No digas nada.
Por eso se hicieron los besos así. Las palabras no son compatibles con ellos.
No digas nada.
Tu pupila está dilatada. Puedo leer en ella, incluso en la penumbra.
Recuerda lo que nos contaron de pequeños sobre los deseos. Si los formulas en voz alta, no se cumplirán.
Por eso escuchamos los latidos. El corazón habla a ritmos.
No molestemos. No invitemos a la gente a nuestra intimidad.
No preguntes. No acordemos límites.
No digas nada. Deja que suceda.
Fotografía: Holding
Mun, the Silent Doll
MAR Y JAZZ
Hace 11 horas