Ayer por la tarde estuve viendo un simpático remake de una película francesa, y curiosamente salían los Rush tocando durante unos minutos. Me acorde de cuanto me gustaba esta banda y como la tenia abandonada. He vuelto a desempolvar sus discos, pero empezando por el de Gary Lee Weinrib en solitario. Aunque Lee ha consagrado la mayor parte de su talento a la banda de su amores; Rush. Lee se marco un álbum como solista en el año 2000, buena fecha para un tipo como Geddy.
“My Favorite Headache”, se compuso y grabo durante una pausa de la banda. Una interrupción de cinco años debida a las tragedias personales que sufrió Peart, para olvidar las dos tragedias que azotaron su vida Peart viajó con una motocicleta por Estados Unidos, recorriendo 88.000 km!!!
En el disco Geddy contó con la colaboración del guitarrista Ben Mink, un tipo conocido por todos los fans de la banda canadiense FM, y un tipo que ya que había colaborado en el álbum "Signals". El otro colaborador fue el batería Matt Cameron. Solo Jeremy Taggart se encarga de la batería en "Home on the Strange" .
Recuerdo la excitación de la noticia de que Geddy se lanzara a sacar un disco en solitario, un disco por cierto que me costo cierto trabajo en encontrar, ya que todavía en el año 2000, Internet no era la caja de Pandora de la que se ha convertido en pocos años.
El disco no sorprende por algo novedoso, es una continuación de los trabajos de Rush. Lee emplea su particular registro de voz pasada por helio y las estructuras siguen la misma linea que la nave nodriza; Rush! También es algo normal tras 22 discos con Rush, para Lee la cosa era difícil de descentralizarse de tantas míticas composiciones.
Aunque canciones como "Still" y/o Grace to Grace se pueden distanciar un poco de lo que normalmente nos ofrece Rush y son mas apegadas al espirito Geddy, siempre esta la misma esencia de la banda. “The Angel's Share” es un temazo como la copa de un pino, porque Geddy se marca un discazo en toda regla. No es un vulgar disco en solitario, Geddy lo medito y como tal lo plaasmo, le salio mucho mejor que el trabajo de su compañero de fatiga el guitarrista Alex Lifeson.
Un trabajo con momentos de épica y gran belleza, y con canciones pegadizas de melodías enrevesadas. Un trabajo perfecto tanto si uno es fan de Rush como si no lo es, porque en fin de cuentas es un disco de rock con una personalidad propia, cosa que le faltan a muchos trabajos de hoy en día.
