No existo, soy una apariencia, un recipiente que otros
llenan. Soy mi propia espera, todos mis ahora
se igualan a cero. Me hallo perdida en un olvido, en un tiempo que se despeña
silencioso, oscuro. Soy una ausencia, una mirada vacía, un corazón sin raíces,
una vida que otros modelan y que yo acepto…no, no acepto, espero…..
¿Creerme cierta? pensarme o que otros me piensen, no me
basta para hacerme cierta, tocar y tocarme, herir o herirme, no es suficiente.
Pero si pudiese girar, encontrar un camino de regreso, hallaría lo que mi alma y mis ojos reconocen
como suyo y entonces, empezaría a sentirme cierta.
1 comentario:
A veces, sólo a veces, yo también me siento así, Juana. Pero, afortunadamente, siempre acude alguien (o algo) en mi ayuda, y recupero parte de mi certeza.
Puede ser cualquiera (alguien con quien me cruzo), o cualquier cosa, un árbol, un pájaro, un perro, un brillo en el horizonte... Entonces aflora la sonrisa, y comprendo que, en el fondo, nada se ha perdido.
Un abrazo, amiga.
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