domingo, 11 de noviembre de 2012
Remedia Amoris.
Probablemente de lo que más se haya escrito en la tierra haya sido del amor. Como si existiera una urgencia fatal por contarlo al mundo, por atraparlo, por definirlo.
Todo el mundo sabe de amor y no sabe a la misma vez. Conoce y desconoce.
Pero ni las médulas que ardían para Quevedo, ni el haberlo probado de Lope, ni siquiera ese beso entre Burt Lancaster y Deborah Kerr son suficientes motivos para aprehenderlo. Porque sí, puedes alzar la vista y repasar todo lo repasable: el amor ya estaba allí. A Safo le dolía en el pecho de nostalgia el corazón. Y a mí, más prosaica, me da por callarme, abrazar el silencio, no decir nada, sonreir y saber que no seré capaz jamás de escribir una línea acerca del amor.
Rocío.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
siempre andás por los costados del amor, que no le hables a alguien en particular no quiere decir que seas incapaz de acercarte al tema. Yo te he leído cientos de veces bordear el tema hasta casi el meollo. Si sos una romántica empedernida mi Rocío.
Te dejo un enorme abrazo lleno de...corazones!!! :)
cuanto más amas, más callas. ¡qué interesante!
bueno, acabas de escribir ocho líneas que pierden el respeto a ley severa.
y si nada nos libra de la muerte al menos que el amor nos salve de la vida.
abrazo.
Tienes razón, el amor es inaprensible, la única caligrafía es la de la piel, el único significado lo alberga el beso. Todo lo que se diga del amor es inventado. A mí a veces me aburre soberanamente escribir poemas de amor. Otras me aburre leerlos. Otras me enternecen, y me pongo cursi, y parece que volví a la adolescencia. En fin, no creo que sea necesario que el amor se escriba. Besos!!
y yo sin embargo, encuentro siempre mucho amor en todo lo que escribes.
un beso. o dos.
Publicar un comentario