Desde que el punto y el ganchillo entraron en mi vida, hay una labor de lana que siempre me ha fascinado por sus múltiples posibilidades y por su sencillez: los pompones. Y es que después de varios años dedicándome a esto, aún siguen ahí, despertando mi interés y sin cansarme de ellos!
Que si ramos de flores, muñecos de todas las formas inimaginables, guirnaldas decorativas, alfombras... Un montón de cosas se pueden hacer con ellos. Y si algo tienen los pompones es que despiertan simpatía vayan donde vayan, aparezcan donde aparezcan. Tan sólo con pronunciar su nombre ya le caen simpáticos a una (pom pom) y aportan buen rollo a cualquiera.
Ahora, mi última fijación con los pompones está en los jerseys que los llevan. Me resulta un detalle divertido para vestir cualquier prenda aburrida y darle una nota de color al invierno.
Se pueden llevar a tutti colori y de un tamaño considerable...
...o un poco más discretos, de tamaño más pequeño como garbanzos.
También hay quien los lleva monocromáticos!
Sea como sea como se lleven, no me digáis que no es un complemento divertido que puede salir del armario más allá de Carnaval!
Además, hay que dar partido a esos restos de lana que quedan siempre en el fondo de la cesta y que están deseando cobrar una nueva vida!
Si queréis investigar un poco más sobre que se puede hacer con pompones, encontraréis un montón de inspiración en este tablero de Pinterest!
Vía Natalie McComas, My luscious life, Design Love Fest, Make my lemonade, Vainilla & Laces, Adventures in fashion, The White Pepper, Swapdom. (no os perdáis algunos de estos enlaces que llevan tutorial).