Mostrando entradas con la etiqueta facultad de letras. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta facultad de letras. Mostrar todas las entradas

miércoles, 22 de diciembre de 2010

FIN DE CLASES (o el divorcio entre mi rutina y la universidad)

Por primera vez, en los 5 años que estudié en la Universidad Nacional Jorge Basadre, las labores académicas concluyeron en diciembre, a diferencia de años pasados que culminaron en febrero, marzo. Las calificaciones me cayeron como regalo de Navidad y sospecho que el esfuerzo sumado a la suerte surtieron el efecto anhelado: acabar mi carrera profesional de Ciencias de la Comunicación.

Mis padres están contentos, mis amigos también. Dicen que cierro una etapa crucial  de mi vida y que se abrirán una baraja de puertas entre las cuales debo elegir la que considere correcta. Aunque el error siempre logra clavar sus dardos cada cierto tiempo en nuestras vidas, espero aprender y, si me caigo desde un precipio, renacer como un Ave Fénix (o un cuervo, como me decían rutinariamente mi entrañable gente de la promoción colegial).

Extraigo lecciones que particularmente considero vitales en estos 5 años. Asimismo, como máquina cernidora, trazo algunas correcciones a ciertas imprecisiones de las aulas de la Facultad de Letras y Ciencias Jurídicas.
1) La experiencia: No creo que la experiencia sea solamente la sumatoria total de errores (como algunos demagogos y mediocres predican): la experiencia es la suma de errores y ACIERTOS que marcan nuestros pasos. La experiencia solamente se obtiene cuando uno se arriesga, se aventura. No hay que temerle a lo nuevo. Si es posible aletea con fuerza como el pichón que salta desde lo alto de su nido.

2) Las Relaciones Públicas son muy distintas de lo que se nos dice en la Universidad. Cada empresa tiene su propio esquema -o a veces un invisible e inexistente- MOF (Manual de Orgnización y Funciones). Pero las palabras que me sirvieron en las prácticas preprofesionales fueron: análisis FODA (Fortalezas Oportunidades Debilidades Amenazas), compañerismo, equipo, proyección, evaluación y proyectos. Lo demás ha sido un relleno de las separatas que nos complican el examen.

3) En el periodismo, uh, qué va, no encontré similares a los Hérores Periodísticos que se mencionan en los libros y hojas sueltas de las clases. Por lo menos en Tacna el mercantilismo le tapó la boca a gran parte de periodistas. Peor aún: periodistas que no saben ejercer éticamente su trabajo (con las excepciones del caso, claro está). Vi un periodismo tacneño en pañales, todavía. Pero sin duda, tenemos "contados periodistas" emulables, admirables.

4) Los contactos: Uno de los mayores favores que le deberé siempre a la Universidad es el haberme contactado con personas (pocas) que realmente les interesa leer y escribir, así como apoyar la cultura sin pretensiones ocultas. Hombres nobles como Livio Gómez (Q.E.P.D.) Edilberto Cabrera, César Quispe, Enrique Azócar, Francisco Mamani, Rubén Mamani, Darwin Fuentes, Luis Calderón, Fredy Gambeta, entre otros, son  personas  dispuestas a trabajar limpiamente y abiertas a sugerencias, a la corrección. Aprendí un abecedario de valores gracias a ellos. Espero que por lo menos ciertas piezas de ese abecé me queden, darling.

5) Hay profesores que cuando entregan sus notas finales les gusta el juego de la diva: se esconden, desaparecen, no responden al celular, faltan a las reuniones con sus pobres estudiantes que son víctimas de la desesperación por saber sus notas de curso. Oiga, estimado profesor, ya pues, déjese de tantas poses de galán terrible y déles las notas a sus estudiantes.

6) Hay gente basura. Una gordita con su falta de respeto y lengua viperina me demostró que hay profesionales -como ella- que nunca debieron titularse como periodistas. ¿Sabe usted que la ética de todo profesional implica respeto a los demás y trabajar por el bien social? Esa gorda quería asesinarme con tanto odio que me prodigaba (nunca antes pensé que alguien sería tan hipócrita porque cuando habla en la radio tiene una voz muuuy calmada, misma monjita esa bruja circular). Y lo que más le disgustó fue, supongo, que yo tomaba a juego sus insultos, riéndome delante de ella, diciéndole que entrenando en un gimnasio ella podría llevar una vida mejor, que no hay que tenerle miedo a la decencia y a la caballerosidad, que tanta pus a mí no me salta y usted, señora, solita va a ahogarse en su rencor.

7) Definitivamente hay que probar suerte en Lima, que tiene la onda del movimiento periodístico y comercial más grande que Tacna. Aunque si encuentro acá lo necesario, lo pensaré masticando mi chicle de menta. Igual, Lima es una meta donde muchos primos míos fueron para quedarse, trabajar, tener familia y...
!pasarla en grande! Larcomar, Centro Cultural de España en Lima, Jirón Quilca, Costa Verde, Boulevard de Asia (eisha, ¿vale?), Paseo Mágico de las Aguas, El Barrio Apolo, La Parada, La Calle de los Gitanas más Bellas del Mundo (este nombre lo inventé y patentizaré algún día), Jesús María, entre otros lugares que no recuerdo o que futuramente conoceré.

8) Amigos que siempre recordaré. Una logia invisible, cuyo sello máximo es una sonrisa, eso es para mí la amistad. Hay pocos amigos verdaderos que desde la niñez hasta la adultez pude cosechar entre los estudios escolares y universitarios (ojo, no soy un viejito escribiendo con manos tembleques sus memorias antes de conocer a su sarcófago). Esta es una de mis maneras personales de agradecerles su amistad impagable a muchos. Como se lo dije a cada uno de mis súper amigos, estamparé sus nombres en los libros que publicaré, jeje, de paso que me gano una venta segura. =)


BUSCANDOMIRADAS SERÁ EN ESENCIA EL MISMO BLOG. Sólo que ahora escribiré capítulos nuevos de una escena a mi criterio evolucionada (una escena no tan ligada a la Universidad). Quiero darme un tiempo para mí mismo y distanciarme de los claustros basadrinos. Espero seguir adelante, contra viento y marea, como el capitán de un barquito que a medida que se resiste a la tormenta, CRECE. 

jueves, 26 de agosto de 2010

FIN DE SEMESTRE :) ( wooohooo! )


Anoche, miércoles, se celebró en el campus la verbena por el 39 aniversario de la Universidad Nacional Jorge Basadre Grohmann de Tacna (cae el 26 de agosto). A las 9, fuimos 3 amigas  y 1 amigo (estudiantes de derecho) a curiosear. Había una banda de hard rock que me encantó (tocó covers de Metállica y Rata Blanca ). Total, aunque la intención de la Universidad es buena, no aplaudo el hecho de que no vendan cerveza adentro (con eso podría paliar el frío que al final me convenció de ir al calor de mi casa). Otro aspecto que critico es que la verbena se haga al aire libre y sin toldos de protección para el público universitario. Tantos millones de soles que hay por el cannon minero y sin embargo los directivos de la universidad no saben qué hacer con el dineral. Desaprobados, viejitos de la ANR (asamblea nacional de rectores), ustedes cobran injustificadamente miles de soles cada mes.


Hoy, jueves 26, tengo una mañana pensante. Hace 2 semanas tuve 2 propuestas de trabajo. Ayer tuve otra, pero siempre el horario de la universidad se encarga de fregármela toda. Y fueron propuestas de trabajo ligadas a la redacción periodística, con horarios y honorarios decentes. Pero justo a esas horas tengo clases en la universidad, a veces pruebas, prácticas, actividades (entre otros impedimentos para mi despegue laboral). Ojalá que a fin de año, cuando acabe mis estudios en la universidad, tenga la misma suerte de recibir propuestas de trabajo para analizarlas y sentar cabeza de una vez y trabajar (adoro este verbo).

Hace poco me contactó un joven poeta interesado en publicar un libro. Su nombre: Omar. Espero que se una al grupo literario del cual soy parte: "VIERNES 9:30". O si no se une, ojalá Omar pueda publicar el libro que tanto desea. Conozco la emoción que lo embarga. La viví antes. Es como perder la castidad en la literatura. Si podemos ayudarlo, encantados.


Esta noche (suena y se lee tan poético estas dos palabras) parece que veré la luz. Luz, en sentido figurado, porque ese nombre no me trae tan buenos recuerdos que digamos.  

martes, 18 de mayo de 2010

APUNTES DE UN MARTES CON SABOR A DERROTA



Clarito me lo había remarcado el instructor de pesas, Don Carlos: “Si vas a levantar más de 60 kilos, primero debes de calentar los brazos, estirarlos y luego trabajar abdominales superiores e inferiores”. Esta mañana pensé: mejor los abdominales para la sesión de otro día, ya que, primero, soy delgado y segundo, en la calle no ando con la panza al aire. Una repentina confianza de león hizo que ni bien acabé las dos horas de entrenamiento y fuese a la ducha, sintiese un entorpecimiento de mi columna y del cuello. Makurki.

Apenas logro torcer la columna o el cuello y crujen “conejos” de los huesos y nervios flojos, medio resaqueados. A las 11 de la mañana, estuve tendido como un lagarto en mi cama pantera (negra, con la caraza de una pantera en el medio). No me duele, pero incomoda. Voy a la cocina por yogur; no hay, entonces voy a la tienda. No puedo amarrarme las hileras con la soltura de antes, ahora como un obeso debo de inclinarme con precaución exagerada para no perder el equilibrio. Al mediodía entró rico el lomo saltado, pero igual, la incomodidad perdura.

Después, el horario me dice que a las 4 de la tarde en punto empezarán las clases en la universidad. Pero fiel a mi holgazanería innata, iré a eso de las 5 y 30. Sumado a la flojera, el calor asesino de estos días me tiene lelo, porque debo reconocer: soy un hombre que necesita el clima frío de los lobos árticos y de los osos polares.

Apegado al refrigerador, tomando agua helada, me pasé gran parte de la tarde, viendo a mi loco gato Marti hacer piruetas en el aire, tratando de atrapar de un zarpazo a un moscón que zumba como un mini helicóptero. Chápalo, Marti, y si quieres, cómetelo, gato insectívoro (pese a que le doy banquetes cárnicos de mis alimentos y su propio RicoCat).


Y pensar que dentro de poco seré esclavizado por las eufemísticamente llamadas prácticas preprofesionales que me exige la carrera de Ciencias de la Comunicación. Torturas preprofesionales, sería más justo denominarlas. Pero de este remolino de responsabilidades no puedo escapar. Ojalá mi jefe sea sincero, responsable y honesto. ¿Pido bastante, acaso? Sería bacán y aplaudible, también, que se apiade de mi billetera y le ponga algunos reales para que mis pies y mi cabeza circulen más rápido y bien aceitados.


Vaya faenón (perdona que gaste tanto tu palabra Bieto Quimper, rey de los petroaudios y de los juicios resueltos por teléfono). Pero a veces creo que hay gente muy conchán (Cristian Meier, patenta esta palabra, te juro que ganarás una fortuna si lo haces) que no paga ni un centavo a los practicantes. Lo peor: casi todos mis compañeros que también realizan prácticas me dicen, muy convencidos de su derrota: "pero es que siempre ha sido así el trato a los practicantes". Les dije y les sigo diciendo: eso quieren que nos creamos, nos meten esa yuca fujimorista de que debemos hacer de todo sin esperar nada. Y les ejemplifico algunos casos: mi ex enamorada era practicante de contabilidad en Ceticos, ganaba 850 nuevos soles mensuales por 7 horas de trabajo de lunes a viernes. Un amigo que tengo, realizaba prácticas en la Sunat, cobraba 750 nuevos soles mensuales. ¿No me crees, hijo mío? (perdonen mi sarcasmo sacerdotal) Ingresen a la página web de la SUNAT y verán el dinero que se les paga a los practicantes.

***
Sé que me dirán soy como el salmón que va contra la corriente, que soy un asistemático, pero bah, eso lo dirán los que como ranitas en un cajón de cartón no saben que la salida está a un paso, a un documento, a un clic.

Ojalá se me pasé el dolor de espalda, trato de estirar el cuello como la jirafa, para distensionarme. Marti juguetea con el vencido moscón en el piso. Las prácticas ya se me vienen encima, como un huaico, ¿o como una esperanza? Jojolete, ya veré cómo me las arreglo. La idea es tener tiempo libre para seguir escribiendo y participar en torneos de karate. Asimismo para tomar bajo la luz de la noche un café o un helado o pasear con alguien especial o irme de shopping.

Moraleja: !los practicantes no somos la última rueda del coche. Sin practicantes, no se formarían profesionales!

lunes, 16 de noviembre de 2009

VOCACIÓN VERSUS ESTUDIOS (vencí al refrío, woo-hoo, pero ahora el martirio de memorizar)

Desde el viernes, sábado y domingo, estoy boqueado, varado en un sinfín de lagunas mentales. Para mí, escribir es como capitanear una aventura en lancha, a mar abierto, puedes moverte a donde quieras. Pero esos días enfrenté la ausencia del combustible literario necesario para escribir. El culpable: los estudios.

El martes tengo una prueba de unidad en la materia de Relaciones Públicas, en la universidad. Y claro, las 41 hojas de la separata que dio el profesor ni siquiera están resumidas. Debo de reescribir todo para darle un mejor orden y luego, memorizar. Memorizar pamplinas. Estuve pegadísimo a esas 41 hojas durante varios días con sus noches. Ya lo dije en un post pasado: no me gusta estudiar mucho, pero igual debo aprobar para luego decirle good bye a tales materias.

Y ni hablar de la franciscana idea de ser practicante de relaciones públicas o periodismo. Por lo menos en el gobierno regional de Tacna o en algún municipio donde al mes trabajarás más de 5 horas diarias -lunes a viernes- te darán la mísera propina de 100 dólares. Lo sé por amigos que tengo realizando sus prácticas preprofesionales en esos recintos. Cuando acaba el mes y sacan la cuenta de sus pasajes y comidas, no queda nada.

Yo quisiera hacer mis prácticas en una empresa donde se me pague decentemente. Y con eso, continuar ahorrando dinero para ampliar mi biblioteca y amoblar mejor mi hogar, mi dulce hogar donde mi mis padres, hermanitos y gato Marti me esperan con los brazos abiertos.

Académicamente, en la currícula de la facultad hay solamente 3 cursos referidos a la literatura y redacción (mis fortalezas). Lengua Española, Redacción Periodística y Periodismo Literario. Lo malo: a la mayoría de compañeros les cuesta muuuuucho trabajo aprobar estos cursos. Pero no es tan difícil, eh. Si lees un buen par de horas cada día, no necesitarás conocer todas las reglas gramaticales que tiene el uso de V o de la B, por ejemplo. En el salón solamente tres estudiantes superamos el 15 de nota en cursos de redacción. Cecilia, Lyria y yo.

En parte, ahora sé porqué el ensayista peruano José Carlos Mariátegui se declaraba anti-universitario y extra-universitario. Ahora sé porqué el argentino Enrique Symns dice que la universidad burocratizó el periodismo y que decayó el nivel periodístico. Ahora sé porqué el chileno Alberto Fuguet, en su novela Tinta Roja, dice "el periodismo es como la prostitución: se aprende en la calle".

Quiero escribir, hacer periodismo escrito. Los demás cursos se me hacen fútiles y accesorios ya que no me atraen ni pienso utilizarlos (ya analicé mis oportunidades y posibilidades al respecto, las letras me salvarán). Por eso amo el arte de escribir.

miércoles, 14 de octubre de 2009

Por fin tengo mi cuenta en You Tube!!!

Hasta hace poco, veía con cierta envidia cibernauta que estudiantes de otras facultades colgaran videos en You Tube. Ya sean de clases universitarias, andanzas, fiestas, reinados, ceremonias, EXISTÍAN EN YOU TUBE.
Yo, entonces, era un desterrado de esa web donde ni siquiera podía subir algunos comentarios.

Hace poco, me animé a ingresar al reino fílmico de You Tube. Ahora puedo comentar algunos videos que encuentro interesantes y, de paso, colgar algunas banalidades que mis amigos y yo realizamos(realizaremos, también).

Aquí una pequeña muestra, grabada hace dos meses (cuando tuve mis esbeltos 66 kilos. Ahora peso 69). Luego pondré más videos.