Ya os he comentado en numerosas ocasiones que, por culpa de las odiosas canas, tengo que teñirme todos los meses. Normalmente suelo acudir a mi peluquería habitual no sólo porque trabajan con la coloración que a mí tanto me gusta (INOA de L´Oréal), sino también porque el trato es genial y confío plenamente en los profesionales que trabajan ahí. Pero a veces, sea por falta de tiempo o por algún otro motivo me tiño el pelo en casa. Y hoy os voy a contar mi experiencia con el último tinte que he probado. Se trata de la nueva coloración que ha lanzado recientemente L´Oréal, Prodigy.

Prodigy de L´Oréal Paris es una coloración permanente que no contiene amoníaco y promete una cobertura óptima de las canas. Pero, a diferencia de otros tintes de características similares, la fórmula de Prodigy cuenta con la tecnología MO-T basada en la micronización de aceites que permite recrear los colores naturales y conseguir unos reflejos mucho más naturales (en el cabello natural suelen distinguirse unos 4-5 reflejos, mientras que las coloraciones anteriores sólo consiguen dos reflejos), un color mucho más uniforme entre las raíces y las puntas, y en general, un cabello mucho más suave y brillante, también, en parte gracias al aceite de argán que encontramos en su fórmula.

Igual que otros tintes, la nueva coloración de L´Oréal se presenta en una caja que contiene la crema colorante, la crema reveladora, un tubo con aplicador, una espátula para mezclar mejor el colorante y el revelador, guantes de color negro, y un acondicionador para fijar el color y aportar un extra de brillo y suavidad al cabello. Prodigy está disponible en 15 tonos y el precio ronda los 8 euros.


Mi experiencia con Prodigy de L´Oréal. Una de las características de un tinte en la que más me fijo es el olor que tiene, ya que no soporto que sea demasiado fuerte. En este sentido Prodigy me ha convencido. También quiero resaltar que me ha resultado muy fácil la aplicación. Por la textura que tiene el producto final (la mezcla entre la crema colorante y el revelador) no he tenido ningún problema en extendérmela uniformemente. La cantidad ha sido suficiente para cubrir la totalidad de mi cabello (para que os hagáis una idea, ahora lo llevo un poco por debajo de los hombros), incluso me ha sobrado un poquito.

Ahora bien, en cuanto al resultado, después de esperar el tiempo indicado (30 minutos) y aclararme el pelo, noté que tenía el pelo mucho más brillante y, efectivamente, se notaban perfectamente los reflejos (el tono que utilicé fue el 5.30, un castaño claro con reflejos dorados). Y en lo que se refiere a las canas, que para mí es lo más importante, ya que es la razón por la que me tiño, observé que Prodigy las había cubierto en su totalidad. Así que quedé encantada con el resultado. El "pero" vino después de unos pocos lavados cuando me di cuenta que, a pesar de que en un primer momento el tinte me había cubierto todas las canas, con los lavados el color de las canas se estaba empezando a perder.

Como conclusión final, creo que el tinte en general es bueno ya que deja el pelo muy bonito, con mucho brillo, y un color es realmente precioso y muy natural, pero si tenéis canas, desde luego no es el ideal, ya que como os he comentado, en un primer momento las cubre, pero el resultado no es muy duradero.

De todas formas esta ha sido mi experiencia, lo que no quiere decir que si vosotras tenéis canas, os va a pasar lo mismo. Así que me encantaría que si alguna de vosotras ha probado Prodigy de L´Oréal compartiera aquí su experiencia.

 Por cierto, ¿cuál es vuestra coloración favorita para utilizar en casa?