Bueno,pues la acabé; teniendo en cuenta lo que tardé en el maratón de Madrid, al pasar por la misma distancia... me doy por satisfecha porque bajé 25'; debo decir que en Madrid acabé como desorientada y mal, y en esta media ya estaba más centrada. El tiempo realizado no es bueno (como veis en la foto) pero los he tenido peores y mejores. Hay que aceptar la realidad: y ésta no es ni más ni menos que ahora no estoy ni al 50% de mis posibilidades por lo que debo seguir esforzándome.
Bien, la carrera no está muy mal, teniendo en cuenta que es desde una ermita hasta un municipio a lo largo de la carretera que los comunican; eso sí, cortad al tráfico todo el tiempo.
Yo sólo pongo una pega: te mandan ir a las 8:45h en los buses, llegando a la ermita a las 9:00h y permaneces allí hasta las 10:30h que se da la salida; teniendo en cuenta que llueve, hace aire y frío tan temprano... pues no es un dato muy favorable. Eso sí, debo decir que hay servicios como dos casetas de WC acondicionadas (teniendo en cuenta que es en el campo.. las mujeres lo agradecemos jeje), te dan café con leche calentito, tantos como quieras, y puedes refugiarte dentro de la ermita.
Cierto es que había parado un año, por enfermedad de mi marido, pero nunca pensé que me iba a costar tanto volver a rodar con sensaciones totalmente satisfactorias. Y eso que no paré por lesión asique me doy con un canto en los dientes.
Lo cierto es que me lo he planteado como si empezara a correr por primera vez: ir de menos a más; creo que esa es la clave para que pueda estar, más o menos, en la misma forma que cuando tuve que parar. El tiempo lo dirá y sino... pues a rodar para disfrutar de la compañía de amigos corredores, hacer turismo.. etc. De momento sigo el plan de entrenamiento que me ha puesto Fran (mi entrenador del club).