(Ediciones
Traspies, Granada, 2015, 96 páginas)
Se
puede considerar como un nuevo formato de novela gráfica. Las páginas no están
numeradas y por cada una hay un cuadro sin globos de diálogos ni textos. Éstos
últimos (son comentarios muy breves) figuran en la página anterior a la
ilustración.
La
gráfica en blanco y negro es sutil y bella, con un refinado sentido decorativo.
Las imágenes desbordan frescura.
El libro contiene cuatro relatos:
“En
el parque” trata sobre un caminante solitario que se sienta bajo un árbol a leer a Salinger. Tanto los dibujos como la
prosa son poéticos: “En eso consiste el oficio del caminante. Alimentar la
sustancia de lo efímero y lo eterno.” El arte de Girón es pura síntesis, sólo
traza los contornos de los personajes. Los negros plenos los emplea para indicar
los ámbitos nocturnos.
En
“La noche que me fui de juerga con Estela Plateada”, el protagonista se topa
inesperadamente con el héroe de historieta (Silver Surfer), con quien va a
tomar unas copas a un bar, y cuando éste cierra, el famoso personaje se retira
en su tabla llevándose a una alternadora, cuyas pupilas eran “grises como
estrellas de agua que flotan en el
infinito”.
“El
extraño caso de la mujer carbonizada” presenta a un viejo detective a punto de
retirarse. Su clima es chandleriano: “Dicen que la felicidad no se puede
comprar. Tal vez., pero aún puedes tomarte una cerveza en la calle y eso no es
poco.” Aparece, como en dos de los otros relatos, un gato que funciona como un ornato
pintoresco.
En
“Deseos” aborda al hombre sin suerte, que tira una moneda a un pozo pidiendo algo
que no se cumple Sin embargo: “No, no
mejoró la fortuna del hombre sin suerte pero, desde entonces, vivió con
esperanza.” Aquí el negro pleno es
protagonista de la figuración con el fin de referir –con la ayuda de la línea
sutil y el blanco puro-, un sugestivo bosque nocturno.
El extraño caso de la mujer
carbonizada es una obra simpática, y resulta difícil
que el lector no se encariñe con ella, como si fuera –y lo es- un exquisito
libro objeto.
Santiago
Girón Fernández (Jaén, 1963), dibujante y guionista de historietas, ha
publicado varias novelas gráficas. Se encargó de los textos de trabajos emprendidos
por artistas como Paco Nájera, Fran Carmona, Antonio Maldonado y Rafa Amat.
Germán Cáceres
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