lunes, 27 de junio de 2011

UNO

Uno busca lleno de esperanzas
el camino que los sueños
prometieron a sus ansias.
Sabe que la lucha es cruel y es mucha,
pero lucha y se desangra
por la fe que lo empecina.
Uno va arrastrándose entre espinas,
y en su afán de dar su amor
sufre y se destroza, hasta entender
que uno se ha quedao sin corazón.
Precio de castigo que uno entrega
por un beso que no llega
o un amor que lo engañó;
vacío ya de amar y de llorar
tanta traición...
Si yo tuviera el corazón,
el corazón que di;
si yo pudiera, como ayer,
querer sin presentir...
Es posible que a tus ojos,
que hoy me gritan su cariño,
los cerrara con mis besos
sin pensar que eran como esos
otros ojos, los perversos,
los que hundieron mi vivir...
Si yo tuviera el corazón,
el mismo que perdí;
si olvidara a la que ayer
lo destrozó y pudiera amarte...
Me abrazaría a tu ilusión
para llorar tu amor...
Pero Dios te trajo a mi destino
sin pensar que ya es muy tarde
y no sabré cómo quererte.
Déjame que llore como aquél
que sufre en vida la tortura
de llorar su propia muerte.
Pura como sos, habrías salvado
mi esperanza con tu amor.
Uno está tan solo en su dolor...
Uno está tan ciego en su penar...
Pero un frío cruel, que es peor que el odio,
punto muerto de las almas,
tumba horrenda de mi amor,
maldijo para siempre y se robó
toda ilusión...
Enrique Santos Discépolo

martes, 7 de junio de 2011

El sendero del Tao

Aquello que miramos, pero que no podemos ver, es lo que se llama "etéreo".
Aquello que escuchamos, pero que no podemos oír, es a lo se llama "insondable".
Y aquello que palpamos, pero, pero que no podemos tomar, es lo que se llama "sutil" (1)
Estos tres no pueden ser examinados de cerca.
Por lo tanto, ellos se funden en el Uno. (a)
Él se revela, pero no es deslumbrante.
Se halla oculto, pero no es oscuro.
Es omnipresente, pero no puede ser percibido.
Y finalmente, regresa a lo Inmanifestado (b)
Él es llamado la forma de lo que no tiene forma y la imagen de lo que no existe. Por ello es conocido como "Misterio".
Cuando lo sigas no podrás ver su espalda. Y cuando lo encuentres no podrás ver su rostro (c)
Adhiriéndote a las viejas enseñanzas, transitarás rectamente por la vida presente, y serás capaza de conocer el origen del pasado.
Esto es llamado el Sendero del Tao.
Lao Tse

Capítulo 14


(1) El Tao penetra todas las cosas. Nada de lo que vemos, oímos o palpamos carece de Tao. Él se halla presente en cad uno de nuestros pensamientos. El tiempo con sus tres aspectos -pasado, presente y futuro- se halla conformado por el mismo Tao, y en Él se desplazan los seres. El ser humano y todas las criaturas se hallan inmersas en el vasto Océano del Tao. Sin embargo, aún así, no puede ser visto ni percibido, ya que el hombre, como individuo, no puede ver la Totalidad. Tan sólo contemplará al Tao, cuando, abandonando todos los deseos y apegos, y tomando refugio en la suprema sencillez, llegue a ser Uno con Él. 
(a) El Tao
(b) El Estado supremo y Trascendente
(c) La mente y los sentidos jamás podrán conocer la Verdad, porque sólo  perciben las cambiantes formas, y no la Realidad.