Toda la vida, ya sea en mi actividad profesional o en la lúdica -como jugador de ajedrez- se me ha pedido mi apoyo en muchas ocasiones para eventos, ya sea académicos o del propio ámbito del ajedrez. La mayoría de las veces se me ha pedido que lo haga de forma gratuita, porque "no hay dinero", pero que mi presencia resultaría -por alguna razón- muy atractiva al evento. Y la mayoría de las veces he accedido a participar sin pago alguno.
Pongo un ejemplo, el más reciente, aunque ya tiene al menos un par de años: me invitan a un evento de ajedrez en el Politécnico. La invitación me la gira un colega ajedrecista. Me dice -como usualmente pasa- que no hay dinero y que haga un esfuerzo en pro del ajedrez en Mexico. Me pide una conferencia de ajedrez y computadoras. Es buen amigo y accedo. Lo único que le digo es que si se vuelve a hacer ese evento y me invita, pues que me tendrá que pagar. Asiente y se disculpa por no ofrecerme pago alguno.
Y entonces tengo que ir hasta la unidad del Politécnico donde se hace el evento y pierdo todo el día y parte de la tarde. Hay mucho interés en mi plática y al final de la misma muchos se acercan y platican conmigo. Cambiamos impresiones y bueno, se acaba el evento y listo, nada más que hacer. A partir de ahí nunca me volvieron a hablar para el siguiente evento. No recuerdo si se hizo o no, pero como siempre, terminé pagando "la novatada".
Y si hablo de esto es porque la Secretaría de Educación Pública, la SEP, ha abierto una convocatoria para que artistas e ilustradores hagan las nuevas portadas de los libros de texto gratuitos. El pago es nulo. Se otorgará constancia (con valor curricular) y se dará un ejemplar al diseñador de la portada. Eso es todo. Según la SEP, el hecho de hacer estas portadas puede servir al ilustrador en términos de validar su trabajo. Pero la realidad es que es una vergüenza que el organismo oficial de toda la educación en México, uno de los que más dinero recibe del gobierno por año, no sea capaz de abrir a concurso y pagar por un trabajo.
Ya diversas organizadores de diseñadores e ilustradores han levantado la voz. El buen amigo "BEF", con quien dimos una plática en el evento universitario "Aleph", indica que esto es una burla. Artistas gráficos como él merecen que su trabajo sea compensado. Como apunta el propio Bef: el trabajo debe ser remunerado.
La práctica de tratar de no pagar por un trabajo es común en muchos casos en nuestro país. Un ejemplo incrreíble le ocurrió a mi papá hace años. TV Azteca organizó un concurso para escribir el guión para una telenovela que produciría dicha televisora. El concurso pedía un sinfín de cosas: una escaleta del tiempo en el desarrollo de la historia, no sé cuántos capítulos, etcétera. El premio, si mal no recuerdo, era de un millón de pesos.
Es probable que muchos escritores, tanto profesionales como aficionados, le habrán entrado al concurso. Y ahora la pregunta obligada ¿Quién ganó? Respuesta: NADIE. El jurado -cuyos nombres no supe quienes son- declararon desierto el ganador. Genial. Ahora TV Azteca se habría hecho de decenas de guiones e ideas por las cuales bien no tendría que pagar el premio y si bien le iba a algún autor, quizás lo contactarían ofreciéndole menos dinero... Y eso en el mejor de los casos. Curiosamente, para taparle el ojo al macho, al declarar desierto el premio, TV Azteca iniciaba una nueva convocatoria, igual a la anterior. No lo entiendo. ¿Quién participaría si los que participaron en la primera fueron todos bateados?
Mi hermana Marga, por su parte, siempre me ha dicho que los concursos de diseño son una práctica desleal para con los profesionales. Ella, que vive y trabaja en Vancouver, antes de la Olimpiada de Invierno que se hiciese en esa ciudad, me dijo que un compañero del despacho de diseño gráfico donde trabajaba, había ganado el concurso del logotipo para el evento olímpico. El premio era de unos 20 mil dólares, lo cual parece mucho, pero que es una miseria si se piensa que en camisetas, llaveros, tazas, y toda la parafernalia de unos juegos olímpicos, esto se paga solo. Quien hizo el logotipo fue un mexicano pero como trabajaba para un despacho, quien se llevó la mayoría del dinero del premio, los boletos para la inauguración, etcétera, fue la dueña del mismo. Pero más allá de estos datos anecdóticos, es claro que este concurso vulnera el trabajo de l,os artistas gráficos y lo demerita, porque sí, el premio que se daba parecía bueno, pero para la magnitud del evento en ciernes, era una bicoca para el comité organizador.
Pero regresando al asunto de la SEP, ¿por qué la Secretaria no armó un concurso para convocar a la ilustración de los libros de texto gratuito, con el correspondiente pago? Porque este gobierno demuestra todos los días su estupidez, sus ganas de quedar bien con el presidente, que cada vez es más idiota que el día anterior, en donde todo ha sido corrupción pero él llegó a salvar al país y lo único que ha logrado es montar un estado de desconfianza, en donde cualquiera que pida dinero por algo es corrupto, malo, perverso y casi un traidor a la patria. Y así ha acusado a científicos de ir a eventos internacionales con gasto a Conacyt como si esos científicos y académicos viajaran como reyes, comieran en los mejores lugares e hicieran turismo académico. Como López Obrador no sabe del quehacer académico y además, que claramente no es compatible con él, entonces ataca al gremio que como un amigo me dijo en una ocasión: "yo no soy clase media ya, sino clase pobre alta".
Y ese mismo tono usa para acusar a los abogados que participan en empresas privadas, y los acusa de traidores a la patria. El presidente de la 4T tiene una fijación con una corrupción que dice ha desterrado y se inventa enemigos, reales o ficticios, para cada cosa que dice. Pobrecito señor, no tiene idea de cómo se gobierna un país y entonces decide proponer ahorros en todas las instancias del gobierno. Y así como la SEP "quiere ahorrar" en las ilustraciones de sus libros de texto gratuitos, así el director de Pemex quita el contrato a una calificadora internacional y se ahorra 300 mil dólares (unos 7 millones de pesos). Pobrecitos funcionarios de esta 4a transformación que no entienden la o por redonda.
Me gustaría ver un "marcha atrás" de la SEP. Sér que no va a ocurrir. Por ello mismo, solamente reflexiono sobre este particular asunto.