goles sino colocarse de una manera en la cual, cuando se robe el balón se sepa que hacer con él. Por eso su equipo a veces peca de vertical. Porque antes de tener el balón ya sabe lo que va a hacer con él.
domingo, 3 de febrero de 2008
Diseccionando al Racing de Marcelino
Si queremos empezar haciendo honor al título del novato blog y hablar de fútbol y ciencia de manera conjunta (sabiendo los matices que conllevan estas dos palabras en una misma frase) nada mejor que hacerlo con el equipo más trabajado de la Liga española. El arte de lo sencillo. Eso es el Racing de Santander, un equipo dirigido por un joven y brillantísimo entrenador; Marcelino García Toral.
El conjunto cantabro juega con un 4-4-2 de las cuales, las dos primeras líneas, ambas de cuatro hombres juegan por detrás del balón, basculando de manera simétrica y ocupando el espacio de la manera más racional posible. Además, no se le puede considerar un equipo que juegue en zona sino que ejerce el pressing zonal. La diferencia es que cualquier entrenador trabajador, sin ser muy brillante puede pensar una forma correcta de bascular. Algo más difícil es que luego tu equipo lo hago a tu imagen y semejanza, pero a veces (las más, de forma aburrida mediante repeticiones exactas en los entrenamientos) es factible conseguirlo. Lo complicado es saber diseñar el juego. Las situaciones no se dan, se buscan. Crear el momento y saber como actuar en ellos. Mediante entrenamientos, llegar al partido con ventaja sabiendo las situaciones que se van a dar y los modos para solucionarlos.
Me llevaría una entrada distinta hablar sobre el mal uso de los entrenamientos por parte de los entrenadores. Calentamientos con más volumen que intensidad, largas series de trote cochinero, entrenamiento de gestos técnicos básicos en estático y no en situación real (disparos, pases, etc), posesiones en grandes dimensiones como parte principal del entrenamiento. Tal que la táctica forma parte del final de la semana, trabajada a un 10% y estudiando solo las basculaciones y el posicionamiento del equipo en estático. Se tiene (y de esa manera lo es) como una parte aburrida del fútbol. La táctica lo es todo, es la teoría más práctica existente. Es un saque de banda, un saque de puerta, un robo de balón o una perdida en medio campo. Es el aquí y ahora. La forma de actuar de un equipo, la manera de que once sean uno. Las situaciones del partido al fin y al cabo.
Y nadie mejor que Marcelino controla eso en la liga española; todo ello voy a intentar diseccionar tomando como referencia el Racing - Zaragoza del otro día en el Sardinero con empate a dos.
El Racing salió con un 4-4-2. Coltorti en la porteria por la baja de Toño. No habituales también el lateral derecho Sergio Sánchez y de central izquierdo Navas. Ambos apoyados por un defensa en mayúsculas: Garay y por un lateral en decadencia cuya carrera deportiva estaría muerta de no haberse topado con Marcelino (Luis Fernández). En el centro del campo Duscher de mediocentro posicional y de todoterreno el renacido y gran futbolista Colsa. Estos, siempre ayudados por dos interiores que eran P.Álvarez y Jorge López, aquel día en la izquierda. En la punta de ataque Smolarek y el canterano Bolado.
Viendo el once salta a la vista que Marcelino apostó (poco habitual en él) por las rotaciones. La causa es el partido de copa que había tres días después.
Su rival, el Zaragoza salió con un 4-4-2 también. Cesar de portero, una defensa con Juanfran y Diogo en los laterales y Pavón y Sergio en el centro. Zapater y Luccion en medio campo ayudados por Gabi y con Oscar de teórico extremo izquiero. Arriba, la polvora: Milito&Oliveira.
La primera no casualidad del partido nace en el tempranero gol del Racing. En el minuto 4 de partido y con el balón en posesión del Zaragoza se roba un balón en tres cuartos de campo con las dos líneas de cuatro muy juntas formando un embudo imposible para el ataque de rival y atrayendo a los contrarios a una zona imposible. Y sin embargo, una vez robas el balón tiene fácil solución. Equipo desordenado y tus laterales se abren sin tener que mirar atrás. Haces el campo ancho en una décima de segundo. Un ejemplo del estudio de la transición (en este caso defensa-ataque) y su importancia en el fútbol. Una máxima es que sin balón hay que hacer el campo pequeño y con el, abrirlo. A la velocidad que lo hagas depende la calidad de tus contragolpes y la forma de evitar los ajenos.
Tan estudiado tiene eso el Racing que el interior atrae al rival a la zona central para dar un balón al espacio al lateral. Éste conduce sin tener que mirar atrás ya que la línea no se descompone en absoluto (el interior pasa a ser lateral y el lateral conduce como interior). El contrario desordenado y tu equipo con dos puntas por delante del balón. Los dos centrales del rival obligados a marcar al hombr (2x2 y posesión). Caida a banda del punta y peligro. De libro. Tan de libro que la jugada la hace un falso lateral escaso de técnica-velocidad ofensiva (S. Sánchez) y Bolado, autor del gol.
Acabó en gol y no hubiera pasado nada de no haber sido así. Si la pierde Sánchez mientras subía el equipo sigue basculando con cuatro defensas (el interior de lateral) y los otros tres componentes del centro del campo. Si la pierde Bolado mientras Sánchez ya subía a zona de remate. Al estar en banda, diagonal hacia dentro y otra vez dos líneas de cuatro con Álvarez, el interior, de lateral y Bolado, el delantero, de interior. Y eso teniendo a Sergio, lateral, fuera de la jugada. Un sistema rotativo nunca visto en la élite en la cual es sencillo ver como el mediocentro defensivo hace de falso lateral cuando estos suben ¡y sin embargo dejan así la zona del centro vacía!
Avanzado el partido, se ve claro que el Racing no renuncia al balón. Ni mucho menos, pero es increible la inteligencia y el sentido táctico que tienen hasta cuando poseen el esférico. Los defensas tocan con tranquilidad el balón en busca de un hueco. Abren el campo de manera que hacen más sencilla la fluidez de balón pero nunca, y ésta es una máxima de Marcelino, conducen la pelota. Eso está prohibido tanto para la defensa como para el mediocentro posicional de turno. En un ataque estático el defensa nunca puede conducir la pelota, lo que por cierto hacen el 99% de los defensas no conscientes de sus limitaciones. Si conduces es porque no ves una vía clara y lo que haces es perder la posición. Nunca verán a Cannavaro o Garay conducir una pelota hasta mediocampo. Sin embargo sí a Ramos. Un defensa son muchas cosas y esos detalles que no se ven son goles en contra. El defensa que saca bien el balón es el que controla y pasa, controla y pasa y no el que conduce dejando un espacio libre.
Cuando el Racing es atacado a base de pelotazos, la defensa que juega en una falsa línea (los laterales algo escalonados para ganar metros, pero sin dejar distancia entre el central y ellos mismos), uno de los centrales ataca el balón y rápidamente los otros tres se cierran en diagonal para evitar la peinada del delantero o prevenir un mal despeje.
Luego, cuando el balón lo reciben los extremos rivales, el Racing se caracteriza por su gran superioridad en la zona del balón. Ayudas constantes e intensidad. Si el extremo se fía, en un momento tiene al interior + el mediocentro al acecho, con el lateral tapando la salida más el central de esa banda. Luego, el otro central y el lateral de la banda contraria más su respectivo interior cierran la zona de remate. El otro mediocentro se queda en la zona de rechace.
El Racing no deja situaciones de 1x1 sin balón porque esos dejar situaciones a la casualidad. En un 1x1 siempre se puede llevar el balón el contrario y desajustar el entramado defensivo.
La presión del equipo cuando los medios del Zaragoza llevaban el balón también es novedosa y destaca por ir a atacar el balón y no resguardarse. Esa es la diferencia entre jugar en zona y jugar con pressing zonal.
Los interiores se cierran y entonces un mediocentro sale al poseedor de balón. En ningún caso ese jugador se está vendiendo porque tiene por detrás un 4+3. La línea de defensas con los laterales escalonados para ocupar racionalmente las bandas, ya que los interiores ayudan al mediocentro posicional. Y aun así, tienes a un jugador yendo a presionar la salida del balon y si roba consiguiendo por el centro un 3x2 gracias a que dejas a dos puntas con sus dos defensas. Si es el interior rival el que recibe el balón, el interior del Racing va fuerte al poseedor del balón, con un mediocentro cerca de la jugada por el centro y el lateral cerca de la jugada por la banda. El otro mediocentro escalonado por detrás y el interior de la banda contraria cerrando. Y así también la defensa.
Si la posesión de balón pertenece a los defensas contrarios, el Racing tiene dos formas de defender. Si los puntas rivales son altos y corpulentos el equipo saca la defensa. La adelanta unos metros y el equipo bascula de forma más exagerada hacia el lado del balón. Su línea de mediocentros se clava en la línea de medios del rival para dar metros a la defensa que juega junta y cerca del centro del campo, marcando la línea del fuera de juego y alejando a los altos de su zona de influencia: el área.
Si por el contrario (como pasó contra el Zaragoza) el rival tiene jugadores habilidosos, el conjunto cantabro se cubre en salud. Las líneas siguen muy juntas, pero con el culo algo más atrás buscando lo contrario que antes. No dejando contragolpear al rival. El primero en tapar la salida es el punta que hace de enganche y cierra la salida con el pivote que va a recibir al que da algo de metros si va hacia atrás y los mediocentros del Racing dejan un metro a los del Zaragoza. Un metro. Cuando el balón llega a la zona de medios, entonces es cuando el Racing hace el 4+3+1 al pressing. Uno sale al poseedor del balón y los otros cierran. La clave es la falsa libertad que tienen los cuatro mediocampistas rivales que prácticamente nunca pueden jugar de manera vertical y de cara a porteria contraria ya que hay hasta ocho jugadores del Racing por detrás del balón. La presión entonces, cuando es contra equipos que pueden sacar provecho del contragolpe, empieza en campo propio y no antes.
Por último, otro detalle del diseño de las situaciones por parte de Marcelino es el perfecto entendimiento entre sus laterales y sus centrales. Juegan juntos, pero escalonados para ganar metros. Jugar escalonado tiene el riesgo de que el central salga de su posición para seguir al punta que hace un arrastre a banda. Algo que rompe a equipos de la altura del Barça no llega a problema menor para Marcelino. El central sigue al punta a banda y el lateral en vez de seguir la carrera por detrás persiguiendo al delantero, traza una sencilla diagonal y se coloca detrás del central, a una distancia prudente por si consiguen zafarse del primer defensa estar en la cobertura y poder despejar. La línea de cuatro no varía en absoluto solo que el central es ahora lateral y el lateral ocupa su posición.
Otro ejemplo más del sistema rotativo por parte del Racing.
No es de extrañar por tanto que el Racing no reciba apenas goles en jugadas de posesión. Para marcarle tienes que hacerte valer de la estrategia, las jugadas a balón parado o los fallos individuales del portero, por ejemplo.
El conjunto cantabro juega con un 4-4-2 de las cuales, las dos primeras líneas, ambas de cuatro hombres juegan por detrás del balón, basculando de manera simétrica y ocupando el espacio de la manera más racional posible. Además, no se le puede considerar un equipo que juegue en zona sino que ejerce el pressing zonal. La diferencia es que cualquier entrenador trabajador, sin ser muy brillante puede pensar una forma correcta de bascular. Algo más difícil es que luego tu equipo lo hago a tu imagen y semejanza, pero a veces (las más, de forma aburrida mediante repeticiones exactas en los entrenamientos) es factible conseguirlo. Lo complicado es saber diseñar el juego. Las situaciones no se dan, se buscan. Crear el momento y saber como actuar en ellos. Mediante entrenamientos, llegar al partido con ventaja sabiendo las situaciones que se van a dar y los modos para solucionarlos.
Me llevaría una entrada distinta hablar sobre el mal uso de los entrenamientos por parte de los entrenadores. Calentamientos con más volumen que intensidad, largas series de trote cochinero, entrenamiento de gestos técnicos básicos en estático y no en situación real (disparos, pases, etc), posesiones en grandes dimensiones como parte principal del entrenamiento. Tal que la táctica forma parte del final de la semana, trabajada a un 10% y estudiando solo las basculaciones y el posicionamiento del equipo en estático. Se tiene (y de esa manera lo es) como una parte aburrida del fútbol. La táctica lo es todo, es la teoría más práctica existente. Es un saque de banda, un saque de puerta, un robo de balón o una perdida en medio campo. Es el aquí y ahora. La forma de actuar de un equipo, la manera de que once sean uno. Las situaciones del partido al fin y al cabo.
Y nadie mejor que Marcelino controla eso en la liga española; todo ello voy a intentar diseccionar tomando como referencia el Racing - Zaragoza del otro día en el Sardinero con empate a dos.
El Racing salió con un 4-4-2. Coltorti en la porteria por la baja de Toño. No habituales también el lateral derecho Sergio Sánchez y de central izquierdo Navas. Ambos apoyados por un defensa en mayúsculas: Garay y por un lateral en decadencia cuya carrera deportiva estaría muerta de no haberse topado con Marcelino (Luis Fernández). En el centro del campo Duscher de mediocentro posicional y de todoterreno el renacido y gran futbolista Colsa. Estos, siempre ayudados por dos interiores que eran P.Álvarez y Jorge López, aquel día en la izquierda. En la punta de ataque Smolarek y el canterano Bolado.
Viendo el once salta a la vista que Marcelino apostó (poco habitual en él) por las rotaciones. La causa es el partido de copa que había tres días después.
Su rival, el Zaragoza salió con un 4-4-2 también. Cesar de portero, una defensa con Juanfran y Diogo en los laterales y Pavón y Sergio en el centro. Zapater y Luccion en medio campo ayudados por Gabi y con Oscar de teórico extremo izquiero. Arriba, la polvora: Milito&Oliveira.
La primera no casualidad del partido nace en el tempranero gol del Racing. En el minuto 4 de partido y con el balón en posesión del Zaragoza se roba un balón en tres cuartos de campo con las dos líneas de cuatro muy juntas formando un embudo imposible para el ataque de rival y atrayendo a los contrarios a una zona imposible. Y sin embargo, una vez robas el balón tiene fácil solución. Equipo desordenado y tus laterales se abren sin tener que mirar atrás. Haces el campo ancho en una décima de segundo. Un ejemplo del estudio de la transición (en este caso defensa-ataque) y su importancia en el fútbol. Una máxima es que sin balón hay que hacer el campo pequeño y con el, abrirlo. A la velocidad que lo hagas depende la calidad de tus contragolpes y la forma de evitar los ajenos.
Tan estudiado tiene eso el Racing que el interior atrae al rival a la zona central para dar un balón al espacio al lateral. Éste conduce sin tener que mirar atrás ya que la línea no se descompone en absoluto (el interior pasa a ser lateral y el lateral conduce como interior). El contrario desordenado y tu equipo con dos puntas por delante del balón. Los dos centrales del rival obligados a marcar al hombr (2x2 y posesión). Caida a banda del punta y peligro. De libro. Tan de libro que la jugada la hace un falso lateral escaso de técnica-velocidad ofensiva (S. Sánchez) y Bolado, autor del gol.
Acabó en gol y no hubiera pasado nada de no haber sido así. Si la pierde Sánchez mientras subía el equipo sigue basculando con cuatro defensas (el interior de lateral) y los otros tres componentes del centro del campo. Si la pierde Bolado mientras Sánchez ya subía a zona de remate. Al estar en banda, diagonal hacia dentro y otra vez dos líneas de cuatro con Álvarez, el interior, de lateral y Bolado, el delantero, de interior. Y eso teniendo a Sergio, lateral, fuera de la jugada. Un sistema rotativo nunca visto en la élite en la cual es sencillo ver como el mediocentro defensivo hace de falso lateral cuando estos suben ¡y sin embargo dejan así la zona del centro vacía!
Avanzado el partido, se ve claro que el Racing no renuncia al balón. Ni mucho menos, pero es increible la inteligencia y el sentido táctico que tienen hasta cuando poseen el esférico. Los defensas tocan con tranquilidad el balón en busca de un hueco. Abren el campo de manera que hacen más sencilla la fluidez de balón pero nunca, y ésta es una máxima de Marcelino, conducen la pelota. Eso está prohibido tanto para la defensa como para el mediocentro posicional de turno. En un ataque estático el defensa nunca puede conducir la pelota, lo que por cierto hacen el 99% de los defensas no conscientes de sus limitaciones. Si conduces es porque no ves una vía clara y lo que haces es perder la posición. Nunca verán a Cannavaro o Garay conducir una pelota hasta mediocampo. Sin embargo sí a Ramos. Un defensa son muchas cosas y esos detalles que no se ven son goles en contra. El defensa que saca bien el balón es el que controla y pasa, controla y pasa y no el que conduce dejando un espacio libre.
Cuando el Racing es atacado a base de pelotazos, la defensa que juega en una falsa línea (los laterales algo escalonados para ganar metros, pero sin dejar distancia entre el central y ellos mismos), uno de los centrales ataca el balón y rápidamente los otros tres se cierran en diagonal para evitar la peinada del delantero o prevenir un mal despeje.
Luego, cuando el balón lo reciben los extremos rivales, el Racing se caracteriza por su gran superioridad en la zona del balón. Ayudas constantes e intensidad. Si el extremo se fía, en un momento tiene al interior + el mediocentro al acecho, con el lateral tapando la salida más el central de esa banda. Luego, el otro central y el lateral de la banda contraria más su respectivo interior cierran la zona de remate. El otro mediocentro se queda en la zona de rechace.
El Racing no deja situaciones de 1x1 sin balón porque esos dejar situaciones a la casualidad. En un 1x1 siempre se puede llevar el balón el contrario y desajustar el entramado defensivo.
La presión del equipo cuando los medios del Zaragoza llevaban el balón también es novedosa y destaca por ir a atacar el balón y no resguardarse. Esa es la diferencia entre jugar en zona y jugar con pressing zonal.
Los interiores se cierran y entonces un mediocentro sale al poseedor de balón. En ningún caso ese jugador se está vendiendo porque tiene por detrás un 4+3. La línea de defensas con los laterales escalonados para ocupar racionalmente las bandas, ya que los interiores ayudan al mediocentro posicional. Y aun así, tienes a un jugador yendo a presionar la salida del balon y si roba consiguiendo por el centro un 3x2 gracias a que dejas a dos puntas con sus dos defensas. Si es el interior rival el que recibe el balón, el interior del Racing va fuerte al poseedor del balón, con un mediocentro cerca de la jugada por el centro y el lateral cerca de la jugada por la banda. El otro mediocentro escalonado por detrás y el interior de la banda contraria cerrando. Y así también la defensa.
Si la posesión de balón pertenece a los defensas contrarios, el Racing tiene dos formas de defender. Si los puntas rivales son altos y corpulentos el equipo saca la defensa. La adelanta unos metros y el equipo bascula de forma más exagerada hacia el lado del balón. Su línea de mediocentros se clava en la línea de medios del rival para dar metros a la defensa que juega junta y cerca del centro del campo, marcando la línea del fuera de juego y alejando a los altos de su zona de influencia: el área.
Si por el contrario (como pasó contra el Zaragoza) el rival tiene jugadores habilidosos, el conjunto cantabro se cubre en salud. Las líneas siguen muy juntas, pero con el culo algo más atrás buscando lo contrario que antes. No dejando contragolpear al rival. El primero en tapar la salida es el punta que hace de enganche y cierra la salida con el pivote que va a recibir al que da algo de metros si va hacia atrás y los mediocentros del Racing dejan un metro a los del Zaragoza. Un metro. Cuando el balón llega a la zona de medios, entonces es cuando el Racing hace el 4+3+1 al pressing. Uno sale al poseedor del balón y los otros cierran. La clave es la falsa libertad que tienen los cuatro mediocampistas rivales que prácticamente nunca pueden jugar de manera vertical y de cara a porteria contraria ya que hay hasta ocho jugadores del Racing por detrás del balón. La presión entonces, cuando es contra equipos que pueden sacar provecho del contragolpe, empieza en campo propio y no antes.
Por último, otro detalle del diseño de las situaciones por parte de Marcelino es el perfecto entendimiento entre sus laterales y sus centrales. Juegan juntos, pero escalonados para ganar metros. Jugar escalonado tiene el riesgo de que el central salga de su posición para seguir al punta que hace un arrastre a banda. Algo que rompe a equipos de la altura del Barça no llega a problema menor para Marcelino. El central sigue al punta a banda y el lateral en vez de seguir la carrera por detrás persiguiendo al delantero, traza una sencilla diagonal y se coloca detrás del central, a una distancia prudente por si consiguen zafarse del primer defensa estar en la cobertura y poder despejar. La línea de cuatro no varía en absoluto solo que el central es ahora lateral y el lateral ocupa su posición.
Otro ejemplo más del sistema rotativo por parte del Racing.
No es de extrañar por tanto que el Racing no reciba apenas goles en jugadas de posesión. Para marcarle tienes que hacerte valer de la estrategia, las jugadas a balón parado o los fallos individuales del portero, por ejemplo.
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