SOLA (I)

Abrió la puerta de entrada y se sorprendió al ver la luz encendida en el salón, era demasiado pronto para que él ya estuviera en casa, puesto que solía llegar unas dos horas después que ella. Tiempo suficiente para darse una buena ducha y tener preparada la cena....

Dejó las llaves en la mesita que había junto a la puerta y entró en el salón con una media sonrisa dibujada en su cara. Gesto que desapareció instantáneamente de su rostro nada más verlo a él con semblante serio sentado en el sofá, con el televisor apagado y una pequeña bolsa de viaje junto a sus pies.

-Qué sucede?
-Ya nada es igual, no siento por tí lo que debiera, no te quiero como antes y no deseo hacerte daño.

Dijo todo ésto sin apenas mirarla a la cara, como si lo tuviese ensayado desde hacía ya mucho tiempo y evitando que algo lo distrajese de su propósito, por ejemplo, la dulce mirada de su esposa.

Ella, sintió una punzada terrible en medio del pecho, permaneció inmóvil bajo el umbral de la puerta del salón. Se sentía incapaz de moverse porque no podía dar crédito a lo que acababa de escuchar, era consciente de que en el último mes estaban algo distanciados, pero nada por lo que preocuparse y más teniendo en cuenta que llevaban media vida juntos, así que no era la primera vez que atravesaban una mala racha.

Se agolpaban miles de preguntas y dudas en su cabeza, tantas que pensó llegaría a volverse loca, era incapaz de poner orden allí arriba, se mezclaban recuerdos, ideas, sentimientos,....De todo lo que quería haberle preguntado, lo único que consiguió decir fue :

- Por qué?

- No sé - respondió cabizbajo y a continuación recogió la pequeña bolsa de viaje que había en el suelo. Se levantó y cuando pasó al lado de ella, le dijo:

-Perdóname

-Me dejas tan sola

-Lo sé, lo siento.

Se fue, escuchó el ruido que hizo la puerta al cerrarse y tras ese, oyó otro sonido, el de su propio corazón rompiéndose en mil pedazos, hasta ese día desconocía lo que significaba que doliese el alma y desde ese día nunca lo olvidaría.

Allí se quedó, de pié, totalmente sola, en medio de todo, sola con sus miedos, sola ante el abismo que ahora sentía alrededor de ella.

Nota: me gusta la voz de Diana Navarro, no tanto el género en el que se la encuadra (copla)

*Esta historia está basada en hechos reales

SI VOLVIERA A NACER

Cuántas veces me he preguntado aquello de: si volviera a nacer, sabiendo lo que hoy sé, cometería de nuevo los mismos errores? Estoy casi segura de que los mismos no, pero sí muchos otros diferentes. Y es que además creo que necesitamos tanto de nuestros aciertos como de nuestros errores, o acaso no es cierto que se aprende más de los fallos cometidos que de los aciertos? Para mí es así.

Una de las cosas más bonitas que tiene la vida es que no dejamos nunca de aprender, hasta el último de nuestros días seguimos aprendiendo, aprendiendo a vivir.

Este asunto me trae también al recuerdo una asignatura que tuve hace años "Resolución de problemas matemáticos" en la que lo importante no sólo era llegar al resultado correcto, sino que la misma importancia o más tenía la forma, el medio por el que se llegaba a la solución. Incluso se planteaban problemas en los que existían varias maneras de resolverlo y todas ellas correctas. Pues bien, pienso que con nuestros fallos, errores y/o problemas pasa igual, existen múltiples formas de solucionarlos, sólo necesitamos encontrar la más correcta para nosotros mismos que no siempre tiene que ser la más conveniente para los demás.

Todos nos hemos caído y caeremos en más de una ocasión, lo importante es aprender a levantarse y hacerlo cada vez mejor...tenemos toda la vida para aprender a hacerlo ;)

Feliz y fresquito domingo

MALABARISMOS CON CINCO PELOTAS

Salía de viaje por motivos laborales y buscaba un libro que me acompañara y me hiciera más ameno el trayecto, aunque de todos los que había por casa ninguno me llamaba demasiado la atención, así que desistí y pensé sustituirlo por el mp4. Pero cuando me agaché para cerrar la maleta, vi en el estante inferior de la librería un libro que no sabía que tenía, quizá, pensé, se lo dejó mi hermano allí olvidado en una de sus últimas visitas. Habéis sentido alguna vez aquello de que un libro te encuentra a tí y no lo contrario? Yo sí que he experimentado eso y en más de una ocasión.

Pues bien agarré el libro, y emprendí mi viaje, cargada de nervios, ansiedad y estress por el trabajo que me esperaba. Ya en el aeropuerto, mientras esperaba la llegada de nuestro avión (que como es habitual venía con retraso) lo saqué del bolso: "El diario de Suzanne" -J.Patterson- apenas llevaba 30 páginas, cuando leí algo que me hizo detenerme y releer:

"Imagínate que la vida es como hacer malabarismos con cinco pelotas. Estas son el trabajo, la familia, la salud, los amigos y la integridad. En un principio las mantienes todas en el aire, pero un día finalmente comprendes que el trabajo es una pelota de goma. Si la dejas caer, rebota. Las otras cuatro son de cristal. Si dejas caer una quedará irrevocablemente rayada, se resquebrajará o incluso se romperá en mil pedazos. Una vez aprendes la lección de las cinco pelotas, ya tienes la base para conseguir el equilibrio en tu vida"

Este párrafo me impresionó, es totalmente cierto, cuántas veces olvidamos (al menos yo lo hago) lo que verdaderamente es importante en la vida? Pues bien para el que no lo conozca, le recomiendo esta lectura, es una novela romántica, pero que encierra muchas verdades.

LA CITA

Hoy me desperté con cierto punto de melancolía y añoranza, no sé si influida por este espantoso frío que invade la ciudad o porque que me asaltan de vez en cuando tristes recuerdos. Pero en seguida he traído a mi mente, cierta cita que alguna vez me dijeron y que me encanta:

"El Sol

no se ha puesto aún

por última vez"

(Tito Livio)

ABUSO DE AUTORIDAD

Ayer no recuerdo muy bien dónde, escuché algo relacionado con el abuso de autoridad y las injusticias y aquello me trajo recuerdos de mi adolescencia.

Uno de tantos días salía del colegio (religioso y femenino para más señas) en compañía de mi amiga R. y como casi siempre de camino a casa, pasábamos por el centro comercial SIMAGO, (desconozco si aún queda alguno por ahí), era ya algo rutinario, salir de clase, entrar al centro comercial en cuestión, echar un vistazo y para casa,... hasta que llegó aquel fatídico día: estábamos a un paso de la puerta de salida, se nos acerca veloz un Guardia de Seguridad y literalmente nos obliga a acompañarlo. Nos conduce por unas estrechas escaleras, (que a mi me parecieron interminables) mientras, mi amiga y yo nos mirábamos con las caras desencajadas por la incertidumbre, llegamos a un rellano o distribuidor en el que había varias puertas y el tipejo nos ordena que entremos, cada una por una de ellas. Dios mio, qué miedo, pero qué pasa, qué invento es este?

Recuerdo que estuve allí en esa habitación sola, durante 5 o 6 eternos minutos, era toda blanca, sin adornos, con un pequeño sillón, una mesita y una minúscula ventana (si aquello era un despacho, sería el de Torrebruno). En fin, estaba continuamente arreglándome el uniforme del cole, fruto de mi ataque de nervios, cuando de repente se abrió la puerta y apareció el "segurata", me ordenó que vaciase mi mochila, y por supuesto obedecí descargando en el suelo todos mis libros y cuadernos, mis bolígrafos..y mi preciosa agendita de Hello Kitty, la cogió y empezó a ojearla...qué demonios buscaría en ella? los teléfonos de mis compañeras atracadoras de bancos (de la iglesia del colegio)?, la dirección de mi otra amiga con la que yo solía trapichear (ella me pasaba los apuntes de inglés - es que yo no me enteraba de na- y yo a ella los de literatura)? O no, caí en la cuenta de que tenía allí la dirección de I. mi amor platónico, por Dios que no vaya a por él, que no le haga nada, al menos no, hasta que no sepa que existo y yo supiese si tenía alguna posibilidad con él.

En fin, el señor agente, no encontró nada, se dió por vencido y me devolvió mi agenda. Yo reuní todo el valor que pude y le pregunté qué pasaba, él me contestó sin mirarme a la cara: "había unas chicas robando, me avisaron por el walkie y pensé que eráis vosotras. Ya podéis iros"... Salimos a 80 por hora de SIMAGO, perplejas, asustadas, (a mi amiga R. la cacheó -siempre tuvo muy buen tipo-). Cuando llegué a casa y conté lo sucedido, mi padre se enfureció, llamó al responsable del centro comercial, nos pidió disculpas (algo que no hizo el tipejo aquel) y nos rogó que pasásemos por allí para darnos unos obsequios, que desde luego rechazamos.

Desde aquel día, rebautizamos en mi casa aquel comercio con SIMANGO, consecuencia de una frase mía: "y eso que no he robado nada, si mango, me matan" y no volvimos a pasar por allí cada día al salir de clase.

Ahora lo recuerdo y me río, pero en aquellos momentos lo pasé francamente mal...y con todo, no puedo evitar plantearme cómo debe sentirse alguien que es acusado de algo de lo que realmente es inocente y paga con la cárcel o incluso la pena de muerte. Que no nos toque a ninguno

CUESTA TAN POCO

Hay ocasiones, bastantes, en las que me pregunto: tanto esfuerzo supone regalarle a alguien una sonrisa? Me apena el pensar que hay gente a la que de verdad le cuesta un trabajo enorme sonreír, soy consciente de que hay momentos en la vida en los que la tristeza, el pesimismo, la pena te embarga, pero a mi parecer afrontar todo esto con una sonrisa de vez en cuando, ayuda a sobrellevar la carga.

Para mí tan expresiva como una mirada, es una sonrisa, noto fácilmente cuando ésta es verdadera o por el contrario fingida o de compromiso. Creo a pies juntillas que la cara es el espejo del alma y me encantaría llegar a ser anciana, con muchos surcos en mi rostro delatando la cantidad de veces que he sonreído y reído a carcajadas. Ojo! no estoy loca (bueno la verdad es que ningún loco reconoce estarlo) no me río de cualquier cosa, sólo que he heredado de mi abuela el buen humor para afrontar la vida, y le estaré eternamente agradecida por ello.

Bueno....a trabajar y que parezca que me cunde.

Por cierto a ver si aprendo a insertar una imagen en las entradas, lo de la música lo dejaré para más adelante

ESPERANDO UN CAMBIO

He vuelto por estos lugares, básicamente porque ya tengo acceso a Internet y también porque necesito dejar constancia escrita de que necesito un cambio, pero YA!

Las personas vamos superando etapas, ciclos, estadios llámese como quiera y para algunos estos cambios se van sucediendo solos, inevitables con el paso del tiempo y el devenir de los días, en otros casos los individuos provocamos dichas modificaciones en nuestras vidas, cambias de trabajo voluntariamente, te mudas a una vivienda mejor o más barata (lo más común ultimamente).

Pues bien, mi caso es el siguiente, desde hace unos tres o cuatro años, mi vida se ha visto sometida a una serie de cambios bruscos e involuntarios que han puesto patas arriba mi estabilidad y vida rutinaria, y aunque en un principio produce sensación de vértigo y desasosiego, te adaptas generalmente bien a todo ese revuelo (en verdad, no te queda otra que adaptarte y asumir tu nueva situación) Actualmente llevo una temporada más o menos tranquila, lo cual no tiene nada que ver con estable o deseable y soy yo la que pide un cambio, necesito tener yo el control, arriesgarme, cerrar por fin una etapa y no que se cierre cuando ella quiera. Es decir que no quiero verme obligada por la situación a tomar una decisión o a seguir el camino que se me marque, esta vez quiero elegir sola el camino y obligar yo al destino, creando mis propias situaciones.

Modo metáfora: no quiero leer un libro ya escrito, quiero escribir yo mi propio libro en la medida de lo posible, aunque el final dependa no sólo de mí.

Bueno ando ansiosa por reunir el valor que necesito y empezar al menos con el prólogo.

PUES YO NO ENTIENDO NADA

Pero cómo son tan complicados a veces los hombres? no eran las mujeres las complejas? Cuándo no les das lo que quieren, mal. Si les das todo lo que quieren, mal. Dónde está el término medio? Y es que además lo que está bien para ellos no está bien para nosotras y viceversa.

Qué demonios! somos tan distintos los unos de las otras y encima (en teoría) estamos condenados a entendernos... yo creo que por eso algunas se harán monjas y otros tantos (cada vez menos) curas porque se casan con alguien que jamás les replicará, ni les reprochará y ni mucho menos adornará sus cabezas.

Bueno, hoy no ha sido un gran día...

MENUDO DÍA

Ay, no puedo con mi arma: trabajo, estress, agobios, prisas, malos rollos y buenas caras (fingidas por supuesto). Mira que yo no suelo quejarme y menos del trabajo, que con los tiempos que corren (período de recesión -je- o lo que yo llamo cese temporal de la entrada de sueldos en casa) tener trabajo es ser un afortunado/a. Lo que sucede es que en mi trabajo pasas de estar el día entero jugando al solitario (me da vergüenza reconocer que entro en msn) a no tener tiempo ni de ir al baño en 8 o 9 horas; suena el teléfono, llaman a la puerta, mandan mails, fax...uff vamos, que me atacan por todos los medios de que disponen.



A lo que voy, si está en la mano de alguien, por favor un poquito de término medio, que son muy malos los excesos y los defectos , o lo que también llamamos extremos..que yo ahora traslado al terreno laboral, pero que perfectamente puede ser aplicado a cualquier ámbito... o no es jodido tener una nariz extrema? o exceso de pelo en el cuerpo? o defecto del mismo (verdad papá?).



Bueno voy a seguir trabajando que he descolgado el teléfono y van a empezar a sospechar ;)



Dejo este enlace: http://www.youtube.com/watch?v=OkspeWhjfEc

Me presentaré

Este es mi primer blog, mi primera entrada. Y como he leído en más de uno, no tengo mucha confianza en que alguien esté interesado en leerme. A la pregunta de por qué lo he creado, pues no sabría qué decir exactamente, pero creo que se debe a que siempre me ha gustado escribir lo que siento (no llevo un diario ni nada parecido), me ha servido de mucha ayuda expresar, plasmar lo que me pasaba en determinados momentos por la cabeza.

Y una vez comentando con alguien el tema de los blogs y lo terapéuticos que pueden resultar, se me ocurrió crear uno (que es más complicaillo de lo que imaginaba) y dejar escrito en él mis por menores y por mayores diarios, semanales o mensuales.

En fin, a ver qué resulta de todo ésto y bienvenido todo aquel que se atreva a pasar por aquí algún día de estos.como dije que me presentaría, hablaré un poquito de mi: soy una chica a veces divertida a veces reflexiva a la que le encanta charlar de cualquier tema y con un valor o cualidad, que espero no perder nunca El Optimismo.