Fue un fin de semana ideal: buena compañía, un tiempo formidable, patchwork de alto nivel y muchísimas cosas que comprar.
Las exposiciones me gustaron muchísimo. Sé que ya se han publicado muchas fotografías pero también creo que deleitarse con los quilts que se exponían no cansa nunca.
Los Baltimore de Ellen Sienkiewicz eran sublimes. Todo trabajado a mano con un acolchado perfecto y maravilloso.
Flores en relieve
Aplicaciones invertidas
Acolchados sublimes
Explosión de detalles.
La exposición del país invitado, Francia, la ví toda con la boca abierta.... era imposible no quedar impresionada por unos quilts de patchwork tradicional hecho a mano, con piezas diminutas y un acochado perfecto.
Con diferencia, fue la que más me gustó. Algunos ejemplos:
La exposción de Ferret fue sorprendente por la manera de definir las figuras, por la perfección de las siluetas y las expresiones. Todo realizado a máquina.
Con Carol Taylor disfrutamos de una explosión de color en un patchwork contemporáneo que me encantó.
Soy una enamorada de las telas de Kaffe Fasset y me gustó muchísimo ver en directo algunos quilts que aparecen en sus libros aunque he de reconocer que no era el trabajo más perfecto y más cuidado. La combinación de colores es excelente.
La exposición de la Asociación Española de Patchwork fue muy variada y con trabajos preciosos pero yo creo que la ubicación de la misma y la colocación de los quilts en el local no era la mejor; faltaba luz y algunos trabajos estaban a una altura considerable que no te permitia verlos con detenimiento.
Además de admirar los trabajos de las exposiciones tuvimos tiempo de pasearnos por los puntos de venta situados en las carpas del paseo marítimo y cargar con un montón de patrones y telitas...
Mis compras son, básicamente, éstas:
Al final, no me compré ningun libro!!!!! Hojee muchos pero mi presupuesto me hizo entrar en razón...je, je, je.
Un beso.
Este me sorprendió por la originalidad del diseño. Si os fijais bien podreis ver la línea de luz que se dibuja en el suelo y la sombra que producen cada una de las prendas. ¡Me encantó!
Impresionante, por su tamaño, por su trabajo, por su diseño..... un premio mericidísimo.
Aquí empiezan las fotos de la exposición de George Siciliano. Yo soy una enamorada de los log cabin y estos me dejaron boquiabierta. Piezas minúsculas se unen para formar increibles formas llenas de colorido.
Ya veis, 345o piezas en un quilt de no más de 25x25 cm. ¿Alguien lo supera?...ja, ja, ja.
La exposición de Reiko Kato era "la perfección a su máximo nivel". Lo único que echo de menos en estos quilts es la falta de color pero la elaboración es increíble. Me gusta mucho la introducción de diferentes puntos de bordado en los detalles e incluso el uso del ganchillo.
Punto de nudo, punto de palestrina..... y unas aplicaciones perfectas hacen de estos quilts una auténtica obra de arte.
Cambiamos de estilo; la exposición alemana era minimalista, colorida ....... a mi también me gustó.
Esta es Nuria, mi compañera de viaje, y una de las mayores alegrías de este fin de semana. Nos conocíamos un poco pero puedo aseguraros que después de estos dos intensos dias en su compañía mi admiración y mi cariño por ella han crecido hasta el infinito. ¡Gracias Nuria!
Al salir de la ducha, la primera noche, vi sobre mi cama un regalo que apareció como por arte de mágia. Un detalle de Nuria que me encantó.
Y, desde el primer momento, mi ilusión era conocer a muchas de las amigas blogueras de las que soy comentarista habitual...ja, ja, ja. 
Y estas son mis compras: patrones, libros y revistas de donde sacar ideas para seguir disfrutando del patchwork.
