Reseña | La maldición del ganador - Marie Rutkoski

» Título: La maldición del ganador
» Título original: The Winner's Curse
» Autora: Marie Rutkoski
» Saga: La trilogía del ganador
1. La maldición del ganador ✖
2. El crimen del ganador
3. El beso del ganador
» Editorial: Plataforma Neo
» Género: Juvenil
» Año: 2014  / Edición: 2015
» Encuadernación: Tapa blanda
» Nº Páginas: 384 páginas
» ISBN: 9788416429707
» Precio: 16'90 €

Puntuación

Como hija del general de un gran imperio que se deleita en la guerra y en la esclavitud, Kestrel solo tiene dos opciones: unirse al ejército o casarse.
Sin embargo, todo su mundo da un giro radical cuando la chica encuentra un esclavo cuyos ojos parecen desafiar al mundo entero y, siguiendo su instinto, termina comprándolo por una cantidad ridícula de dinero. Pero el joven guarda un secreto, y Kestrel aprende rápidamente que el precio que ha pagado por otro ser humano es mucho más alto de lo que podría haber imaginado. Que ganar aquello que quieres puede costar todo lo que amas.

Reseña:

¡Menuda sorpresa me he llevado con este libro! Voy a ser muy directa y os diré que me ha encantado y que la única razón por la que no he leído el segundo libro ya, El crimen del ganador, es porque quería obligarme a subir primero esta reseña. Así que ahora ¡se levanta la veda!

La historia comienza con Kestrel, una joven noble que es –ni más ni menos– la hija del general Trajan, el responsable de la conquista del país de Herrán para el imparable imperio valoriano. Su vida es bastante cotidiana (aunque ella es muy diferente al resto de las jóvenes nobles), y se basa en acudir a sus clases para formarse como guerrera, al igual que todo valoriano –aunque no se le da muy bien–, acudir a todo tipo de eventos sociales propios de su posición y disfrutar de su pasión por el piano; en contra de la voluntad de su padre, pues interpretar música se considera más propio de los esclavos herraníes.

Sin embargo, su vida cambia por completo el día que acude a una subasta de esclavos y se encuentra con Arin, un hermoso joven herraní que es vendido como un habilidoso herrero. Los desafiantes y penetrantes ojos del esclavo llaman la atención de Kestrel, pero será cuando el subastador anuncie que el joven sabe cantar cuando ella, sin saber por qué, se verá movida por un impulso incontrolable que la hace pujar y quedarse con el joven por una cantidad excesiva de dinero. Es entonces cuando una mujer sentada a su lado se mofará de Kestrel alegando que sufrirá la "maldición del ganador": cuando tu puja resulta la ganadora, pero pagando un precio excesivo. Kestrel tiene el presentimiento de que no ha sido una buena idea, pero realmente no se imagina lo que su decisión afectará no solo a su padre, sino al imperio valoriano.

Lentamente, Kestrel y Arin irán construyendo una unión evidente aunque inadmisible, incluso para ellos mismos, que pronto hará surgir una serie de sentimientos que no les será fácil controlar. Todo esto se verá influido por la inminente decisión que Kestrel, al igual que toda valoriana, debe afrontar tarde o temprano: unirse al ejército, tal y como quiere su padre, o casarse. Sin embargo, esta decisión pronto dejará de tener sentido.

Me ha encantado el mundo que nos presenta la autora porque nos presenta dos pueblos muy diferentes, con una historia, mentalidad, costumbres y tradiciones bien construidas y planteadas durante la trama. La acción se produce en el país de Herrán, un lugar pacífico que fue invadido y conquistado por el imperio valoriano, un pueblo guerrero de conquistadores valientes, despiadados y poderosos. Los valorianos se han convertido en la nobleza del país y se han establecido en las lujosas y hermosas mansiones de la anterior nobleza herraní; pues el pueblo de Herrán ha pasado a ser una fuente de esclavos para los conquistadores valorianos.

He disfrutado con la clara distinción que hay entre estas civilizaciones, pues se hacen evidentes los contrastes entre ambas en todos los aspectos, desde el estilo de la arquitectura de las casas hasta el uso y la función de sus habitaciones; todo ello pasando por el significado de los gestos hasta la mentalidad y el espíritu de sus sociedades. Aunque veremos cómo esto último se desdibujará como consecuencia de los años de esclavitud sufrimos por los herraníes. Ambos pueblos disponen también de lenguas diferentes, lo que amplía aún más la brecha entre ellos. Durante toda la trama veremos constantes detalles que caracterizan y diferencian a los valorianos y los herraníes y que enriquecen mucho este planteamiento del mundo que nos encontramos en La maldición del ganador.

Este libro está repleto de estrategia, tanto en lo que se refiere a lo social como a lo militar; algo que si llegamos a comparar podría resultar muy interesante. Pero el caso es que las situaciones que viven los personajes requieren de meditadas formas de actuación cuyos buenos resultados están plenamente ligados a la inteligencia y la resolutiva de los mismos. Es un aspecto que se trabaja mucho en el libro y con el que he disfrutado enormemente. De hecho, espero que el segundo libro siga esta línea.

Los personajes me han gustado mucho, cada uno a su manera; pero he agradecido su variedad, credibilidad y buena construcción, tanto de principales como secundarios. Mi favorito ha sido Kestrel, sobre todo porque es un personaje diferente de aquellos a los que estamos acostumbrados últimamente con respecto a que, a pesar de haber sido entrenada como una guerrera, no es su fuerza y destreza lo que la salva de las situaciones peligrosas durante la historia, sino su cerebro; y es que Kestrel es una estratega, inteligente y astuta. Eso es lo que más me ha gustado de este personaje. Además está su amor por el piano. Pese a que es algo que la desprestigia, ella vive para tocar el piano; de hecho, la principal amenaza que se le puede hacer a Kestrel es dañar sus manos (incluso aprendió a pelear durante sus clases prácticas para proteger siempre sus dedos). Estos dos aspectos principales de su personalidad la hacen, sin duda, diferente al resto de su entorno. Además, tiene una percepción diferente de los esclavos y del pueblo de Herrán, le aporta valor a su lengua y sus tradiciones.

Por otro lado está Arin, el Herrero. Un esclavo herraní de provocadores ojos grises, mente aguda y lengua afilada que oculta más de lo que uno ya intuye. Al principio nos encontraremos con un Arin hostil, desafiante e incluso impertinente y brusco. Sin embargo, poco a poco conoceremos su verdadera personalidad, que se ha visto condicionada por la situación en la que se encuentra. Es un personaje complicado, porque habrá momentos en los que te caerá mejor o peor, pero a la vez te hará replantearte lo que sientes hacia este personaje porque es inevitable ponerse en su lugar y comprender su forma de actuar y su papel. Esto hace que el lector pase por momentos de confusión con este personaje. Principalmente es una muestra clara de que la maldad siempre depende del punto de vista, es decir, en el mundo real no existe el blanco o negro.

Dicho todo lo anterior, es evidente que la relación entre Kestrel y Arin no es nada fácil, especialmente al principio, cuando ambos se profesan hostilidad. Kestrel no puede evitar sentir curiosidad por él, de modo que comienza a interesarse por el joven esclavo que sabe cantar. Poco a poco, su relación comienza a evolucionar en algo que ni ellos mismos saben qué es, pero no pueden evitar sentir interés el uno por el otro. Desgraciadamente, parece imposible que algún día puedan aspirar a más que ser ama y esclavo.

El resto de personajes también me han gustado, pues tenemos a los amigos y el entorno de Kestrel, repleto de personalidades diferentes que enriquecen la historia, todos ellos cumplen bien con su papel en la trama. También está el lado de los herraníes, con otro puñado de personajes que nos harán ver las diferentes situaciones que atraviesa este pueblo.

Sin duda, el evidente contraste entre valorianos y herraníes es lo que más me ha fascinado del libro, porque lo envuelve todo y, conforme la historia se va desarrollando, es inevitable sentir frustración e impotencia a la vez que confusión por los actos infames que se llevan a cabo para "impartir justicia".

La narración es sencilla, fluida y llena de giros argumentales que te atrapan cada vez más. Además, tiene acción y una tensión constante tanto por el inminente conflicto que se está fraguando como por la relación entre Kestrel y Arin, que se convierte en un constante tira y afloja. La prosa está muy cuidada y avanza de forma pausada y delicada, atendiendo a todos los elementos de la trama por igual. Especialmente me han encantado lo detallista que es la autora.

La maldición del ganador es un libro que abarca una trama con diferentes elementos muy bien desarrollados, ya que tenemos esa guerra que está a punto de estallar, el contraste entre dos sociedades con una cultura muy diferente y, en medio de todo ello, la historia entre Kestrel y Arin; elementos que se enriquecen entre sí y que favorecen la experiencia del lector.

No puedo terminar esta reseña sin contaros el problema con el que me encontré a la hora de definir el género de este libro. El caso es que me llevé una gran sorpresa cuando vi que este libro está considerado como fantástico. Pero la realidad es que esta historia no tiene ningún elemento fantástico además del hecho de que nos encontramos en un "mundo inventado"; creo que clasificarlo como fantástico puede inducir a confusión. Por otro lado, también lo encuentro como distopía, pero tampoco me lo parece (de hecho parece que este género está últimamente como "cajón desastre"). ¿Romance? Es algo muy importante en la trama pero me parece injusto designar La maldición del ganador como un libro de romance. Así que este es el motivo por el que me decidí el dejarlo simplemente como literatura juvenil.

Puntuación

La maldición del ganador es una historia emocionante sobre dos pueblos enfrentados. Repleta de amor, tradiciones, venganza y traiciones, donde la guerra es inminente. Los personajes son inteligentes, muy creíbles y bien construidos, nos demuestran que no existe el blanco y negro, todo depende del punto de vista. Una lectura muy adictiva y absorbente con giros en su trama que te dejarán con una necesidad inaguantable de leer su segundo libro, recomiendo tenerlo a mano.

Sobre la autora:

Marie Rutkoski es autora de diversas novelas juveniles. Actualmente es profesora de Literatura Inglesa en la Brooklyn Collage, donde imparte clases sobre Shakespeare, literatura infantil y escritura creativa. Vive en Nueva York con su marido y sus dos hijos.

¿Qué os ha parecido el libro? ¿Lo habías leído? 

Si lo habéis hecho espero recibir vuestras opiniones en los comentarios. 

¡Hasta la próxima!