que sigo a bordo... un poco flaco y perezoso, pero bien, como siempre, es lo que tiene ... baldeando esta cubierta cada uno de los dias desde hace ni lo sé, subiendo a esos palos y cosiendo velas... amurando y tirando estacha tantas veces que las manos no duelen ni al pensarlo.
siguiendo rumbos despistados... que la mar es pañuelo y todos surcamos las mismas aguas... tormentas y calmas chichas... nos encontramos... nos abordamos sin fondear y seguimos perdiendo las anclas, lastre incómodo que aparece una y otra vez.... una y otra vez...
esta es mi nave, a veces fragata otras gabarra, pero recién calafateada, huele a salitre y a tí...a madera vieja, a soga y acero... huele a lo que somos, a lo que hacemos, a lo que queremos.
que la carcoma acaba con mi pata de palo, ebanista de mi... me hago otra pulida con cristales de las botellas de ron añejo que finiquitamos... y lo del parche... de mentira, pero lo llevo desde hace tanto que ya no merece quitar
...pues eso, que sigo a bordo...
un placer navegar con ustedes.. contigo.
4 comentarios:
Sublime, esto de vivir al lado del mar da una forma especial de ver las cosas ¿no crees?. Que el ruido de las olas, el zizambreo de las velas, te lleve a esa isla de paz que tú sensibilida merece.
Feliz año nuevo, vivamoslo como si fuera el último, en medio de tanto desastre, que gratificante es mirar al horizonte donde se mezcla mar y sol y saber que esa imagen estará alli mucho tiempo mas del que viviremos.
Y en esos mares, que rodean la Tierra que pisamos, estamos juntos, izando velas y a veces a la deriva... pero juntos.
Suerte amigo, que nunca abandonas el barco, además así te imaginamos, rumbo norte, con el parche...
Abrazos y buena semana
que buena entrada, espero tengas mucha suerte, saludos.
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