La 81ª edición del Festival de Venecia nos trae de vuelta a Jude Law. Tras deslumbrar con su paso por la alfombra roja, el actor presentó su nueva película, The Order, nominada al León de Oro, la cual recibió una ovación de más de siete minutos tras su proyección.
Inspirada en el libro de no-ficción de 1989 The Silent Brotherhood: The Chilling Inside Story of America’s Violent, Anti-Government Militia Movement, de Kevin Flynn y Gary Gerhardt, cuenta la historia real de un grupo de ultraderechistas que atraía a los ciudadanos con su defensa de la raza, la familia y la religión y que tenía como misión "salvar" a la America cristiana de la conspiración comunista.
En la película de Justin Kurzel, Law da vida a Terry Husk, un solitario agente del FBI que cree que los robos a bancos que se están produciendo en el noroeste del Pacífico los están llevando a cabo un grupo de terroristas. Pronto, su investigación lo lleva hasta una organización de supremacistas blancos liderada por Bob Mathews, interpretado por Nicholas Hoult. Completan el reparto Tye Sheridan, Jurnee Smollet y Marc Maron.
Durante la rueda de prensa previa al estreno en Venecia, Law aseguró que su nuevo thriller policíaco "tenía que hacerse ahora", afirmando que "lamentablemente, su relevancia habla por sí sola". "Se sentía como un trabajo que era necesario hacer ahora. Siempre es interesante encontrar una pieza del pasado que tenga una relación relevante con el presente", explicó.
Por su parte, Kurzel añadió que los paralelismos de la película con el mundo de hoy en día fueron lo que hicieron que el filme fuese tan interesante. "Siempre es extraordinario cuando encuentras un escrito o evento del pasado que tiene una perspectiva que pueda dialogar con la política actual", explicó. "Es una joya poco común. Creíamos que decía muchas cosas del presente".
En el rodaje, Law y Hoult decidieron no verse hasta que les tocó su primera escena juntos para mantener la intensidad que requería la película. "Ni siquiera hablamos durante las primeras cuatro o cinco semanas de rodaje", reveló Hoult. "El equipo disfrutó de la idea de mantenernos alejados. La primera vez que hablamos fue cuando interactuamos en escena".
Además, a Law le encargaron que espiara a Hoult durante un día tal y como lo habría hecho su personaje, algo que el actor de X-Men no supo hasta que llegó a Venecia. "¡Acabo de enterarme en el barco cuando venía!", rió Hoult.
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