Cobijo Camijanes

Tu espacio de fauna en su estado y hábitat natural

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domingo, 15 de septiembre de 2013

Aves del Mar del Norte

Ordenando todos los archivos del verano hemos visto que tenemos pendiente exponer ligeramente cómo es la fauna que podemos encontrarnos con un poco de paciencia en el sur de Suecia. Hemos recorrido sobre todo bosques y visitado alguna bahía de la costa oeste. En esta primera entrada pensamos ilustrar el tema de las playas y dejamos para la próxima semana lo que podemos observar dentro de las masas forestales. Nuestra estancia en este país no fue meramente faunística, pero supimos aprovechar la oportunidad para desvelar algunos de los secretos naturales que guardaban los alrededores.
Aunque el país goza de bastante costa, la mayor parte de ella es en forma de cortados y acantilados. En estas formaciones muchas aves encuentran un lugar seguro para anidar. Pero después, cuando los juveniles son capaces de desplazarse, visitan playas y puertos donde abunda la comida fácil. Los más destacados de las jornadas que dedicamos a las acuáticas fueron los eideres. Blancos, marrones y negros. Indiscutiblemente el eider es identificado antes que por su color, por su pico; después de localizar unos cuantos ejemplares de plumaje negro dimos con este que ya se parece más al que todos conocemos.


Eider (Somateria mollissima) macho en el mar del norte


Al parecer, en verano lucen el plumaje oscuro y por eso nos costó tanto entre hembras (marrones) y oscuros dar con el auténtico. El cuál, no era más que un avanzado que ya estaba cambiando el plumaje. Por la zona se movían unos cuantos ejemplares, todos de manera independiente, aunque muchas veces compartían posadero y cocina con los cormoranes.


Eider común (Somateria mollissima) macho con plumaje veraniego


Grupo de cormoranes grandes (Phalacrocorax carbo)


Como en cualquier ambiente marino predominaban las gaviotas. Aprovechando cualquier desperdicio que trae la marea para alimentarse, diferenciamos varias especies. En un principio parecen todas iguales, pero fijándonos en tres aspectos podemos distinguir prácticamente todas las gaviotas que se mueven con asiduidad por el continente europeo.


Gaviota patiamarilla (Larus cachinnans)


Partiendo de la más común en las playas del norte ibérico, la gaviota patiamarilla diferenciamos las demás con los tres aspectos: cabeza, dorso y patas. Como sabemos, la gaviota patiamarilla tiene la cabeza blanca, el dorso de las alas gris claro y las patas, lógicamente amarillas. La argénta por contra, era la más común en estas playas; igual que la anterior pero con las patas rosas. 

Gaviota argéntea (Larus  argentatus)

Acertar el color de las patas, lo que en principio parece fácil, se puede hacer complicado cuando nadan, vuelan o cuando el color de las mismas es un tono muy pálido casi imperceptible. Si el día se vuelve oscuro, como ocurría allí normalmente, los colores son aún más ambiguos.
Con un tamaño mayor que las dos anteriores están el gavión y la gaviota sombría. Tienen el plumaje del dorso negro y las patas rosas y amarillas respectivamente.


Pareja de gavión atlántico(Larus marinus)


Gaviota sombría (Larus fuscus) izqda. y argéntea (Larus argentatus) dcha.


Como dijimos al principio de la descripción de las gaviotas, otra gran diferencia en estas aves es la cabeza. En los ejemplares que la lucen en verano de color oscura, diferenciamos tres cortes de plumaje negro-blanco: En el cogote la reidora , en la nuca la enana , y por detrás del cuello la cabecinegra.


Gaviota reidora (Larus ridibundus)

Por lo tanto, las gaviotas europeas podemos diferenciarlas a grosso modo por el dorso oscuro (Gavión y sombría) por la cabeza negra (enana, reidora y cabecinegra) y con el dorso claro (patiamarilla y argéntea); todas con sus diferencias dentro de cada subgrupo. Además otras gaviotas que no hemos tocado aquí son la cana y la tridáctila, ambas de ojos negros y la hiperbórea y groenlandesa, las dos de plumaje en el dorso gris claro pero sin los extremos negros. Esta pequeña manera de diferenciar gaviotas nos vale en los ejemplares adultos y especialmente en verano, ya que en invierno desaparecen ligeramente los tonos negros de la cabeza en aquellas que lo tienen. Los jóvenes e inmaduros son otro quebradero de cabeza que solucionamos fácilmente fijándonos en su compañía adulta.


Gaviota reidora (Larus ridibundus) inmadura


Gaviota argéntea (Larus argentatus) inmadura


Los ostreros fueron visitantes ocasionales de la orilla. A diferencia de otras especies, cuando se asustaban en vez de volar siguiendo el márgen del agua, desaparecían tierra adentro. De esta manera los encontramos visitando prados y jardines, de los que obtenían gusanos y complementaban su alimentación.


Ostrero euroasiático (Haematopus ostralegus)


Ostrero euroasiático (Haematopus ostralegus) con la comida en el pico


Como no podía ser de otra manera, los córvidos también rondaban la zona. Eso de merodear lugares en los que aparece cualquier tipo de desperdicio donde hincar el pico, es muy típico de estos pájaros. Almejas, mejillones, peces e incluso cuando hay suerte focas, forman parte del manjar que puede traer la marea tras un temporal.



Foca aparecida muerta y deteriorada en la orilla, probablemente  juvenil de moteada (Phoca vitulina)


Corneja cenicienta (Corvus cornix) alimentándose de almejas en la orilla


Es curiosa la formación que tienen estas playas. Desde la orilla el sustrato arenoso se encuentra muy poco inclinado hacia el mar y en varias ocasiones la pendiente se vuelve ascendente formando los denominados ´grund´. De esta manera hay mucha superficie con poca profundidad y en las elevaciones se forman cadenas de rocas aprovechadas por estas aves para descansar, secarse e incluso otear. En ellos se asentaban grupos de cormoranes, como mostramos al principio, y muchos viajeros que solo están de paso. Con la siguiente imagen del charrán común cortando el horizonte concluimos esta entrada y animamos a todos vosotros que le habéis dedicado unos minutos a leerla, a compartir vuestra opinión. Un saludo y hasta el siguiente post ´Bosques escandinavos´.


Charrán común (Sterna hirundo) sobrevolando los mares del norte

lunes, 21 de marzo de 2011

Monfragüe, paraíso natural

Normalmente, cuando la gente habla de la cantidad de especies faunísticas que se pueden observar en su tierra, parece que hablan de más, ya que cuando te acercas al lugar no llegas a ver ni la mitad. Puede ser que exageren o, lo que es más frecuente, que no se tenga la fortuna de poder disfrutar de la mayoría de las especies que colonizan una región. Pero cuando nos hablaron del parque natural de Monfragüe toda exageración era poca.
A orillas del Tajo y el Tiétar podermos encontrar una enorme riqueza de avifauna compuesta por muchas de las aves amenazadas de la península. Ambos ríos han ido formando con el tiempo unos cortados cuarcíticos donde anidan cantidad de especies como el búho real.
Esta magnífica rapaz nocturna se mantiene en el nido o sus cercanías soleándose y al llegar el atardecer, en la época de cría, el macho comienza a ulular desde un alto rocoso. Una vez entrada la noche empieza la intensa jornada de caza, ya que alimenta también a la hembra y dentro de unos pocos días tendrá que hacer lo propio con la prole.


Búho real (Bubo bubo)



Búho real (Bubo bubo)


Durante estos días, al amanecer y si se tiene un poco de fortuna, se puede observar como el macho de esta hermosa rapaz transporta la correspondiente presa a través de sus poderosas garras hasta el nido (durante nuestra estancia, el macho alimentó a la hembra con conejos y alguna polla de agua). Una vez que ha cumplido, se retira a su atalaya desde la que observa el tránsito de buitres que comparten lugar de nidificación.
Por estas fechas los buitres que no están pendientes de sacar adelante a su pollo, se dedican a transportar ramas para la reparación y remodelación de sus nidos. Es justo por estas fechas cuando ya se comienzan a observar las primeras crías cubiertas del característico plumón blanco que aparece en las rapaces nada más salir del huevo. Durante escasos momentos y si se está un poco atento, se puede observar como la madre alimenta al pequeño regurjitando la carroña previamente ingerida.


Buitre leonado (Gyps fulvus) y buitre negro (Aegypius monachus)


Aunque el distinguido buitre negro, utiliza las copas de los grandes árboles de las dehesas mediterráneas para colocar sus enormes nidos, puede verse puntualmente compartiendo los roquedos con el buitre leonado y junto al otro carroñero que habita la zona, el alimoche. Este último, procedente de tierras africanas, acaba de incorporarse a la península Ibérica para pasar el verano.



Alimoche (Neophron percnopterus)

Las últimas grullas de la zona surcan en grandes bandadas los cielos del parque natural para abandonar el país hasta el siguiente invierno.


Bando de grulla común (Grus grus)

Un inquieto paseriforme, sale de vez en cuando del interior de los bloques de cuarcita y de las herbáceas anuales para posar durante un par de segundos, auque siempre manteniéndose distante. Se trata del roquero solitario, un ave que consigue ser el objetivo de numerosos curiosos debido a su gran colorido y encanto.


Roquero solitario (Monticola solitarius)


En Monfragüe todo eran nidos y crías, y el cormorán grande no iba a ser menos. Posado y cercano a la orilla del río, poco tiempo le faltaba para realizar su viaje de vuelta hacia las costas de la península. En la imagen, se le puede observar con el característico plumaje nupcial en uno de sus posaderos habituales, como muestra la coloración blanca procedente de las deyecciones, que tiñen casi por completo la cara horizontal de las rocas. 


Cormorán grande (Phalacrocorax carbo) con plumaje nupcial

Uno de los principales iconos faunísticos, no solo del parque, sino de toda Extremadura es la cigüeña negra. Los que vivimos en la parte norte de la península no estamos para nada acostumbrados a observarlas, por eso en cuanto tenemos la ocasión de contemplarlas, intentamos disfrutar de ellas lo máximo posible.


Pareja de cigüeña negra (Ciconia nigra) en su nido


Cigüeña negra (Ciconia nigra)



Cigüeña negra (Ciconia nigra) emitinedo su reclamo

Cigüeña negra (Ciconia nigra)

Cigüeña negra (Ciconia nigra)


Pareja de cigüeña negra (Ciconia nigra) en vuelo

Dejamos como imágen testimonial una última fotografía del lejano y siempre esquivo vuelo del águila azor perdicera. Quizás sea, sino la más, una de las rapaces con mayor dificultad de observar en Monfragüe. Era bastante frecuente preguntar a la gente que te encontrabas en los miradores que tal les iba el día y que habían conseguido ver. Casi todos, por no decir todos, nos comentaban que la perdicera se les resistía. Nosotros tuvimos bastante suerte de poder presenciarla en vuelo, aunque fuese a bastante distancia.


Águila azor perdicera (Hieraaetus fasciatus)

Por último, queremos animar a la gente que le gusta, disfruta o que se mueve por este mundillo, a visitar este paraiso natural. Ya que cualquier amante de la ornitología, tiene en Monfragüe, una parada de obligado cumplimiento.
Muchas gracias por pasaros de vez en cuando por este cobijo.
Un saludo y hasta la siguiente entrada.

sábado, 29 de enero de 2011

Aves de marismas

Cerca de San Vicente de la Barquera, se encuentra uno de esos magníficos lugares en los que se puede observar una gran diversidad de avifauna. Esto implica muchas veces la abundante presencia de intrépidos pajareros, que como nosotros, intentan plasmar en las tarjetas de sus cámaras esos momentos tan especiales que a veces nos regala la naturaleza. Por todo ello nos acercamos a las marismas de Oyambre, la verdad es que el día pintaba bastante bien,  las limícolas recorrían sus orillas como todo tipo de garzas o patos que encontraban comida en estas aguas, algunas rapaces sobrevolaban cerca nuestro y como habitualmente sucede en Oyambre, el avistamiento de diferentes clases de gaviotas se hacía notar.

Marismas de Oyambre con parte de su avifauna


Algunos de sus habitantes más frecuentes como podemos apreciar en la fotografía son las zancudas, que aprovechan las zonas secas y elevadas del centro de las marismas para vigilar mientras se solean tranquilamente como esta garza real.


Garza real (Ardea cinerea)


Tras una húmeda jornada, toca variar la dieta y es entonces cuando las garzas remontan el vuelo para aterrizar en campos cercanos donde encontrar micromamíferos que comer.


Garza real (Ardea cinerea) sobrevolando un prado

Pero mientras permanece en zona acuática comparte actividades con la garceta común, muy frecuente en este tipo de ecosistemas aunque el ambiente no esté soleado.


Garceta común (Egretta garzetta)

Junto a estas dos zancudas el cisne nos deleita presumiendo de plumaje. Casi siempre se encuentran en el agua mirando a través de esta en busca de plantas acuáticas, que son la base de su alimentación. Para comerlas introduce su largo cuello para enganchar con el pico hojas y tallos, pero no se zambuye.


Cisne vulgar (Cygnus olor) y garza real (Ardea cinerea)


Esta ave nos deja siempre unas imágenes fabulosas con su forma de posar, siempre mirándose el reflejo en el agua, en esta primera foto, con la luz entrecortada que asoma después de la borrasca.



Cisne vulgar (Cygnus olor)



Cisne vulgar (Cygnus olor)



Pareja de cisne vulgar (Cygnus olor)


Los colores tan vivos de las cercetas se dejan ver en invierno, tanto en ríos del interior como en la costa.


Cerceta común (Anas crecca)


En las orillas algún que otro zarapito real se puede diferenciar cuando salen  de entre hierbas altas y encharcadas, ya que con ese plumaje de tonos pardos se camufla de lujo.


Zarapito real (Numenius arquata)

 Es diferenciado sin problema por el largo pico que curva hacia abajo, dándole una gran capacidad de alcance para la ingesta de moluscos, crustáceos o incluso algún pececillo.


Zarapito real(Numenius arquata)

Las orillas están continuamente correteadas por pequeñas limícolas que pocas veces paran quietas. La más destacada del día fue este andarrios chico, más propio de épocas calurosas como la primavera o el verano. 


Andarríos chico (Actitis hypoleucos)


Que entre voloteos y saltitos, llegó a una roca en la que tuvo que permanecer quieto, por lo menos el rato justo para hacer una foto antes de que eche a volar.

Anadarríos chico (Actitis hypoleucos)


Un pequeño chorlito dorado pasa desapercibido con quietud, pero es captado y conseguimos plasmar su imagen al borde del agua.


Chorlito dorado (Pluvialis dominica)


Por último, los cormoranes que como siempre usan grandes troncos secos para posarse en marismas, playas, ríos... donde aprovechan para secar sus plumas.


Cormorán grande (Phalacrocorax carbo)


Hace unos días, observamos un ejemplar de cormorán grande volando río arriba el Pisuerga con el plumaje nupcial. Durante el periodo de celo lucen unas plumas blancas cerca de las patas y el color negro se aclarará en las zonas próximas del pico y el cuello.


Cormorán grande (Phalacrocorax carbo) con plumaje nupcial


 Con este vuelo tan característico del cormorán, de silueta negra y cuello plegado nos despedimos hasta nueva entrada.
Un saludo a todos nuestros visitantes.

viernes, 12 de febrero de 2010

Ribera del Duero

Después de las jornadas de exámenes, aprovecharemos para poner al día algunas fotos hechas en las vacaciones de navidad y en los pocos ratos que disponíamos para salir al campo.
En este caso en concreto, mostraremos algunas especies de aves que se pueden observar a lo largo del río Duero a su paso por las cercanías de Simancas.

Comenzamos con dos especies, más características de los pinares colindantes al Duero que de los ambientes ribereños. Nos referimos al pico picapinos y al rabilargo. En invierno, debido a la falta de hojas de los árboles cercanos al cauce fluvial, son fácilmente visibles en las ramas más altas de los chopos.


Pico picapinos hembra (Dendrocopos major)




Pico picapinos hembra (Dendrocopos major)




Rabilargo(Cyanopica cyanus)


 En los terrenos agrícolas cercanos al río, pudimos observar una garza real buscando algo de comida, ya que aparte de peces y ranas, también se pueden alimentar de pequeños mamíferos.




Garza real (Ardea cinerea)




El cernícalo común es bastante abundante por estos ambientes, es uno de los principales controladores de plagas de micromamíferos como los topillos, ratones o ratas, ya que son su principal alimento. De ahí la importancia de conservar y proteger tanto las rapaces diurnas como a las rapaces nocturnas.


Cernícalo común macho (Falco tinnunculus)


Cernícalo común macho (Falco tinnunculus)


Cernícalo común hembra (Falco tinnunculus)


Como todos sabéis, en las vacaciones de navidad no paró de llover, los ríos venían muy crecidos, incluso alguno como el Pisuerga se desbordó. La crecida de las aguas nos limito bastante la observación de especies, pero bueno, algo se pudo sacar. Nos referimos a dos especies que visitan estas aguas en invierno: el cormorán grande y la cerceta común. El cormorán grande es típico de las costas del Atlántico y del Cantábrico, a diferencia del cormorán moñudo, algunos de los cormoranes grandes se adentran continente adentro en invierno para acabar en grandes ríos, marismas o lagos.


Cormorán grande (Phalacrocorax carbo)




Cormorán grande (Phalacrocorax carbo)




Conjunto de cercetas comunes (Anas crecca). Una hembra y tres machos


cerceta común macho (Anas crecca)


Queremos finalizar con un par de fotografías del Pisuerga desbordado a su paso por Simancas y a pocos kilómetros de unirse al Duero.


Río Pisuerga



Río Pisuerga