A pesar de todo, la ciencia ficción me deja de vez en cuando películas que realmente no merecen la pena. Y acabo de juntar dos: Jumper y Monstruoso.
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La película cumple muchos tópicos del cine moderno. Por supuesto, no puede faltar la habitual niña más o menos mona que ejerza de novia del protagonista. Por supuesto, no puede faltar el final abierto que dé pie a una trilogía (¿por qué no se puede hacer una saga de dos o de cuatro partes? ¿por qué todo tiene que ser una trilogía?). Por supuesto, se trata de una película cortita que en realidad camufla lo que podría haber sido una buena introducción de una historia más completa (si acaso, la historia interesante que tiene Jumper está en el epílogo). Por supuesto, adolece de un climax realmente fascinante y la pelea final se queda en algo de andar por casa. Por supuesto, no pasará a la historia por mucha secuela que se estrene.
Y no es que sea una mala película, tampoco es eso, pero es una pena que se desperdicie buen material. De hecho, el rodaje se retrasó porque a última hora se decidió que los protagonistas, en lugar de ser adolescentes, debían ser jóvenes. La tiranía de la imagen, una vez más. O quizá el aburrimiento de ver a un niño/chaval/adolescente salvado siempre el mundo, eso que ya hemos visto tantas veces. Al final salí del cine lamentando lo inane de la hora y media que acababa de ver, de la que sólo disfrute realmente de la música de John Powell, pegadiza y muy adecuada a la cinta, y de la cara de mala leche de Samuel L. Jackson (que, también hay que decirlo, ya la ha lucido en pantalla con mucha asiduidad). Prescindible.
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La historia que cuenta tampoco es nueva. Un monstruo gigante ataca y destroza Nueva York (lo mejor de la película es que Estados Unidos vuelve a recuperar el humor para este tipo de películas y abandona la psicosis del 11-S). Dice Abrams que la idea se le ocurrió viendo en Japón una tienda llena de muñequitos de Godzilla. Vale. Al monstruo de Monstruoso no le vemos hasta que no han pasado 20 minutos de película (en la mejor escena de la película, que, dicho sea de paso, es la que aparece en el trailer...). Y luego tampoco le vemos mucho más que en tres o cuatro planos más o menos borrosos y confusos. Muy poco para ser una película de monstruo, ¿no? El bicho en cuestión está bien hecho, sí, pero al final sabe a muy poco y para saber exactamente cómo es la gente está recurriendo en Internet... a la foto del juguete que se va a comercializar. Cuando más se le ve es al final es una escena... cómo decirlo sin revelar nada... que es vergonzosamente inverosímil...
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En lugar de seguir las andanzas del monstruo, lo que seguimos es a un grupo de jóvenes, que comienzan la noche en la fiesta de despedida de uno de ellos, que se marcha a trabajar a Japón (qué guiño tan fácil a Godzilla...) y de los remordimientos que le entran por no haber sido capaz de mantener en su vida a la chica de sus sueños, que se presenta en la fiesta con un ligue. Absolutamente prescindible todo esto, la verdad. El resto de la película está plagado de gritos, expresiones grandilocuentes, "¡¡¡dios míos!!!" a mansalva... y poco más. Hay quien piensa que Monstruoso puede marcar época. A mí sólo me pareció un ratito de entretenimiento previsible y de baja calidad técnica. Pero, ya se sabe, sobre cine cada uno tiene su propia opinión...