Una gran sorpresa nos hemos llevado al enterarnos que eramos los primeros en recorrer esta fantástica línea en los cortados de la cara norte que dos días atrás al bajar de hacer el corredor Noroeste divisamos durante el descenso por la clásica de la cara Norte , así nos lo confirma Tente Lagunilla, gran conocedor de la zona y autor junto con Ángel Villán de la guia alpina de Fuentes Carrionas.
Salimos de madrugada de Sabero y a eso de las ocho de la mañana estamos bajo ellas en compañía de Raúl, que no ha traído equipo y nos va a sacar unas fotos.
La línea elegida no esta en condiciones, lo que de lejos parece una cascada de primera al acercarnos comprobamos que el hielo no tiene más de cinco centímetros de grosor en su parte más cargada, así que nos vamos un poco a la izquierda y entramos en la que a la postre abrimos.
Aseguro a Anselmo en un primer largo por una corta pero vertical goulotte a 75º que más tarde se suaviza a 60º al abrirse en una campa de nieve, montando la reunión sobre un clavo en V en un afloramiento rocoso en la parte superior de esta.
En el segundo largo salgo vertical a coger un poco a la izquierda la sección más fuerte, un corto muro a 85º que se protege perfectamente con tornillos da paso a otro mayor con la misma inclinación, todo ello espolvoreado con una ducha constante de nieve polvo que me cae desde arriba.
monto la reunión después de 60 metros sobre tres tornillos a la izquierda del siguiente muro.
De nuevo es el turno de Anselmo, que afronta las últimas dificultades en un muro a 80º, a su termino monta reunión sobre tornillos de hielo.
Al acabar el corredor accedemos a una pala de nieve que ya desencordados recorremos hasta la cima.
Al fin tras cuatro horas aproximadamente desde el comienzo alcanzamos el punto más alto de la cima occidental del Espigüete.
Maravillosa jornada de escalada invernal, buena vía, buen compañero y un día soleado y frío, ¿se puede pedir más?. El descenso lo llevamos a cabo por la cresta norte con gran cuidado, pues desconocemos el recorrido y es más difícil de lo que nos lo han pintado.
Una jornada para enmarcar, una vía que posiblemente no se forme todos los años y que espero sea repetida asiduamente pues tiene potencial a la que hemos bautizado "El Crisol" en honor a nuestras chicas, Cristina y Olga.
