[Il bianco e dolce cigno cantando more, ed io
piangendo giung' al fin del viver mio...]
piangendo giung' al fin del viver mio...]
DORMIR sin que el recelo me sustraiga
y al instante
VELAR los ojos vivos al contraste.
ARDER,
que en esta coyuntura un cisne impone
sus alburas al fuego
o al desastre.
PARTIR sobre los lienzos
en convenio y a más lejos
HARTAR la fina incuria , por informe.
FALTAR de desasirme si antes pienso
de aquel frontal, harturas
tierra abajo.
CREAR solaz en vida,
o solo ausencias...
LLORAR porque enmudezcan las verdades.
PEDIR al olmo peras
Va
Ni
Da
DES
Sumadas, consumidas sin vara de medir
fidelidades.
Al cabo, suerte que no duela
VERTE.
Amiga Pili; las verdades no enmudecen pero muchas veces la silencian porque molesta.
ResponderEliminar¿Te había dicho que eres de lo mas original?; !que memoria la mía.
Un fuerte abrazo maña
No ver....a veces alivia, pero sobre todo lo hace la distancia...Un beso Pilar
ResponderEliminarHola Pili,
ResponderEliminarQue bello animal el cisne blanco, que pena que muera cantando(se dice que son fieles por naturaleza).Ojalá los humanos fuésemos igual...
Un abrazo feliz semana.
qué refrescante blog, ay, recuerdo que paraba en La Almunia de camino a Soria en mis vacaciones de verano cuando era niño, adolescente y feliz, saludos
ResponderEliminarSí, llorar con tal que los mosquitos canten y solo nos pique el sueño en la dosis adecuada para vivir. Besos y versos amiga.
ResponderEliminarEl olmo se suicidó deprimido por no estar a la altura de lo que le requerían.
ResponderEliminarSaludos.
Tendríamos que llorar mucho, no hay verdades por ninguna parte.
ResponderEliminarBesos
"Llorar porque enmudezcan las verdades", muchas lágrimas vamos a tener que derramar.
ResponderEliminarUn saludo.
Impresionante poema. Enhorabuena
ResponderEliminarun abrazo
fus
He descolgado un trocito de cielo
Para que al mírate en su espejo
Sea la felicidad la sonrisa de tu reflejo.
Buen fin de semana
Sin distanciarse del optimismo
Ni asociarse con el pesimismo.
Un abrazo para saludarte
Y un beso para despedirte
María del Carmen
Qué bonito Pili... llorar porque enmudezcan las verdades... cuánta verdad es, valga la redundancia. Me ha gustado mucho amiga. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
ResponderEliminarhttp://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/
SIEMPRE ME VOY SORPRENDIDO DE SU MAGISTRAL PENSAMIENTO. LA ADMIRO.
ResponderEliminarBESOS
A mi, lo de pedir peras al olmo, se me da muy bien.
ResponderEliminarA ti, escribirlo.
Besines.
No se me alcanzan a desentrañar el tipo de músicas interiores que te impulsan a escribir como escribes, pero no puedo evitar que el resultado me resulte apetecible, dinámico, incluso hasta de cierta filigrana ligüística, pero entusiasta y gozoso. Con lo que nos conocemos, la lectura me sirve de mayor y mejor conocimiento de tu persona integralmente puesto que sé que vienes de la música y creo que de música estoy hablando. Un beso
ResponderEliminarPili, nos vas a matar, que nos tienes hasta las tantas leyendo y escuchando las músicas y sin dormir.
ResponderEliminarBesicos
Pili Alares y Manolo
Cuantas lagrimas derramadas para que enmudezcan verdades. Cuanta profundid en tus letras querida amiga
ResponderEliminarUn abrazo
Muchos verbos que encierran acciones tristes pero leemos CREAR y eso lo decidimos nosotros. que creamos , cuando y con quien...
ResponderEliminarme encanta tus versos, y esas lagrimas que encierran verdades.
un gusto leerte.
un abrazo fuerte
Nos pierden las vanidades, felicidades Pilar son muy bellos versos,un abrazo.J.R.
ResponderEliminarPreciosos versos y de perdir peras al olmo nadaaaaa
ResponderEliminargracias por tu visita a mi casa y tus palabras de elogios ,gracias
Con cariño un abrazo
Marina
Excelente poema y tu display de los versos me han entusiasmado.
ResponderEliminarcreo que demás puedes pedirle
peras
al
olmo.
Saludos desde una Copenhague CREANDO, siempre CREANDO,
Ian.
Sentimiento insondable, carne que se estremece, el corazón devastado, el alma que tiembla...Todo ello nos hace vivir: se llama amor.
ResponderEliminarPrecioso, quizás sin tener demasiado en común pero me ha recordado Iste Confesor de Scarlatti.
ResponderEliminarSalud
Da gusto visitar tu blog, se encuentra uno con un diálogo con la belleza.
ResponderEliminarSalud
Francesc Cornadó
La vida, con frecuencia, duele... Asi es la vida, amiga
ResponderEliminarHola Pili.
ResponderEliminarUn poco tarde pero aqui, estoy, espero te agrade y no te duela ver a una paisanica tuya.
Sumadas, consumidas sin vara de medir
fidelidades.
Al cabo, suerte que no duela
VERTE.
Paso a leer tus hermosas letras, saludarte y darte un abrazo.
Ambar.
AMAR... VIVIR.. tal vez SOÑAR.
ResponderEliminar¡Qué bueno, ese ritmo...!
ResponderEliminarUn beso