Alianza Editorial, 2.000 (primera edición 1.945)
Premios: ninguno.
Precio: 7,50 (en edición de bolsillo)
Adquisición: intercambio.
El autor
Jerome David Salinger fue un escritor nacido en Nueva York en 1.919 y fallecido en 2.010, conocido fundamentalmente por haber escrito 'El guardián entre el centeno', que se convirtió en un clásico de la literatura moderna estadounidense casi desde el mismo momento de su publicación, en 1.951. Fue su única novela y se hizo muy popular entre los críticos y jóvenes: una novela en cierta medida icónica. Se dice de la novela que es la única que ha sabido captar lo que es la adolescencia con todas sus contradicciones; la fórmula del carácter del desorientado protagonista la ofrece su propia hermana, Phoebe, cuando le dice que, sencillamente, no sabe lo que quiere. Es, por otro lado, una novela que ha sido curiosamente citada como favorita por algunos asesinos en serie y otros inadaptados. Después de haber obtenido la fama y la notoriedad con 'El guardián entre el centeno', Salinger se convirtió en un eremitaño, apartándose del mundo exterior y protegiendo al máximo su privacidad.
Sinopsis
Las peripecias del adolescente Holden Cauldfiel en una Nueva York que se recupera de la guerra influyeron en sucesivas generaciones de todo el mundo. En su confesión sincera y sin tapujos, muy lejos de la visión almibarada de la adolescencia que imperó hasta entonces, Holden nos desvela la realidad de un muchacho enfrentado al fracaso escolar, a las rígidas normas de una familia tradicional, a la experiencia de la sexualidad más allá del mero deseo.
Mi crítica
Con los clásicos, o libros que tienen una fama extremadamente notoria, como es el caso de 'El guardían entre el centeno', no estoy teniendo muy buena suerte. Véase 'Mujercitas'. No sabía qué iba a encontrar en la novela de J. D. Salinger, no sabía qué esperar de ella, pero desde luego, lo que he hallado me ha sorprendido y no en el buen sentido del término. Hay muchos que aseguran que en esta novela se esconden numerosas frases "para enmarcar", pero sinceramente, en mi opinión no hay nada más lejos de esta afirmación.
Sí, efectivamente, el protagonista es un tanto asocial, es espontáneo en sus decisiones, está harto de la hipocresía que lo rodea, es inconformista, no sabe lo que quiere, pero lo desea de manera desesperada... un chico sincero aunque no siempre diga la verdad, porque al lector sí que le cuenta todo lo que pasa por su mente sin filtros. No tiene miedo de que quien lea las páginas de este libro le juzgue. Es un adolescente al que le encanta leer y sin embargo odia estudiar. Tras todo esto, para mi Holden Cauldfiel no resulta protagonista espectacular, ni mucho menos. No me ha parecido una figura gracias a la cual haya descubierto un mundo, ni ha habido un antes y un después tras leer este libro, como quizá casi llegué a imaginar.
En su aventura por Nueva York conocerá a muchos personajes de lo más variopinto que le harán reflexionar sobre todo tipo de situaciones, temas y recuerdos. Con todos ellos mantendrá relaciones más o menos productivas, que le aportarán más o menos, dependiendo de lo que le enseñen o lo que le muestren. Todo es una potencial lección de la vida para Holden Claudfiel, que recién despierta al mundo. Y no, la respuesta es no: no he llegado a simpatizar con ninguno de estos personajes, ni tampoco con el propio Holden Claudfiel.
Sí, es un personaje que busca su sitio en el mundo a pesar de estar cada vez más perdido, y uno puede identificarse con él recordando los tiempos en los que teníamos dicha edad. A veces, pensaba: "te entiendo, Holden", pero eso me sucedió en muy pocas ocasiones. La mayoría de las veces, no he sentido ninguna conexión con él, para nada.
Me ha sorprendido el estilo narrativo que J. D. Salinger emplea en esta novela: simple (lo esperaba más intrincado), expositivo, siempre teniendo como referencia el punto de vista del protagonista, y cómo sus pensamientos de adolescente llegan sin censura al lector. Holden Claufiel se expresa con simplicidad pero siendo honesto, con ese punto de ingenuidad propio de los adolescentes pero también con la rebeldía que les caracteriza.
Hay referencias a grandes autores y novelas que me ha gustado encontrar, pero mucho más allá de eso, poco positivo podré decir de este libro. No ha sido una obra que me haya marcado, y tras leer tantas y tantas reseñas en esta línea, es lo que esperaba encontrarme. Nada menos. Siempre he sido sincera en mis comentarios en el blog y no me voy a arrugar ahora con este "clásico contemporáneo".
Conclusión
Soy consciente de que levantaré ampollas con este comentario, pero 'El guardián entre el centeno' me ha parecido una novela sobrevalorada. No pretendo ofender a sus más firmes defensores. Quizá es que debí leerla hace años y mi tiempo para disfrutarla ha expirado. No me atrevo a no recomendar un "clásico contemporáneo" como este, pero tampoco lo voy a hacer cuando no he sido capaz de disfrutarlo. De hecho, me ha costado terminarlo.