Desde aquí, os deseo una felicidad llena de colores, calores y sabores; de alegría y energía, que nos cargue para afrontar un espectacular 2016.
Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas,
pero no podemos remar en contra de nosotros mismos.
Eso transforma la vida en un infierno.
Disfruta del pánico que te provoca
tener la vida por delante.
Vívela intensamente,
sin mediocridad.
Piensa que en ti está el futuro
y encara la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes puedan enseñarte.
Las experiencias de quienes nos precedieron
de nuestros "poetas muertos",
te ayudan a caminar por la vida.
La sociedad de hoy somos nosotros:
los "poetas vivos".
No permitas que la vida te pase a ti sin que la vivas.
Walt Whitman
¡Brindemos con orgullo por nuestros poetas muertos! Y que sigamos defendiendo la poesía desde nuestra particular trinchera.