Los dueños de esta vivienda, una joven pareja parisina, cuando encontraron esta casa, una antigua ferretería del 1900, en el centro histórico de Vannes (Bretaña), lo que más les gustó, al verla, fue que el jardín quedaba muy privado y era espaciosa, con carácter y una gran luminosidad y tras la remodelación, se mudaron con su familia a su nueva casa.
Prefieren los colores, la luz y el espíritu de recuperar objetos y muebles, en definitiva, un hogar muy personal.
Vía: Art & Decoration