Hace un par de semanas cosí un vestidito capuchero para una beba. La confección de la prenda no tiene mucho misterio, simplemente tiene el escote cruzado y ribeteado en canalé y la capucha forrada (¡si queréis algún detalle más, pedid por esa boquita!).
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| Aquí el vestido está sin terminar, pero se ve el cuello y la capucha ;) |
Precisamente lo de la capucha era lo que os quería explicar. Si os fijáis en las sudaderas “comerciales” que tengáis por casa, veréis que llevan una tira a lo largo de la costura que une la capucha al cuerpo de la prenda. Esta pieza de tela sirve para ocultar la costura cuando la sudadera no va forrada por completo porque como la capucha se lleva normalmente quitada, esta costura es la que más se ve.
Cuando una prenda con capucha va forrada por completo (como
el chubasquero calentito) basta con colocar el forro con las costuras hacia dentro y la vista de la capucha quedará limpita.
En este caso, os explicaré cómo he colocado la tira para dejar la capucha con un acabado más profesional.
Se puede hacer este detalle con cinta de bies o con una tira de tela a la que haremos un pequeño dobladillo longitudinal con la plancha. La tira puede ser de unos 3 cm de ancho y el dobladillo lo haremos de 1 cm.
Para empezar, tendremos que coser la costura de cada capucha, la de la tela exterior y la del forro. A continuación, cogemos la capucha de forro y le coseremos la tira decorativa.
Con los lados derechos juntos, alineamos el borde sin dobladillo de la tira con el borde vivo de la capucha, así:
Cosemos todo lo largo a un poco menos de 1 cm del borde.
Después, colocamos la capucha de forro dentro de la exterior, con los “reveses” tocándose (osea, con las costuras de las capuchas hacia dentro) y lo sujetamos con alfileres al cuerpo de la sudadera, esta vez con la cara buena de la capucha exterior tocando la cara buena de la sudadera.
Cosemos todo lo largo teniendo cuidado de dejar la tira decorativa que cosimos antes hacia arriba, para que no interfiera con la costura principal.
Ahora plegaremos la tira cubriendo la costura y la vamos sujetando con alfileres.
Por último, cosemos un pespunte por encima de la tira, siendo cuidadosos para que el pespunte que se ve por fuera quede paralelo a la costura de la capucha.
A parte de dejar la prenda más "terminada", esta tira sirve para darle un toque de color divertido a la chaquetea o sudadera. Ah! y podéis aprovechar para poner una etiqueta en el pespunte del último paso, más fácil imposible!
