Esta labor me quema en la conciencia cada vez que pienso en ella, porque no tengo ni idea de lo que quiero que sea, ni de como acabarla. Unos días pienso en hacerle una base y una tapa redonda y que sea un costurero, y otro día pienso que tal vez mejor un estuche, o puede que..., en resumen que no tengo ni idea de cómo continuar.
La empecé este verano con unas telas japonesas que me encantaron, y me tuvo entretenida mucho tiempo. Está toda cosida y acolchada a mano pero... no sé muy bien porqué, se quedó parada en el baúl de los recuerdos
y ha sido esta mañana, cuando he visto la propuesta de neceser que nos hace Belén, cuando he recordado que tenían un cierto parecido y que tal vez había llegado el momento de terminarla de una vez por todas.
Pero... ¿cómo la termino?