El Acuerdo Comprehensivo Económico y de Comercio (CETA - Comprehensive Economic and Trade Agreement) es un tratado negociado entre la Unión Europea y Canadá, el primero de los "tratados de comercio de nueva generación" y un anteproyecto del TTIP.
Sería el primer tratado firmado por la Unión Europea que incluye el mecanismo de resolución de controversias Inversor-Estado (ISDS - Investor-to-State Dispute Settlement), permite a los inversores y grandes multinacionales demandar a un Gobierno ante un tribunal internacional privado de arbitraje para imponer indemnizaciones multimillonarias, cambiar leyes y medidas políticas soberanas de parlamentos o la administración pública.
Las negociaciones terminaron oficialmente el 25 de septiembre de 2014 en una cumbre entre la UE y Canadá, pero desde entonces sigue habiendo negociaciones sobre asuntos puntuales como el polémico capítulo que transfiere súper-poderes a los inversores. Puede ser presentado para su ratificación a los Estados Miembro en cualquier momento, pudiendo esperarse a finales de 2015 o comienzos de 2016. Luego pasará al Parlamento Europeo y más tarde a los parlamentos nacionales. Tenemos que estar en máxima alerta.
Si se aprobase el CETA se colarían muchas políticas que estamos denunciando en relación al TTIP. Las agricultoras y los agricultores se verán muy afectadas/os por la bajada de precios para sus productos y la presión de las grandes multinacionales de la distribución. Los precios de muchas medicinas aumentarían excluyendo del derecho a la salud a multitud de personas. Empresas transnacionales de EEUU utilizarían los mecanismos legales del ISDS incluidos en el CETA para demandar a los estados europeos si consideran alguna medida o política en contra de sus previsiones de beneficios. Por estas y muchas razones ¡debemos pararlo ya!, y decir un NO claro a Europa y a nuestro gobierno para que España no forme parte.